Cierta madrugada, venía por la panamericana sur de Ica hacia Lima, y como era de esperarse mi pobre y destartalado (VW escarabajo del año 1976) se malogró.
Me cuadré
al lado de la autopista esperando que alguien me auxiliara y a los 10 minutos
apareció un Mercedes Benz Kompressor que pasó a impresionantes 190 km/h frente
a mí.
En eso
veo que el tipo del Mercedes da marcha atrás y vuelve hasta el lugar donde me
quedé botado.
Ahí mismo
se ofrece a remolcar mi pobre auto y acepto enseguida, pero le supliqué que por
favor no corra mucho, si no mi pobre VW escarabajo y yo nos iríamos al diablo.
Acordamos
entonces que le iba a hacer "luces" cada
vez que el Mercedes estuviera yendo más rápido de lo aconsejado.
Entonces,
el Mercedes comenzó a remolcarme y cada vez que se pasaba de velocidad, le
hacía luces.
En eso,
aparece un Porsche Carrera GT negro polarizado, nice, fashion, recontrafichazo,
recontra power, que intimida al Mercedes.
Este no
deja que lo intimiden y comienza la carrera.
Van
a: 120,130,150, 190, 210, 240, 260 km/h.
Yo ya
estaba desesperado y haciendo luces como loco y los otros dos orates a la par a
toda velocidad, ni me hacían caso, pobre mi (VW).
Por ahí,
pasamos por un puesto de la Policía de Carreteras, y aunque yo no vi el radar,
luego me enteré que ambos autos lujosos registraron impresionantes 270 km/h.
"Todo
un record".
También
me enteré que el policía avisó por radio al próximo puesto:
¡Atención! ¡¡Atención patrulla!!
Dos autos
de lujo y deportivos, uno un Mercedes Gris Plata Kompressor y el otro un
Porsche Carrera GT Negro, están disputando un pique a más de 270 km/h en la
autopista.
¡Muchachos!, sorpréndanse no lo van a creer,
les juro por mi madre, por mis hijos y por la Sarita Colonia, que atrás de
ellos, pegado al Mercedes, "Va un escarabajo de
mierd... haciéndoles luces para que lo dejen pasar".
La risa es la cura
del alma.
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