Ante el aumento de solicitudes de asistencia por
parte de fieles que creen estar afectados por el demonio, la arquidiócesis de
Milán en Italia, encabezada por el Cardenal Angelo Scola, habilitó una línea de
atención y nombró más sacerdotes exorcistas para facilitar el complejo proceso
de discernimiento en estos casos que la Iglesia toma muy en serio.
Mons. Angelo Mascheroni, Obispo Auxiliar de Milán y responsable del
colegio de exorcistas de la arquidiócesis explicó que las acciones se tomaron "a partir de la necesidad" y se trata de
una mejor coordinación de los esfuerzos pastorales.
El Arzobispado dispuso un teléfono central habilitado durante las tardes
que puede dirigir a los fieles al exorcista más próximo. "Quien lo necesita puede llamar y encontrar una
persona que le da las direcciones en la zona para evitar que la gente deba
viajar grandes distancias" y resaltó que "la
Iglesia debe escuchar a estas personas, es parte de su ministerio".
La atención pastoral de los fieles que temen sufrir un ataque del
maligno es cuidadosa y atenta, en la cual se disciernen las posibles causas
naturales y espirituales de las situaciones. "En
el ministerio de los exorcistas es fundamental escuchar y dar consuelo, porque
vienen personas deshechas que maldicen a los demás", relató el
Prelado. "Todos son recibidos con gran
serenidad y no se puede permitir su desaliento, porque el Señor es más fuerte
que el demonio".
El Cardenal Angelo Scola, arzobispo de Milán, habilitó seis nuevos
sacerdotes exorcistas ante el número de solicitudes de ayuda por parte de los
fieles.
Los doce sacerdotes exorcistas informaron a la arquidiócesis los lugares
y horarios en los cuales se encuentran disponibles. "Les
sugerí llevar su propia agenda y no ser abrumado por la gran cantidad de
trabajo", afirmó monseñor Mascheroni. "Las
conversaciones deben ser de dos a cuatro al día, no más, de otra forma sería
demasiado". El criterio de discernimiento es complejo: "involucra la mente, la ética, el dolor físico y
psíquico".
El Prelado también explicó que los casos de verdadera presencia del
demonio son raros, y que muchas personas que acuden a los exorcistas lo hacen
porque padecen dificultades que atribuyen al maligno. En esos casos "es importante discernir bien las situaciones",
expresó el Obispo.
Los exorcistas también se ocupan de observar la vida de fe de las
personas, después de escucharlas. "Les
pregunto si van a misa los domingos, cuándo se confesaron por última vez... Si
una persona no se confesó en diez años le digo "ve a primero a confesarte
y luego todo vale".
Finalmente, Mons. Mascheroni expresó la voluntad de la Iglesia de ayudar
a quienes sufren este tipo de situaciones para que no sean víctimas de brujos y
estafadores que pueden sacar un beneficio económico de las penalidades de estas
personas.
"La Iglesia debe escuchar a estas personas, es
parte de su ministerio. Entonces, si el demonio está verdaderamente presente,
el Evangelio nos dice cómo se comportó Jesús: orando, ayunando y amando", concluyó.
Redacción ACI
Prensa/EWTN Noticias
No hay comentarios:
Publicar un comentario