Durante la catequesis de la Audiencia General de este miércoles 23 de marzo, el Papa Francisco contó cómo el testimonio de su abuelo le hizo odiar la guerra.
“El odio y la rabia a la guerra, lo
he aprendido de mi abuelo, que participó en el Piave en 1914. Y él
me ha transmitido esta rabia hacia la guerra”, explicó
el Papa Francisco durante la catequesis de la Audiencia General.
A continuación, dijo que su abuelo le había contado los sufrimientos que
envuelven una guerra, “y esto no se aprende en los
libros, se aprende así, transmitiéndolo de abuelos a nietos”, defendió.
“Esto es insustituible. La transmisión de la
experiencia de vida transmitida de abuelos a nietos, algo que hoy en día
desgraciadamente no es así. Pensamos que los abuelos son material de descarte,
cuando son la memoria viva de un pueblo. Los jóvenes y los niños tienen que
escuchar a los abuelos”, concluyó.
LA BATALLA DEL PIAVE
La batalla del Piave, conocida también como “la
batalla de mediados de junio”, se enmarca dentro de la Primera Guerra
Mundial y supuso una victoria para el ejército italiano.
En junio de 1918, se lanzó una gran ofensiva austrohúngara al ejército
italiano con el objetivo de romper la línea defensiva del río Piave, que
recorría varias provincias del Véneto italiano.
La batalla terminó en una gran derrota para el ejército austrohúngaro,
en gran parte gracias a las decisiones del general italiano Diaz, que se enteró
de la hora exacta del ataque austríaco por unos desertores enemigos del bando
contrario.
Cabe recordar que el 3 de septiembre de 2014, el Papa Francisco rezó
ante el monumento militar de Redipuglia (Italia) por los caídos en todas las
guerras, con motivo del centenario del comienzo de la Primera Guerra Mundial, “una enorme tragedia –afirmó el Pontífice- de la que he escuchado tantas historias dolorosas por
boca de mi abuelo que combatió en el Piave”.
POR ALMUDENA
MARTÍNEZ-BORDIÚ | ACI Prensa
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