El Señor peleará por ti y estarás tranquilo. Todo lo que no
alcances a realizar, recibirá un poder extra de Dios para que derrotes la
oposición y obtengas grandes resultados. Amén
En Josué 10:11 dice: “Mientras
los amorreos estaban en retirada por el camino de Bet-horón, el Señor los
destruyó mediante una terrible tormenta de granizo que envió desde el cielo, y
que no paró hasta que llegaron a Azeca. El granizo mató a más enemigos de los
que mataron los israelitas a filo de espada”.
Cinco reyes se habían unido para destruir a Israel y a
Gabaón, aliados del pueblo de Dios, pero el Señor se anticipó y avisó a Josué
cuando las tropas atacaban y en en el verso 8 dijo a Josué: «No les tengas miedo, porque te he dado la victoria. Ni
uno de ellos podrá hacerte frente». Luego de esto el ejército israelí
avanzó, y el Señor llenó de temor a los enemigos para que su pueblo prevalezca.
Luego envió una lluvia de granizo que derrotó más enemigos que los derribados a
filo de espada por los guerreros.
Ésto nos muestra el trabajo de Dios a favor de sus hijos,
cuando avanzamos en fe, apoyándonos en la ayuda del Señor, Él se encarga de lo
que humanamente no podemos, hay un “extra” de
Dios, una batalla que el Señor pelea por nosotros. En tus asuntos y desafíos,
siempre proclama y espera ese “extra” especial
de Dios, que hace que lo normal u ordinario que nosotros podamos hacer, se
transforme en algo extraordinario, superando nuestras expectativas.
Hagamos
ésta oración:
“Padre Celestial, tu
victoria es mi victoria, contigo venceré más de lo que espero. No importa la
oposición o lo grande del desafío, tu peleas por mi y me das amplio triunfo en
todas las cosas, lo creo y declaro en el nombre de Jesús. Amén”
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