Mons. Fernando Ramos, representante de la
Conferencia Episcopal de Chile en el Encuentro sobre la Protección de Menores
que se realiza en el Vaticano, dijo que los escándalos de abusos al interior de
la Iglesia en ese país “nos ha permitido encontrarnos con la verdad” y
“reconocer en lo que hemos fallado”.
Ha permitido “encontrarnos también con la
posibilidad de hacer justicia y de colaborar humildemente en la superación de
estas situaciones y caminar en el acompañamiento que requieren las víctimas”, señaló
el obispo horas previas al comienzo del histórico encuentro.
En declaraciones
a la oficina de prensa de la Conferencia Episcopal de Chile (CECh), Mons. Ramos
reflexionó sobre el caminar de la Iglesia local durante el 2018, un año marcado
por denuncias de abuso y encubrimiento y la expulsión del estado clerical a
Fernando Karadima, Francisco Cox, Marco Órdenes y Cristián Precht.
“El año recién pasado nos ha permitido avanzar en
la tarea de abordar en profundidad el problema de los abusos sexuales, esto ha
posibilitado que exista el espacio para escuchar a las víctimas, entender lo
que ellas han vivido, que es un dolor que afecta la vida completa de las
personas”, explicó el Secretario General de
la CECh.
El también Administrador Apostólico de la Diócesis de Rancagua expresó
que “hemos reconocido las falencias que se han
cometido al interior de la Iglesia al enfrentar este tipo de asuntos, hemos
pedido perdón, porque realmente nadie tiene que vivir esto”.
“Un delito de estas características es un hecho que
marca a las personas, produce un daño enorme. Es aún más grave que el abuso
sexual haya ocurrido en ambientes eclesiales, donde las personas deberían
sentirse particularmente seguras”, señaló.
Mons. Ramos dijo que es importante entender cómo se dan las “relaciones abusivas” para que no vuelvan a
ocurrir estos hechos y “crear realmente ambiente
sanos y seguros, de protección a los niños y jóvenes, tanto en el contexto
eclesial como también en el resto de la sociedad chilena”.
Sobre el encuentro que tiene lugar en el Vaticano entre el 21 y el 24 de
febrero, el Prelado afirmó que ayudará a “abordar
con todos los representantes de la Iglesia Católica del mundo el grave flagelo
de los abusos sexuales”.
“El Santo Padre tiene la intención de que todos los
que dirigen o representan estas conferencias tomen conciencia de lo que esto
significa, cuáles son las dinámicas de abuso, cómo enfrentarlas, cómo dar
respuesta a las víctimas, como también crear ambientes sanos y seguros en
nuestras comunidades eclesiales”, sostuvo.
Desde esa perspectiva -concluyó Mons. Ramos- “lo
que la Santa Sede está buscando es que todos sepamos exactamente lo que tenemos
que hacer y lo que no tenemos que hacer”.
Redacción ACI
Prensa
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