Se
habla mucho de lo femenino herido, pero poco de lo masculino.
Sin
embargo, este también está herido.
No hay
muchos ejemplos para los hombres para encarnar al masculino sagrado.
Se
encuentran con etiquetas de machito, mujeriegos,
materialistas, inválidos de sentimientos.
Los
hombres cambian y no se encuentran en todos estos modelos de la sociedad.
Son
sensibles, buscan amor y ternura mientras experimentan una pérdida de puntos de
referencia.
Ya no
pueden satisfacer una carrera, del papel de fuerte, crudo e insensible.
Tanto los
hombres como las mujeres buscan sentido a sus vidas, sus vidas, a ser
reconocidos por quienes realmente son.
A abrirse
a lo que realmente les importa, a hacerse realidad mientras expresan sus
sentimientos y emociones.
Los
hombres necesitan ser acogidos igual que las mujeres...
La
curación del masculino está intrínsecamente ligada a la del femenino...
Uno no
puede sanar sin el otro, uno no puede revelarse sin el otro.
El
masculino está llamado a transformarse tanto como el femenino en nuestro
planeta.
Si eres
mujer ofrece espacio a estos hombres para revelarse...
Y si eres
hombre ofrece tu autenticidad.
Despliégate
en tu vulnerabilidad.
Este es
el camino a tu reconciliación.
(Extracto de Jessie Birra)
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