En respuesta a una columna publicada por Susana Chávez, directora de la ONG proaborto “Promsex”, dos especialistas de la asociación provida “Promujer y Derechos Humanos” de la ciudad de Arequipa respondieron a las varias falsedades empleadas para informar sobre la situación del aborto en el Perú.
La columna de Chávez, titulada “¿Qué tan
lejos estamos de lograr la despenalización del aborto por violación en Perú?”, fue
compartida por correo electrónico y sirvió para anunciar la presentación
virtual de la publicación “La constitucionalidad
del aborto por violación: Una causa pendiente”, transmitida en vivo por
Promsex el 9 de diciembre.
Según la argumentación Chávez, el “aborto
legal en el Perú es aún muy limitado” y por ello “miles
de mujeres se ven obligadas a
exponer su vida y su salud al recurrir a abortos clandestinos, en lugares
insalubres e inseguros”.
Yoseline Muñoz, abogada de Promujer y Derechos Humanos, comentó a ACI
Prensa que la afirmación de Chávez “es una
imprecisión, ya que, al ser clandestinos, no existe data segura que nos indique
una cifra”.
“Recordemos que el Instituto Nacional de
Estadística e Informática (INEI) es el organismo central y rector del Sistema
Estadístico Nacional, responsable de normar, planear, dirigir, coordinar y
supervisar las actividades estadísticas oficiales del país. Chávez estaría
dando una cifra brindada únicamente por Promsex, conocida organización
feminista que busca despenalizar y convertir en un derecho, el aborto en el
Perú con fines cuestionables. Estas no son fuentes oficiales del Estado
peruano”, aseguró.
La legislación peruana considera el aborto un delito, solo despenalizado
para casos en los que está en riesgo la salud de la madre. La Constitución de
Perú reconoce que “el concebido es sujeto de
derecho en todo cuanto le favorece”, mientras que el Código de los Niños
y de los Adolescentes indica que “se considera niño
a todo ser humano desde su concepción hasta cumplir los doce años de edad”.
Por su parte, Mariafernanda Gamero, psicóloga y coordinadora de Promujer
y Derechos Humanos, se refirió a la mortalidad materna en el Perú en
conversación con ACI Prensa.
“El Ministerio de Salud indica que desde el 2020
hasta abril de este año se habría registrado 626 mujeres que fallecieron, pero
las causas fueron primero por hipertensión, segundo por hemorragias (que podría
estar relacionada a mala praxis o falta de recursos para atenderse
correctamente) y tercero por COVID”, comentó.
Ambas especialistas respondieron a la afirmación de Chávez, para quien
tener penalizado el aborto “obstaculiza que este
servicio médico sea brindado de forma segura y digna”.
Muñoz respondió que “el aborto es una
práctica que pone en riesgo la vida de la mujer y, además, deja secuelas
físicas y psicológicas que la acompañarán por el resto de su vida. Tampoco
podemos hablar de dignidad, porque esta es un valor inherente a la persona por
el solo hecho de ser persona; por tanto, es contrario a la dignidad poner fin
al desarrollo de la vida con un simple test de ponderación entre el derecho a
la vida, y el derecho a la libertad de la mujer”.
En otro punto de su columna, la directora de Promsex señala que es “indispensable” iniciar el debate del aborto por
violación “frente a la alarmante realidad que viven
las mujeres en nuestro país”.
Coincidentemente, un día después, el 10 de diciembre, la congresista
izquierdista de Juntos por el Perú, Ruth Luque, presentó el proyecto de “Ley que
despenaliza el aborto en casos de embarazos como consecuencia de violación
sexual”.
La abogada Muñoz afirmó que, “a pesar que
los grupos feministas señalen que no existe sustento constitucional para defender
la vida del no nacido, no se han desarrollado las razones para que un derecho
absoluto, pase a ser una decisión”.
“La vida humana comienza en la concepción, y en
dicho momento es deber del Estado respetar y defender la vida, con mayor
énfasis en su momento más vulnerable”, recordó.
Por su parte, Gamero dijo que desde Promujer y Derechos Humanos “comprendemos y acompañamos los sentimientos de angustia
y desesperación de las mujeres que sufren” por embarazos no deseados.
“Es por ello que nos oponemos con firmeza al
aborto, pues sabemos que dicha práctica no terminará con el dolor de la mujer,
mucho menos con los abusos sexuales; muy por el contrario, es causa de dolor y
de invisibilizar un crimen que debe ser erradicado”, acotó.
Gamero aseguró que “despenalizar el aborto
no eliminaría una problemática social, sino que más bien es un medio ideológico
que beneficia a otros a costa del sufrimiento de muchos”.
“El aborto (clandestino o legal) no solo termina
con una vida y ocasiona serios problemas en la salud mental y física de la
mujer, sino que también puede impactar negativamente en la vida de quienes la
rodean”, señaló.
Según la columna de Chávez “las mujeres
podrían cumplir hasta cuatro años de pena privativa de la libertad en caso
decidieran realizarse un aborto”.
Muñoz desmintió esa afirmación. Aseguró que “no
se trataría de cuatro años de pena privativa de la libertad”.
“El artículo 114° del Código Penal señala que la
mujer que causa su aborto, o consiente que otro le practique, será reprimida
con pena privativa de libertad no mayor de dos años o con prestación de
servicio comunitario de cincuenta y dos a ciento cuatro jornadas; ahora bien,
en la práctica genera mucha duda pensar que haya una sola mujer en prisión por
abortar. No se conoce ni un solo caso en Perú”, afirmó.
Para Gamero “es evidente que la perspectiva
de Promsex es ideológica, es decir, no tiene sustento científico y es
totalitaria”.
“Despenalizar el aborto trae consigo distintas
acciones necesarias, como financiamiento, vulnerar la objeción de consciencia
de nuestro personal de salud y el descuido de las políticas necesarias a
implementar como la sanción a agresores sexuales y el apoyo a mujeres que por
sentirse desprotegidas y desatendidas opten por algo que les traerá
consecuencias terribles y dolorosas por el resto de su vida”, comentó.
Por su parte, Muñoz dijo que “tras escuchar
a Susana Chávez, en la presentación del libro ‘La constitucionalidad del aborto
por violación’, me preguntaba qué de gozo o alegría puede generar ser consiente
que, para pretender solucionar un tema tan doloroso como es una violación
sexual, se tenga que acabar con la vida de un nuevo ser que vino al mundo y que
tiene derecho a vivir y desarrollarse”.
Gamero dijo que para ayudar a resolver el problema de la violencia
contra la mujer “es necesario hablar sobre el
derecho a la vida como derecho indispensable, el apoyo multidisciplinario a la
víctima y las opciones de ayuda y acogida a la vida en un contexto difícil de
afrontar”.
“Es imprescindible también hablar sobre la
prevención de la violencia, fortaleciendo a la familia y educando en la virtud
desde pequeños. Por último, debemos tener claras las sanciones y trabajar en
programas integrales de rehabilitación a agresores”, agregó.
Promujer y Derechos Humanos tiene como fin inspirar a las mujeres y
defender sus derechos desde la concepción hasta su muerte natural.
La institución trabaja de manera organizada para brindar acompañamiento,
atención psicológica, legal y ayuda social a las personas que más lo necesitan.
“Comprendemos que los sentimientos de algunas
personas que militan en el movimiento feminista pueden ser movidos por
compasión y empatía; sabemos que es necesario hacer algo, pero debemos pensar
en soluciones reales, que protejan el bien supremo, la vida”, señalaron las representantes de la organización.
POR DIEGO LÓPEZ
MARINA | ACI Prensa
No hay comentarios:
Publicar un comentario