Esta es, una de las iniciativas más interesantes de Benedicto XVI.
El atrio de
los gentiles era el único lugar, el más exterior, del Templo de Jerusalén, al
que podían acceder los no judíos, a los que denominaban los paganos. El Papa, con
esta iniciativa, intenta romper el muro que separaba creyentes con no creyentes
e instaurar un lugar de diálogo, de intercambio de ideas.
El cardenal
Ravasi, su organizador como presidente del Consejo Pontificio para la cultura,
dice en la presentación:
"El
atrio de los gentiles es lugar de investigación de itinerarios comunes, sin
ninguna variante, sin ninguna distracción o dispersión; un ámbito donde la
escucha se convierte en primordial a pesar de las diferencias."
Nuestra
sociedad, que se precia de su cultura, da demasiadas veces, en los media, la
imagen de intolerancia. Unos y otros se acusan mutuamente de todos los males de
la tierra y se confunde diálogo con discusión, cuando no se transforma en una
vulgar contienda. En el Atrio de los Gentiles no se trata de convencer a nadie,
sino de respetar las identidades propias. Ravasi nos indica la finalidad de
este diálogo:
"Este
diálogo está destinado a desarrollarse en torno a grandes cuestiones radicales
sobre la vida y la muerte, la verdad y la mentira, el amor y el dolor, el bien
y el mal, la libertad y la solidaridad, la palabra y el silencio."
Se
desarrolla en distintas ciudades del mundo. El de Barcelona, estos días, 17 y
18 de mayo, en la Universidad de Barcelona, el Museo nacional d'Art de Catalunya,
l'Institut d'Estudis Catalans y en la Basílica de la Sagrada Familia.
Participan personas tan variadas (escojo solamente algunos), como: Albert
Serra, director de Cine, Los rectores de la Universidad de Barcelona y la Ramón
Llull, Lidia Pujol, actriz y cantante, Francesc Torralba y Xavier Rubert de
Ventós, ambos filósofos, Salvador Giner, sociólogo, David Jou, físico y
poeta...
Y acabo con
la cita de un escritor francés, Pierre Reverdy, tomada de la presentación de
Ravasi:
"Hay
ateos profundamente radicales que, de hecho, se ocupan de Dios con más
profundidad que muchos creyentes superficiales y frívolos, y hay creyentes que
se interesan por el hombre y por el mundo mucho más que algunos ateos
insignificantes y sarcásticos".
Ojalá en nuestra sociedad, en todos
los ámbitos, se establezcan verdaderos lugares de escucha y diálogo, única base
sólida para encontrar soluciones a los problemas que nos atenazan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario