ROMA, 20 May. 17 / 01:25 pm (ACI).- El Arzobispo Emérito de
Bolonia, Cardenal Carlo
Caffarra, señaló recientemente que Satanás quiere “construir una anti-creación real”, y se vale de
elevar el aborto
a un “derecho subjetivo” y atacar el matrimonio entre un hombre
y una mujer.
En una ponencia ante 100 defensores de la vida y la familia reunidos en el Rome
Life Forum, el 19 de mayo en Roma, el Cardenal Caffarra, que ayudó a fundar el
Pontificio Instituto Juan Pablo II
para Estudios sobre el Matrimonio y la Familia, en 1981, advirtió además
que “ya no
somos testigos sino desertores, si no hablamos abierta y públicamente”,
y destacó que la Marcha por la
Vida, que se celebra hoy en la capital italiana “es por tanto un gran testimonio”.
“Hay dos pilares de la creación”, explicó el Cardenal. El primero, dijo, es “la
persona humana en su irreductibilidad al universo material”, que es
destruido por “la elevación axiológica del aborto a
un derecho subjetivo”.
El segundo pilar, indicó, es “la unión
conyugal entre un hombre y una mujer, el lugar en que Dios crea nuevas personas
humanas ‘a Su imagen y semejanza’”.
“El ennoblecimiento de las relaciones homosexuales,
cuando son igualadas al matrimonio, es la destrucción del segundo pilar”.
El Arzobispo Emérito de Bolonia indicó que “en
la raíz de esto está el trabajo de Satanás, que quiere crear una anti-creación
real”.
“Este es el
último y terrible desafío que Satanás está lanzando contra Dios”, advirtió, con la que el demonio le dice a Dios: “Estoy
demostrándote que soy capaz de construir una alternativa a tu creación. Y el
hombre dirá: Se está mejor en la creación alternativa que en tu creación”.
El Cardenal indicó que “lo que sucede en el
corazón del hombre” es que “Jesús, la
Revelación del Padre, ejerce una fuerte atracción hacia Él. Satanás trabaja
contra esto, para neutralizar la fuerza atractiva del Crucificado-Resucitado”.
“La fuerza de la verdad que nos hace libres actúa
en el corazón del hombre. Es la fuerza
satánica de la mentira la que nos hace esclavos de nosotros”, señaló.
El Cardenal Caffarra indicó que “la lógica
que preside el ennoblecimiento del aborto” es “la más profunda negación de la
verdad del hombre”.
“La razón por la que un hombre no debe derramar la
sangre de un hombre es que el hombre es
la imagen de Dios. A través del hombre, Dios habita en Su creación. Esta
creación es el templo del Señor, porque el hombre habita en ella”, dijo.
“Al ennoblecer el asesinato de los humanos, Satanás
ha sentado los cimientos de su ‘creación’: sacar de la creación la imagen de
Dios, ocultar su presencia en ella”, añadió.
Por otra parte, el “ennoblecimiento de la
homosexualidad”, indicó, “niega totalmente
la verdad del matrimonio, la idea de Dios el Creador con respecto al
matrimonio”.
“La
Revelación Divina nos ha dicho cómo Dios piensa en el matrimonio: la
unión legal de un hombre y una mujer, la fuente de la vida. En la mente de
Dios, el matrimonio tiene una estructura permanente, basada en la dualidad del
modo humano de ser: feminidad y masculinidad. No dos polos opuestos, sino el
uno con y para el otro”.
“Solo así el hombre escapa de su soledad original”, dijo el Arzobispo Emérito de Bolonia.
La respuesta a esta situación, dijo el Cardenal Caffarra, “es simple: dentro de la confrontación entre creación y
anti-creación, estamos llamados a dar
testimonio. Este testimonio es nuestra forma de estar en el mundo”.
“Testimonio significa decir, hablar, anunciar
abierta y públicamente. Alguien que no da testimonio de esta manera es como un
soldado que huye en el momento decisivo en una batalla”.
El Cardenal italiano reconoció que “el
anuncio del Evangelio del Matrimonio y la Vida hoy se realiza en un contexto de
hostilidad y desafío, de incredulidad”, pero advirtió que la alternativa
es o callar sobre el Evangelio o decir “otra cosa”.
En palabras posteriores a su ponencia, el Cardenal Caffarra recordó la
carta que recibió de Sor Lucía, vidente de la Virgen de Fátima, cuando
enfrentaba dificultades para establecer el Pontificio Instituto Juan Pablo II
para Estudios sobre el Matrimonio y la Familia.
En las últimas palabras de su carta, Sor Lucía le dijo que “vendrá un tiempo
cuando la batalla final entre el Reino de Dios Satanás será sobre el matrimonio
y de la familia”.
Sor Lucía, dijo el Cardenal, subrayó que quienes trabajan en defensa del
matrimonio y la familia “experimentarán pruebas y
tribulaciones”, pero “no teman. Nuestra
Señora ya ha aplastado su cabeza”.
Esta conferencia, dijo el Arzobispo Emérito de Bolonia, fue “basada en estas palabras de Sor Lucía, y por tanto en la
convicción de que lo que Sor Lucía dijo en esos días está siendo cumplido en
estos días nuestros”.
Con información de Edward
Pentin.
No hay comentarios:
Publicar un comentario