LA HISTORIA ARRANCA EN TIEMPOS DE LAURA INGALLS, CUYOS LIBROS INSPIRARON LA SERIE DE TELEVISIÓN
Los Ingalls: llegaron en 1974, estuvieron 9 años en antena y dejaron un
recuerdo perdurable.
La familia Ingalls
real en la que se
inspiró La casa de la pradera (1974-1984) tuvo unos primos que se convirtieron al catolicismo de una forma un tanto singular: la aparición de un "fantasma".
Antes de contar esa historia hay
que recordar la importancia de esta serie. No es preciso haberla visto en
su día para identificar sus personajes, porque La casa de la pradera [Little
house on the prairie] ha
seguido reponiéndose y pueden conseguirse en DVD sus episodios.
La intro de 'La casa de la pradera', una serie de
gran éxito en los 70.
Michael Landon (1936-1991), interpretando al padre, fue el factótum de la
serie. Y Melissa Gilbert, con sus largas trenzas y
una sonrisa inconfundible, interpretaba a su hija Laura Ingalls Wilder (1867-1957),
autora de los libros en los que se inspiró la legendaria producción de la NBC.
Son ocho títulos que escribió entre 1932 y 1943.
Los libros de Laura Ingalls han sido publicados en español.
En sus novelas, Laura Ingalls contaba en primera persona su propia
experiencia vital. Ella había nacido en una cabaña de troncos en
los bosques de Wisconsin, y vivió después en Kansas, Minnesota y Dakota
del Sur.
DEL
ESPÍRITU PIONERO AL TEA PARTY
Se convirtió así en la narradora
por excelencia del espíritu de los pioneros.
Multitud de instituciones y museos se inspiran en ella y sus escritos para
recordar a los norteamericanos esa fase crucial de su historia. Por eso en los
años setenta, cuando Estados Unidos se acercaba a su bicentenario (1976) y las
cadenas de televisión se volcaron en contenidos ad hoc (como Centennial, también de la NBC, y
que se vio en España a principios de los ochenta), volver a Laura Ingalls era obligado y el éxito de la serie inspirada en sus
novelas estaba garantizado.
El espíritu de La casa de la pradera estuvo muy presente en los mejores momentos del Tea Party. Durante la campaña presidencial de 2008, la
hermana de Sarah Palin contó que la gobernadora de Alaska y
candidata republicana a la vicepresidencia con John McCain había devorado cuando era niña todas las novelas
de la serie, donde se forjó ese patriotismo sencillo y sincero, basado en convicciones cristianas y vínculos familiares, que catapultó su popularidad entre buena
parte del electorado y le granjeó el miedo cerval (disfrazado de burlas
inmisericordes) de los definidores de la corrección política.
Para muchos estadounidenses, el estilo de vida reflejado por Laura Ingalls
Wilder es el que define el país, y con él se identifica una parte del movimiento libertario. De hecho, la hija de Laura, Rose Wilder Lane (1886-1968), es una de las grandes representantes de la
filosofía vital que popularizó la gran inspiradora del movimiento, la atea
rusa Ayn Rand (1905-1982),
autora de El manantial (llevada al cine por King Vidor, con Gary Cooper como
protagonista). Rose se implicó a fondo con su madre en la publicación de La casa de la pradera, prestándole su
consejo como escritora y activista.
Los principios que mantienen unidos a los Ingalls en las novelas
de Laura son claros: esfuerzo individual, espíritu de sacrificio y
una educación en el cumplimiento del deber y el ejercicio de la
propia responsabilidad.
Eran, por otro lado, los principios que Michael Landon (de origen judío -su nombre real era Eugene
Orowitz-, dos veces divorciado y padre de nueve hijos) quiso encarnar como
actor, director y productor. Los reflejan todas las series con las que
triunfó: Bonanza (1959-1973),
también una serie familiar en el Oeste; La
casa de la pradera (1974-1983);
y Autopista hacia el cielo (1984-1989), donde interpretaba a un ángel
en misión celestial para resolver problemas en la tierra en
nuestros días.
UNA
DECISIÓN CRUCIAL, UNA VISIÓN EN SUEÑOS...
Pero, ¿quién
fue el auténtico Charles Phillip Ingalls (1836-1902)
al que dio vida Michael Landon? Pues llevó una vida menos estable que la
que refleja la serie de televisión, que en ese y otros puntos guarda algunas
diferencias con las novelas en las que se basa. Durante casi veinte años se movió con su esposa y cinco hijos por distintos estados (Wisconsin, Kansas, Minnesota, Iowa) en
función del trabajo que iba obteniendo, hasta que en 1879 fue nombrado juez de paz en
De Smedt (Dakota del Sur).
Una de las sobrinas de Charles fue Edith
Florence Bingham Ingalls (1872-1951), hija de su
hermano Peter.
Aparece fugazmente como Dolly en una de las novelas de su prima Laura, La casa del bosque [Little house in the big woods]. Y en 2017 una tataranieta de Edith, Lindsay,
contó las circunstancias por las que toda esa
rama de la familia se convirtió al catolicismo.
Según recoge Lindsay Kuniyuki en Church Pop,
su tatarabuela Edith se casó con Heil Nelson Bingham y se asentaron en Oakes (Dakota del Norte).
Ninguno de los dos era católico, pero decidieron educar a sus siete
hijos en la escuela católica local. Al cabo de un tiempo Heil se convirtió al
catolicismo, pero sin embargo su esposa no lo hizo. En 1930, tras 38 años de
matrimonio, Heil murió.
Pasaron veinte años y Edith no
cambió su actitud hacia la fe. Pero una noche, ya cercana su muerte, "Heil se la apareció en sueños y le dijo:
'Edith, tienes que preparar tu alma'.
A la mañana siguiente, ella pidió un sacerdote. La familia pensó que se refería
a un pastor protestante, pero Edith rechazó verle y le despidió, insistiendo en
que quería ver a un sacerdote católico. Fueron a buscarlo y ella
recibió los sacramentos, muriendo al día siguiente".
Árbol genealógico de los Ingalls:
Charles es el protagonista de la serie, encarnado por Michael Landon; Laura es
su hija, la autora de las novelas en las que se basó la serie, interpretada en
ella por Melissa Gilbert; Heil es el "fantasma" responsable de que
toda su rama sea católica; Lindsay es quien contó esta historia en 2017.
Todas las hijas de Edith
fueron católicas y se
casaron "con católicos irlandeses". Una
de esas hijas fue Estella Cora Bingham Ingalls (1895-1969), que tuvo cuatro hijos, uno de
ellos Dorothy, la abuela de Lindsay, quien tuvo siete, todos ellos católicos
practicantes "que transmitieron esta fe hermosa y
rica a los 12
hijos que tuvieron en total, la mayoría de los cuales también está
transmitiendo esa tradición a los 21 nietos de Dorothy": uno de ellos es
Lindsay, quien recuerda que este año dos hicieron la Primera Comunión y tres
recibieron la Confirmación.
Lindsay Kuniyuki es historiadora y madre de cuatro
hijos, a quienes educa en 'homeschooling' según un
currículo católico.
"En los años venideros veremos muchos más
católicos llegar a la plenitud de la fe, y todo porque Heil y Edith
eligieron una educación católica para sus hijas. No podían saber hasta qué punto esa
decisión afectaría al legado familiar", explica Lindsay, quien
recuerda la emoción que sintió a los 9 años de edad cuando, después de leer con
entusiasmo las novelas de Laura Ingalls, su madre le reveló que todos aquellos
personajes que le fascinaban eran sus primos.
Artículo publicado
originalmente en ReL el 24 de agosto de 2017 y actualizado.
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