Leer la Biblia te permite descubrir cómo fue que Dios se reveló al ser humano; estableció una alianza con el hombre, le prometió Su amor y salvación y lo cumplió.
Por: Alejandra María Sosa Elízaga | Fuente:
Ediciones72.com
Aprovecha para leerla, saborearla, meditarla, permitirle que sea lámpara para
tus pasos, luz en tu sendero. Considera que tienes al menos diez razones para
adentrarte en el fascinante mundo de la Sagrada Escritura:
1. Conocer a Dios: Sería
para nosotros imposible saber algo acerca de Dios si Él no nos lo hubiera
revelado. Y lo hizo a través de Su Palabra. Así que para que puedas conocerlo y
consiguientemente entablar con Él una relación personal de amor y confianza, es
indispensable que leas Su Palabra.
2. Conocerse uno mismo: La
Palabra de Dios "penetra hasta las fronteras del alma y del espíritu"
(Heb 4,12). Leerla te permite conocerte a fondo, pero no desde la óptica humana
de juicio y condena, sino desde la mirada esperanzadora y misericordiosa de
Dios.
3. Recibir luz: Dice el salmista que la Palabra es “lámpara para
sus pasos, luz en su sendero” (ver Sal 119, 105). Siempre tiene
un mensaje para iluminar tu situación actual, siempre tiene algo pertinente que
decirte; a veces te consuela, a veces te exhorta, a veces te tranquiliza, a
veces te inquieta y te sacude, pero puedes tener la certeza de que siempre te
da lo que tu alma necesita.
4. Dialogar con Dios: Hay quien cree que orar consiste sólo en
hablar y hablar con Dios pues Él no dice nada. Pero Dios
sí habla: a través de Su Palabra. Leer la Biblia te permite escuchar lo que
quiere decirte, para poder después responderle, dialogar con Él y, con Su
gracia, hacerlo vida.
5. Participar de la
reflexión y oración de toda la Iglesia: Cuando lees los textos que
se proclaman cada día en Misa o en la Liturgia de las Horas, te unes a millones
de católicos en todo el mundo que en ese mismo momento están leyendo,
escuchando, reflexionando, orando con esas mismas palabras. Leer así la Palabra
te permite participar activamente en la unidad y universalidad de la Iglesia.
6. Situarte dentro de la
historia de la salvación: Leer
la Biblia te permite descubrir cómo fue que Dios se reveló al ser humano;
estableció una alianza con el hombre, le prometió Su amor y salvación y lo
cumplió. Conocer el pasado te permite comprender el presente y vivirlo
desde el gozo de saber que formas parte del pueblo de Dios, que eres miembro de
Su rebaño, oveja del Buen Pastor.
7. Conocer, comprender y
amar a la Iglesia: Leer la Biblia te permite conocer
la Iglesia de la que formas parte para comprenderla y amarla más, y gozarte de
pertenecer a ella sabiendo que fue fundada por Cristo, y aunque está formada
por seres humanos susceptibles de fallar, como tú y como yo, es conducida a
través de la historia, por el Espíritu de Dios.
8. Anunciar la Buena Nueva: Leer
la Biblia te permite cumplir el mandato de Jesús de ir por todo el mundo a
anunciar la Buena Nueva (ver Mc 16, 15). Sólo si conoces la Escritura puedes
compartir Su luz con otros.
9. Conocer y defender la
fe: Dice San
Pablo que todo texto de la Escritura es útil para enseñar (ver 2Tim 3,16).
Conocer la Biblia te permite enfrentar a quienes atacan tu fe católica y
responderles no sólo con caridad sino con argumentos sólidos.
10. Vivir con libertad y
alegría: Leer la Biblia te da libertad y alegría. La libertad de que gozan
quienes abandonan la inmovilidad de las tinieblas y caminan hacia Aquel que es
la Luz; la alegría de saber que Él está contigo todos los días hasta el fin del
mundo, y la alegría de anunciarlo a los demás, como pide el Papa Francisco.
Hasta aquí las diez razones. Cabe aclararte que sólo son las diez primeras. Lee la Biblia y descubrirás que hay otras diez, y diez más, y más, y más...
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