miércoles, 27 de junio de 2012

EL ANACORETA Y EL REMEDIO A LA SOLEDAD


El joven seguidor se quejaba de sentirse solo:

- A pesar de estar en la ciudad, rodeado de gente, siento que estoy solo.

El Anacoreta lo miró con ternura y le dijo:

- La soledad no se vence con la compañía, sino con la realidad.

Abrió el joven unos ojos como platos y repuso:

- ¿Acaso las personas que me rodean no son reales?

Rió con ganas el anciano mientras respondía:

- Sí o quizá no. Mira. En la montaña, frente a un paisaje, si te metes dentro de él, si te haces uno con él, no te sientes solo. Al contrario, sientes una plenitud inmensa y te parece estar acompañado por todo el universo...

Le miró a los ojos y prosiguió:

- Podemos estar rodeados constantemente de muchas personas, pero si no las hacemos reales para nosotros, si no dejan de ser "algo" y se transforman en "alguien" para nosotros, nos sentiremos las personas más solas del mundo.

Hizo una pequeña pausa antes de concluir:

- La batalla de la soledad se libra en nuestro interior. Si nos unimos a los demás, si los hacemos uno en nuestro interior..., nunca nos sentiremos solos.

Joan Josep Tamburini

No hay comentarios: