Al Señor Jesucristo crucificado del Mar de Huacho se le atribuye el primer milagro de amansar las aguas ante la amenaza de que se salía el mar sobre la ciudad.
El arcón que contenía la imagen de Jesucristo crucificado en suprema agonía fue varado en la playa de Huacho, en la misma dirección donde hoy se levanta su templo, cuando el mar estaba calmo, después de la amenaza de maremoto que vino del norte, en 1865.
Esta es una devoción católica, originaria de la ciudad de Huacho por su vínculo con la fuerza de la naturaleza marina, como ciudad costera que es. La devoción a esta imagen ha permitido curaciones milagrosas y otros prodigios en respuesta a súplicas con penitencia y oración. Fue muy venerada en Huacho hasta los años de 1960, cuando no se había extendido aquí el culto al Señor de Milagros o Cristo de Pachacamilla.
La hermandad de culto religioso más antigua de Huacho es la del Señor Crucificado del Mar, en 1868, con familias del barrio conocido como Barranquito, en la avenida Nueve de Octubre, -por donde pasaba el antiguo tren Noroeste-.
Alejandro Smith Bisso.
Huacho, 28 de octubre 2020.
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