Santa Escolástica fue una religiosa italiana, hermana de San Benito de Nursia. Ambos se consagraron a Dios desde muy jóvenes y compartieron la espiritualidad benedictina.
De acuerdo a fuentes benedictinas, mientras que su hermano Benito
residía en Monte Casino (Italia), ella se estableció en el monasterio de
Plombariola, donde llegó a ser abadesa.
Sin embargo, otras fuentes indican como probable que haya vivido en una
ermita, junto a una o dos religiosas, ubicada en la base del “Monte Casino” (Montecasino) en cuya parte más
alta estaba el célebre monasterio.
Santa Escolástica nació hacia el año 480, en el municipio italiano de
Nursia, en el seno de una familia noble. La historia más difundida sobre la
Santa señala que solía pasar la mayor parte del tiempo en oración y, por lo
menos una vez al año, ir a visitar a su hermano y compartir con él temas
espirituales. San Benito salía de su monasterio e iba a su encuentro, dado que
Escolástica no podía ingresar a Montecasino.
Sobre la última vez que los hermanos se encontraron, San Gregorio
escribió una hermosa historia. De acuerdo a su
relato, Escolástica, presintiendo que no volvería a ver más a Benito, le rogó
que no partiera esa noche sino al día siguiente, a lo que inicialmente se negó
San Benito, con el deseo de no contravenir las reglas de su monasterio.
Entonces, Santa Escolástica le pidió a Dios con fervor que interviniera, e
inmediatamente estalló una fuerte tormenta que impidió el regreso de su
hermano. Ambos pasaron la noche en oración, hablando de las cosas de Dios y de
las delicias espirituales. Tres días después, Escolástica murió. La noche de su
muerte Benito tuvo una visión del alma de su hermana ascendiendo al cielo en
forma de una paloma.
Esta historia revela la intensidad espiritual del amor fraterno entre Escolástica
y Benito, y el deseo de ambos hermanos de vivir la santidad como obediencia
perpetua a Dios, asentada sobre la confianza en Él.
Santa Escolástica de Nursia fue la fundadora de la rama femenina del
monaquismo benedictino. Es patrona de las monjas, de los niños que sufren
convulsiones y de algunas ciudades como Le Mans en Francia, o Alcolea de
Calatrava en España. También se pide su intercesión en las tormentas y las
lluvias torrenciales. Su fiesta se celebra el 10 de febrero.
Redacción ACI Prensa
No hay comentarios:
Publicar un comentario