Esta época de Cuaresma nos reta a ser creativos a la hora de vivir nuestra espiritualidad. En algunos momentos (tengo que confesarlo), nos lleva a pensar un poco de manera negativa, algo así como con poca esperanza, ¿te pasa a ti también?
Pero encontrarse con
este tipo de historias como la que quiero compartirte hoy, nos llena de ánimo
para seguir, nos alegra el corazón.
El video es un testimonio
genial, fue publicado por nuestros hermanos del Opus Dei y se titula: «Amor
sobre ruedas», te invito a verlo hasta el final.
FE Y AMOR VERDADERO
Nos encontramos con la
historia completa de Begoña y Javier, una pareja fuerte que ha sido capaz de
superar las dificultades de la vida, partiendo de algo muy especial: el amor y la fe.
Cuando al comienzo de la
historia, Javier nos dice: «… a los nueve meses
quedé tetrapléjico», inmediatamente sentí como un «no sé qué» en el
pecho. Algo así como, uy pero ¿cómo es posible que
una persona empezando su historia de pareja pase por esto?
De una manera sencilla y
sincera, ambos comienzan a narrar sus temores, dudas, impresiones de aquel
momento y las mutuas reacciones. Solamente queda dejarse sorprender por lo que
logra hacer la fe y el amor verdadero.
En la familia de Begoña y
Javier todo va sobre ruedas (literalmente) desde hace unos 20 años. Pero esto
no significa que sean infelices o que no puedan ayudar a los demás.
De ninguna manera, sirviéndose
del amor mutuo, se hacen anunciadores del verdadero amor. ¡Qué hermoso!
«NO ERA PRACTICANTE PERO AHORA LA FE NOS HA SALVADO…»
No podemos decir que la
enfermedad o el sufrimiento hayan sido enviados por Dios. Pero lo que sí
podemos decir es que Dios se sirve de todas estas
experiencias para mostrarnos aún más su presencia amorosa.
De manera que es en medio de
estas situaciones en las que se da la verdadera profesión de fe y por ende, se
descubre la presencia de Dios en la vida.
Y es que los momentos
complejos de la existencia, vistos a la luz de la fe, se hacen como medios
pedagógicos para aclarar la fe y responder de la mejor manera a los retos del
día a día. Siendo así una manera de acercarse a Dios más sinceramente.
EL AMOR QUE DA FRUTOS
Aun en medio de las
situaciones particulares esta familia ha podido hacer frente a lo que se impone
como imposible, y que gracias a la vivencia del amor se convierte en
oportunidad.
Su
amor da fruto y es bastante conmovedor ver cómo aun en medio de los retos del
día a día, son una familia abierta a la vida. Lo que nos llevaría a
preguntarnos a nosotros mismos sobre el valor que damos a nuestras vidas y a la
de los demás…
En repetidas ocasiones
tendemos a derrumbarnos por cosas que creemos nos superan, llegando a límites
inimaginables en los que se comienza a relativizar el valor de la vida en todas
sus dimensiones.
Este testimonio, por ejemplo,
es ciertamente un sacudón que nos debería llevar a reconocer que ante todo, se
impone el amor verdadero y la fe en un Dios que no abandona.
AMOR QUE SE PONE AL SERVICIO
La Cuaresma año tras año nos
invita a realizar ejercicios de piedad, ayuno, oración, caridad. Ejercicios que son
inmensamente valiosos pero que si se ven desprovistos de un trasfondo de fe,
espiritualidad sana, amor, donación y generosidad… se reducen a simples actos
de piedad.
Este
tiempo es también la oportunidad de retarnos a nosotros mismos. De descubrir
que somos seres limitados, frágiles y necesitamos del amor de Dios.
Estos 40 días no se nos pueden
esfumar de las manos, como un tiempo cualquiera que va pasando en el
calendario. Debe ser la oportunidad suprema para descubrir esa cruz que tantas
veces hemos ignorado en nuestras vidas.
O que simplemente tratamos de
no tener presente, por miedo, por falta de fe, por… tantas razones. Si quieres
vivir este tiempo más unido a Dios te recomiendo el ebook gratuito «40 días con
Jesús», ¡es excelente!
ARMÉMONOS DE VALOR PARA TOMAR ESA CRUZ
Hagamos el esfuerzo por
reconocer que es nuestra y que también desborda nuestras vidas de la
oportunidad de donarnos y de recuperar lo esencial, el amor que nos trae la
presencia de Dios en la vida.
Solo desde la vivencia real
del amor de Dios, vivencia que implica necesariamente la fe, se puede tomar la
cruz con seriedad y sacar de ella oportunidades de salvación personal y familiar.
Ánimo, esta Cuaresma apenas
comienza, aún hay tiempo, no lo desperdiciemos. Y recuerda, es un camino que
todos estamos luchando por hacer, ¡no estás solo!, nos
vemos en la oración
Escrito por Mauricio Montoya
No hay comentarios:
Publicar un comentario