Un hombre de 56 años de Acarigua (Venezuela) fue denunciado por su hija adolescente ante las autoridades policiales de Portuguesa por abusar sexualmente de ella desde hace más de tres años. Se valía de prácticas y rituales de santería para amenazarla, y lo hacía bajo el consentimiento de su propia madre, según informa Mariangel Moro Colmenárez en El Pitazo.
Padre y madre de la víctima
fueron detenidos el pasado 31 de agosto por funcionarios del Cuerpo de
Investigación Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), subdelegación
Acarigua. Sus identidades se reservan por razones de ley.
El
acusado manifestaba tener una conexión con un espíritu, y bajo amenazas abusaba
sexualmente a su hija de 16 años. La joven denunció que su hermana mayor, de 21 años, e
hijastra del investigado, también había sido violada durante años por el mismo
sujeto.
La
madre, una ama de casa de 38 años de edad, sabía lo que ocurría y optó por
callar el crimen, por lo que ha sido
señalada de complicidad.
El último ataque del hombre contra su hija fue el mismo 31 de agosto. La
adolescente se cansó de los abusos de su padre, y acudió a la sede del
Cicpc-Acarigua para interponer la denuncia.
Los investigadores de la
Policía Científica se trasladaron a la urbanización Gonzalo Barrios, en el sur
de Acarigua, lugar de residencia de la familia, donde practicaron la detención de ambos padres de
la adolescente. La investigación está a cargo de la Fiscalía Séptima del
Ministerio Público, en responsabilidades penal contra Niños, Niñas y
Adolescentes.
En el lugar encontraron altares e imágenes asociadas a la santería. Los
dos detenidos dijeron a las autoridades que un espíritu les
ordenaba cometer las violaciones a las jóvenes para «limpiarlas».
Secretaría RIES
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