Bueno, no
del todo, pero casi. Resulta que Jesús deseaba a los apóstoles que su alegría
fuera plena y pedía al Padre "que ellos mismos tengan mi alegría
cumplida" y nosotros, parece que nos empeñamos en hacer del cristianismo
algo triste y tremendamente aburrido. Hasta hay quien describe el Cielo como un
"tocar la lira eternamente"...Y hay quien bromea y dice que la gente
verdaderamente divertida estará en el infierno...
La alegría
que Jesús desea es el gozo de sentirse amado, de no sentirse solo. La alegría
de vivir solidariamente, ayudando a los demás. La alegría que se siente cuando
vencemos las dificultades, cuando nos vencemos a nosotros mismos.
Si nuestro
cristianismo nos hace sentir culpables, nos hace sentir miedo ante la vida,
hace que sintamos la angustia de la soledad..., hemos de revisarlo
inmediatamente, porque ese cristianismo es falso.
¿No nos dijo Jesús: "Vuestra
alegría nadie os la podrá quitar"?
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