¿POR QUÉ TODO EL MUNDO HABLA DE BUSCAR SU PROPÓSITO DE VIDA? ¿YO TAMBIÉN DEBO ENCONTRARLO?
¿Se han puesto
de acuerdo todos en las redes sociales y el Internet para bombardearme con
cursos, talleres, podcasts, artículos y miles de herramientas para encontrar mi
propósito?
Ya sé, tienes razón, puede ser
abrumador escucharlo por todas partes. Pero déjame decirte que esta búsqueda no
es algo nuevo para la humanidad.
Si revisas un poquito de
historia, te darás cuenta de que los filósofos griegos, los autores clásicos,
los personajes del Antiguo Testamento e incluso en el relato bíblico del
Génesis, se habla de esta búsqueda de sentido del hombre.
FUIMOS CREADOS PARA LA PLENITUD
Lo primero que tienes que
saber es que las personas fuimos creadas para la eternidad, por eso sentimos
ese deseo tan grande de plenitud que a veces no sabemos cómo explicar.
Dios
nos creó a cada uno por amor y para amar. Y aunque
las personas somos muy limitadas, el amor de Dios es infinito y por eso,
sentimos que debemos amar de una manera tan plena que el corazón se nos quiere
salir del pecho.
Por último, pero no menos
importante, fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios. Y mientras más
reconozcamos eso de Dios que se refleja en nosotros, más podremos saber cómo
responder a esa plenitud.
PROPÓSITO Y AUTENTICIDAD
En el punto anterior te decía
que mientras más reconozcas ese parecido que tienes con Dios, más podrás llegar
a esa plenitud. ¿Y eso cómo se logra?
El
propósito de vida se relaciona mucho con la autenticidad, con el ser tú mismo. Por eso, conocerte bien es
tan importante, porque el propósito lo debes buscar en tu interior.
Aprovecha esos momentos de
soledad y desconexión para pensar en tu vida y hablar con Dios. Mientras más te relaciones con Jesús y lo conozcas, tendrás más claridad
en ese camino.
Es importante también salir de
ti mismo para buscar ayuda en los demás y relacionarte con personas que te
quieran y te ayuden a sacar lo mejor de ti.
¿ESTÁ BIEN QUERER SER FELIZ?
Esa búsqueda del propósito y
nuestras ganas de plenitud siempre se relacionan con la felicidad humana. Todos queremos ser felices y Dios también quiere que seamos felices.
Ser feliz significa darle
sentido a tu existencia y ver de forma positiva la situación que en ese momento
estás viviendo. Eso no quiere decir que debas evitar el dolor.
Todos somos frágiles y en nuestra
naturaleza humana está inscrito el sufrimiento, pero depende si lo queremos vivir desde una
posición de víctimas o si por el contrario, tratamos de sacar lo mejor de esas
situaciones difíciles por las que todos pasamos.
LIBERTAD Y COMPROMISO
Uno de los mayores regalos que
hemos recibido de Dios es nuestra libertad, es maravilloso pensar lo
generoso que fue al darnos esta vida y permitirnos co-crearla con Él.
Aunque podemos pintar la vida
con los colores que queramos elegir, tomando nuestras propias decisiones,
finalmente sabremos que una vida sin Él no tiene sentido.
En este camino de búsqueda del
propósito de nuestra vida, la libertad juega un papel clave, pero también lo
juegan el compromiso y la responsabilidad. Sin estas dos
condiciones, terminaríamos siendo esclavos de nuestras propias
decisiones.
ENTREGA TOTAL
Por último, el amor como forma
de vida será lo que dé sentido a todo lo demás. Ser creados para amar implica
entregarnos y ser donación para los demás.
Somos
fecundos y nos sentimos plenos en la medida en que servimos y acogemos al
otro.
Nuestra boca fue hecha para
decir palabras bonitas y besar, nuestros oídos para escuchar al otro y nuestros
brazos para abrazar. ¿Qué más muestras necesitamos
para comprender que sin amor no podemos ser felices?
Si nuestro propósito se queda
en lo superficial, en el reconocimiento y las metas terrenas, no sentiremos la
paz, la alegría y la plenitud que solo el vivir en clave de amor nos puede
dar.
Y como parte de esta entrega a
los demás, es importante formarse bien para llevar a cabo ese
propósito, porque es verdad que a veces no es fácil saber por dónde empezar.
Y de hecho, no son pocas las
personas que nos escriben a Catholic Link con muchas preguntas sobre el sentido
de la vida.
Por eso hemos decidido crear
un nuevo curso online llamado: «Diseña tu vida con Dios: Herramientas de psicología y espiritualidad
para una vida con propósito de la mano de Dios».
A través de seis módulos, la
profesora Verónica Neuschwander, psicóloga y
coach especializada en logoterapia, te ayudará a tener más claridad sobre tu
objetivo así como herramientas para aplicarlas en tu planificación diaria y en
una forma de vida más plena.
¡Te lo recomiendo,
estoy segura de que será de gran ayuda!
Escrito por: Silvia Ordoñez
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