Abbba, Habsa Abba, Abra Saraida
Jesús, Abra Saraida María… Habsa Abba.
Se roció agua bendita en todo el
lugar.
Se rezó Crux Sacra, Sit Mihi Lux,
Non Draco Sit Mihi Dux, Vade Retro Satana…
Luego se rezó… San Miguel Arcángel,
defiéndenos del combate…
Dios te Salve María, llena eres de
Gracia… (Tres veces)
Gloria al Padre, Gloria al Hijo y
Gloria al Espíritu Santo, como era en un principio…
El Ángel Rosa del Corazón del
Santísimo hizo la señal de su presencia.
HNO. JOSÉ: Gracias Rosa del Corazón
del Santísimo por tu presencia, bendita seas.
Se pidió que se apague la luz…
No se distraigan, cierren sus ojos,
abran sus corazones, quédense en silencio delante del Señor…
Quédense en silencio… que no los
perturbe nada… sólo son instrumentos... es tu oportunidad de estar delante del
Señor, de pedir perdón, de decir que estas aquí porque Él te Ama, Él te trajo
aquí…
Buenas noches Grupo Sí Señor… Soy
San Miguel Arcángel...
HNO. JOSÉ: Bienvenido seas San
Miguel Arcángel, gracias por tu Santa presencia.
SAN MIGUEL ARCÁNGEL: Encomendado
éste día… El Amor del Señor, del padre Celestial, me ha encomendado de manera
muy especial cuidar y proteger a las personas que hoy han vendo a éste lugar,
sobre todo a los instrumentos…
Tú que hoy has venido, el Señor te
conoce desde antes que estuvieras en el vientre de tu madre, el Amor del Señor
es tan grande que me ha encomendado de protegerte de manera especial, Yo
escucho a tú Ángel Guardián día y noche, pero muchas veces el Ángel Guardián se
queda fuera, porque no puede entrar en lugares o situaciones que el Señor no
puede disponer, su Amor infinito te protegerá siempre, porque Dios estableció una
Alianza con ustedes… pero por más que Yo tenga la Espada y las armas para que
usted salga airoso, si usted no quiere, si usted está distraído, si usted está
en el abandono, si usted cree que el demonio no existe… no puedo hacer nada.
El Amor y los ojos Misericordiosos
se requiere para que su Alma cambie y Yo pueda ejercer mayor protección,
arrepiéntanse por el Amor que Dios le da, por el Perdón que Dios le otorga,
arrepiéntase de corazón… no importa lo que haya hecho, el Señor quiere su
corazón arrepentido, el Señor desea que usted venga como un hijo en el seno de
una madre, el Amor infinito del Señor rompe todo sentimiento humano, lo que el
Señor desea, es que usted confíe en Él y que la Fe haga que su corazón cambie
poco a poco, usted va a cambiar… poco a poco el Amor y tendrá ojos
Misericordiosos, y tendrá Perdón… y se irá el odio que endurece su corazón…
pero eso no sale de un día para otro, tiene que Orar, tiene que ir a Misa,
tiene que Comulgar, tiene que rezar el Rosario, pero sobre todo tiene que PERDONAR,
no existe Amor sin Perdón ni Perdón sin Amor, Yo pongo Mi Espada en éste lugar
y Proejo a todo el que se quiera dejar proteger… la bendición del Señor les
trae el día de hoy… recuérdenme cuando estén desprotegidos, invoquen mi
Espíritu y Yo los protegeré hasta el último día de su muerte…
HNO. JOSÉ: El Señor esté con
nosotros
TODOS: Y con tu Espíritu.
HNO. JOSÉ: La bendición de Dios
Padre, de Dios Hijo y de Dios Espíritu Santo quede con ustedes.
TODOS: Amén
HNO. JOSÉ: Podemos ir en Paz.
TODOS: Demos gracias a Dios y a
nuestra Madre Santísima.
Un aplauso para la Santísima
Trinidad, a nuestra Madre Santísima y a nuestros Ángeles.
Grupo Católico de Oración por los
Enfermos – Si Señor
José Miguel Pajares Clausen
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