LO QUE VE ISABEL RAMÍREZ, RESPONSABLE DEL MINISTERIO DE ALABANZA DE RENOVACIÓN CARISMÁTICA EN ESPAÑA
El ministerio nacional de alabanza de Renovación
Carismática al recibir el Premio ReL 2023
La música de
alabanza y adoración adquiere
una relevancia creciente en la Iglesia en España, al integrarse cada vez más
en grupos de oración, grupos de catequesis juvenil como LifeTeen o grupos de adultos, y en métodos de kerigma y evangelización como Alpha e incluso en las misas con sus
cancioneros.
Ayuda el hecho de que esta música
está disponible en Internet, y allí la encuentran personas que descubren o
redescubren la fe y oran con ella.
En muchas parroquias de
Hispanoamérica hace años que se sabe que la música es
prioritaria a la hora de la celebración y también de la evangelización, especialmente juvenil y de alejados, y en
España se va consolidando esa convicción.
ReligionEnLibertad ha concedido este año 2023 su premio de Música al
Ministerio Nacional de Alabanza (MNA) de la Renovación
Carismática Católica en España, que crea canciones y evangeliza con la música
desde el año 2000, lanzándose recientemente a los podcasts y videoclips. En la
actualidad, el MNA está formado por veinticuatro miembros, que
viven en lugares muy distantes de toda España. La más joven tiene 23
años y el de más edad 69. La pandemia, explican, les acabó de impulsar a nuevos
formatos y plataformas (por ejemplo, aquí en Spotify).
Su responsable desde 2018 es Isabel Ramírez Domínguez, de Huelva, con quien hablamos
de algunos retos generales de la música cristiana hoy, y algunas especificidades de los
ministerios (servicios) en entornos carismáticos.
HACER
MÚSICA DE ALABANZA EN ESPAÑOL
Uno de los retos se da en el
origen de muchas canciones que llegan desde EEUU, en inglés o
traducidas, y proceden, al
90%, de tan solo 4 iglesias o
productoras: Hillsong,
Bethel Music, la iglesia evangélica Passion City, de Atlanta y la iglesia
evangélica Elevation, en Carolina del Norte.
"Esas
productoras ejercen, en cierto modo, un monopolio de la música cristiana. Cuentan con un fuerte respaldo
económico y con recursos logísticos importantes, además de músicos preparados
técnicamente y con dedicación completa, cosa que no es lo habitual en ambientes
católicos", constata Isabel.
Son canciones que es innegable
que han ayudado a rezar a millones de cristianos. Pero
tienen sus puntos ciegos. "A menudo dejan mucho que desear las traducciones que se
hacen en español, bien porque utilizan giros extraños, bien porque algunas letras pueden chocar con la doctrina católica,
cuando son cantos de otras denominaciones cristianas. Hay que ser cuidadosos
con estas cuestiones", advierte Isabel Ramírez.
Por eso, sin despreciar nada
bueno que sirva para orar y alabar a Dios, ella propone "componer en español y desde nuestra cultura; hay que lanzarse e invocar la creatividad del Espíritu; lo bueno y ungido llega y cala".
RECUPERAR
CANTOS ANTIGUOS, Y APROVECHAR INTERNET
Una experiencia reciente entre
los músicos de Renovación Carismática es que constatan que "algunos cantos 'antiguos', cuando se
usan, pese a ser totalmente distintos de 'lo que se lleva' hoy, siguen siendo vehículo de bendición en las asambleas de
oración". Se refiere a canciones de los años 70
u 80, musicalmente distintos al 'worship actual', pero que dan un fruto
espiritual visible.
Por su parte, la Renovación Carismática de España ya ofrece gratis y abierto todos los
temas de sus discos de los
últimos años en YouTube, Spotify y otras plataformas. "Hace
años que lo teníamos en mente, pero por distintas cuestiones no hemos podido
ofrecerlo así hasta ahora. Nuestras canciones ya pueden encontrarse ahí, gratis.
Pero recordemos que para hacer cosas de calidad es necesario un apoyo económico, porque el mercado tiene
muchos artistas y para ser visibles hay que hacer bien las cosas", detalla
Isabel. "Sin un producto de calidad, no
llegas, y si no llegas, el mensaje tampoco lo hace y la evangelización no se da".
Poco a poco, asegura, en la
Iglesia y la Renovación Carismática, los cristianos se van dando cuenta de
esto, y apoyan la evangelización con la música, también económicamente.
LOS QUE
"ALABAN" SIN COMPROMETERSE EN NADA
Un fenómeno novedoso
en España, y positivo, es
que muchas personas están descubriendo la fe y algo de alabanza en retiros y
encuentros, como Alpha, Retiros de Emaús, Effetá
y otros.
Algunos deciden "perseverar" y reunirse para alabar juntos con cierta frecuencia. Otros van a más y más
retiros o encuentros donde haya alabanza y adoración. Hay sacerdotes que han descubierto la alabanza hace no mucho
y organizan encuentros así,
aunque lo hacen sin integrarse o coordinarse con comunidades preexistentes más
maduras, sin implicarse en sus itinerarios.
Llega el momento en que un
cristiano debe madurar y
comprometerse con una
comunidad, con sus normas, horarios y estabilidad, pero se observa que muchos conversos o retornados a la fe evitan dar ese paso, lo difieren infinitamente. "Hay que enraizarse en una comunidad en la que
crecer y compartir la fe y la vida", pide Isabel.
"Estos nuevos
grupos de alabanza que surgen en parroquias y que están viviendo ahora las
mieles de esta manera de orar deben ser precavidos. Hay que acompañar a estos hermanos
nuevos, traerlos a la comunidad. No puedes hacer vida cristiana tú solo, el
mundo tira mucho y estamos en una batalla constante. La
alabanza te debe llevar a un cambio de vida, ha de convertirse en
vida. No es un fin en sí mismo", advierte
Isabel.
LA
UNCIÓN: VA MÁS ALLÁ DE LA TÉCNICA
Más allá de la técnica musical y
los medios de calidad, en la música de alabanza y adoración lo que se busca es
la "unción", que es la capacidad
de conectar a la
persona con Dios. Pero la unción es algo misterioso, que
depende de "cómo y cuándo se canta", de
"dejarse hacer y ser dóciles a la voz del
Espíritu Santo".
"La música
ungida es la que lleva a Dios, porque le pone a Él en el centro. Eso es,
precisamente, lo que hace la alabanza: situar a Dios en el
lugar que le corresponde. Cuando servimos a Dios con la música,
partimos de un punto inicial, -que es cómo hemos llegado cada uno a esa
reunión, con nuestros problemas, cansancios y nuestras historias- para conducir
a la persona a la otra orilla, que es donde Dios nos está esperando", detalla.
"Sabemos que
la industria Hillsong y todas las demás iglesias que surgen a partir de ese
huracán usan ciertos acordes y melodías que te llevan a 'sentir'. Eso
está estudiado. ¡La neurociencia también puede usarse al servicio del
Evangelio! La música puede acercarte a un éxtasis, alargar un tema
repetido, hacerte sentir... pero esto no da fruto si no se presta atención a
lo que Dios quiere en ese momento para su pueblo. El punto
central es Cristo. La comunidad debe crecer mirándolo solo a Él. El carisma de
liderazgo en la alabanza consiste en llevar al pueblo allí donde Dios quiere.
Esto a veces 'se siente' y otras no, pero da fruto siempre".
Por otra parte, la alabanza no es escuchar música de alabanza en radio o
Spotify. Uno puede cantar y alabar a Dios en su casa fregando
platos o en el coche, y será
bueno, pero su lugar específico es la comunidad cristiana, según lo que pedía
Jesús: "Donde dos o más se reúnen en mi nombre, allí estoy yo".
EL
ESPÍRITU SANTO ESTÁ DETRÁS
Lo que es innegable es que la
música de alabanza y adoración, que durante décadas estuvo limitada sólo a
entornos evangélicos o pentecostales y de la Renovación Carismática
Católica, con el paso de los años ha ido llenando los
cantorales parroquiales, de catequesis juvenil y de encuentros de evangelización.
"Creemos que es
un signo de que es una música ungida y que toca los corazones,
porque el Espíritu Santo está detrás de ella. La Renovación Carismática, desde
su nacimiento hasta hoy, se ve a sí misma como ese grano de trigo bajo tierra,
que muriendo da fruto. Parte de este fruto lo vemos ahora. Es parte de la
promesa de reavivamiento y renovación que anunció San Juan XXIII al pedir una
'nueva primavera'", considera Isabel.
"Más allá de
los medios, Dios sigue invitándonos a soñar a lo grande y a esperar
en sus promesas. ¿El futuro? Sólo Dios lo conoce", concluye.
"Te alabaré por
siempre" es el último videoclip del MNA de la Renovación Carismática en
España y uno de los temas que cantaron al recibir el Premio ReL de Música:
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