El pasado 6 de abril, unas dos mil personas
participaron en el Gran Rosario de Bendiciones para la Familia, actividad
realizada por primera vez en Argentina.
Alentados por el lema “Familia que reza
unida permanece unida” cientos de familias, niños, adultos mayores y
jóvenes se reunieron en el Monumento Güemes de Buenos Aires para rezar a los
pies de una gran imagen de la Virgen de Luján.
Previamente, fieles y voluntarios realizaron una procesión con la imagen
por las calles de la ciudad hasta llegar al monumento.
En un ambiente de gran recogimiento y devoción la multitud rezó cada
decena del Rosario, guiados por sacerdotes, religiosas y niños, mientras en los
alrededores había seis sacerdotes confesando.
Los fieles también encendieron velas para iluminar el anochecer y
elevaron al cielo un gran rosario hecho de globos blancos y celestes.
El P. Fabián Barrera, sacerdote que dirigió la oración, expresó que el
Santo Rosario es el “arma” temida por el
enemigo, “refugio de los que buscan alivio a sus
pesares”.
A través del Rosario “la Virgen nos quiere llevar a Jesús. Ella nos
enseña la fuerza de la Eucaristía, que es la renovación incruenta del santo
sacrificio de Cristo en la Cruz”. “En un mundo que
quiere hacer sus propias leyes, la Virgen nos recuerda que obedecer a Dios no
es un sacrificio, es una gracia”, reflexionó el sacerdote.
Antes de finalizar el multitudinario encuentro el P. Barrera invitó
desde ya a la realización del próximo Rosario de Bendiciones por la Familia en
abril de 2020.
El Rosario de Bendiciones para las Familias comenzó en 2012 en Uruguay
con la intención de pedir a Dios y la Virgen María por la protección, la
armonía y la paz en las familias, amenazadas por las ideologías en un país
altamente secularizado.
La actividad se realizó por primera vez
en Argentina, por iniciativa de un grupo de familias que desde
diciembre soñaron con la idea de replicar el Rosario con el apoyo del equipo de
Uruguay.
Redacción ACI
Prensa
No hay comentarios:
Publicar un comentario