Hay un doble concepto de religión:
- Primer
concepto: Religión es un conjunto de creencias acerca de la divinidad, de
normas morales, de ritos, etc., sean cuales sean.
- Segundo
concepto: Religión es lo que establece una relación auténtica con el Dios
verdadero.
El primero es al que suele
referirse la gente pero tiene poco interés para la persona.
El segundo concepto es el válido
porque responde al verdadero significado de la palabra Religión y es el que nos
interesa para nuestra vida. Religio viene de re (prefijo de
intensidad) y ligare (verbo unir), por lo que Religión viene a
significar unir fuertemente, verdaderamente. ¿A quién o a qué? Pues a la
Divinidad, al Dios verdadero.
Por tanto, si hablamos de religión con intención de llegar a algo
verdaderamente útil, este es el concepto que nos interesa: lo que establece una relación auténtica con
Dios.
Por eso no tiene sentido elegir
una religión porque es agradable o alegre, o porque sus ritos sean
espectaculares, o porque te sientes más cómodo. Tampoco importa que sea
“moderna”, que esté de acuerdo con los tiempos, que te pille cerca de casa, que
te sea útil o que el predicador sea muy buena persona.
Hay que elegir la Religión (con
mayúscula) que establezca una relación
auténtica con Dios.
¿Y cómo saber cuál es la Religión que establece una relación auténtica
con el Dios verdadero?
(Continúa en el próximo post)
Los Tres Mosqueteros
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