Años atrás yo era vendedor de Camiones en Plaza Norte, recuerdo que un jefe de ventas, de una marca de la competencia llamaba insistentemente a la administración del centro comercial, porque encontró sucio su stand, al parecer hubo una actividad al costado suyo de otra marca y lo dejo todo sucio, el personal de limpieza demoraba en llegar y el jefe de ventas insistía en su queja vía telefónica.
Minutos
después apareció un señor de aspecto Japonés muy bien vestido era el mismo
dueño del centro comercial, se sacó el saco y se puso a limpiar ante las
miradas atónitas de ejecutivos del sector vehicular, la verdad sentí vergüenza
ajena y me acerque a ayudarlo mientras el asentía con una sonrisa firme al
estilo asiático.
Fue
un gran ejemplo y aprendizaje para mí, me dio una gran lección.
Tiempo
después llegó el personal de limpieza al parecer estaban en cambio de turnos
motivo por el cual demoró su respuesta inmediata, el resto solo fueron
espectadores de pronto muchos no sabían quién era, ahora entiendo por qué la familia Wong, es tan exitosa...
Del muro de Raúl Salazar en LinkedIn
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