NAVIDAD

 Cada año, los Católicos somos inundados con afirmaciones de que el 25 de diciembre no es el día adecuado para la Navidad, que el catolicismo se adhirió a las fechas de las fiestas paganas, que todo el calendario de la iglesia era un plan de mercadeo para atraer a los paganos a diferentes celebraciones y convertirlos. Pero todo esto está lejos de la realidad.

El 25 de diciembre es una fecha muy precisa para celebrar el nacimiento de Cristo. Los católicos inicialmente celebraron el nacimiento de Jesús en Pascua. Esto se originó a partir de una práctica de la iglesia primitiva de reconocer la fecha de la muerte de un santo como la misma fecha de su nacimiento. A los antiguos parecía gustarles la simetría.

Cuando el cristianismo comenzó a reconocer el nacimiento de Cristo como un día propio, la fecha de diciembre apareció muy rápidamente. Hipólito de Roma defendió el 25 de diciembre), alrededor del 200 d.C. San Juan Crisóstomo parece haber cerrado la discusión al declarar el 25 de diciembre como la fecha correcta, alrededor del 300 d.C.

San Agustín escribe en el año 408 “Según la Tradición” el [Jesús] nació el 25 de diciembre (la Trinidad 4,5)

Hay una gran cantidad de datos que respaldan esta fecha: Zacarías estaba sirviendo en el templo con sus parientes. Estaban sirviendo en el octavo mes del año judío. Nissan, el primer mes, cae entre marzo y abril. El octavo mes cae entre mediados de octubre y mediados de noviembre.

Ahora, mientras servía como sacerdote ante Dios, durante este intervalo de meses, según la costumbre del sacerdocio, Zacarías fue elegido por sorteo para entrar en el templo del Señor y quemar incienso... Y cuando terminó su tiempo de servicio, fue a su casa. Pasados ​​estos días, su esposa Isabel concibió, y permaneció escondida cinco meses, diciendo: "Entonces yo golpeé al Señor por mí, los días en que bajé, para asentar mi oprobio en el pueblo". (Lucas 1: 8-9, 23-25)

Pasados ​​estos días Isabel concibió. Debemos entender una fecha anterior a noviembre, dentro de dicha ventana, como hicieron los padres de la iglesia. Así, Isabel concibió hacia el 25 de octubre. En el sexto mes de embarazo encontramos esto en el texto: Y el ángel le respondió: "(...) Y he aquí, su pariente Isabel en su vejez también concibió un hijo, y este es el sexto mes con ella que fue llamada estéril. Porque nada es imposible para Dios" Y María dijo: "He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra". Y el ángel se alejó de ella. En aquellos días María se levantó y se fue apresuradamente a la región montañosa, a una ciudad de Judá, y entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. (Lc 1,35-40)

Por tanto, María concibe alrededor del 25 de diciembre. Luego de la visita a Isabel, que está en su sexto mes. Juan el Bautista nacerá alrededor del 25 de junio. Seis meses más y llegamos al evento del nacimiento de Jesús.

El nacimiento de Jesús el 25 de diciembre es una estimación completamente razonable. La selección de los primeros cristianos a partir de la fecha del nacimiento de Jesús parece haber estado influenciada principalmente por las escrituras y las matemáticas simples. En el Imperio romano, el 25 de diciembre Se celebraba la fiesta del SOL INVICTUS, y las primeras comunidades cristianas declararon que el único SOL que alumbra la vida cristiana es JESÚS. Por ello adoptan esa fecha para conmemorar el nacimiento del niño de Belén. Ahora bien, es posible que la fecha no sea del todo exacta. Hay unos 30 días de margen de maniobra al inicio del cálculo. Pero el 25 de diciembre es la época adecuada del año. Al menos está bastante cerca del día correcto, si no exactamente correcto, lo cual también es posible.

Más importante que la fecha de su nacimiento, es recordar que ese bebé es el gran Yo Soy, el mismo Dios que se hizo hombre para salvarnos, que le dio la vida a María, nació de su vientre por nosotros, renunciando así a su condición divina, se encarnó y se hizo carne (Juan 1,14) los católicos no celebramos fechas, celebramos el gran acontecimiento que el hijo de Dios nació y se hizo hombre. Navidad significa nacimiento y eso celebramos como verdaderos cristianos.

Elmer Arana