jueves, 11 de noviembre de 2010

IGLESIAS CATÓLICAS ORIENTALES: LOS MARONITAS


Los orígenes de la Iglesia maronita son inciertos, y existen textos medievales que la sitúan en la herejía monotelita (de mono=uno y thelema=voluntad, una única voluntad) según la cual Jesús tendría dos naturalezas pero una sola voluntad, una herejía que se hizo fuerte durante el reinado del Emperador Heraclio (610-641), como modo de superar el enquistado debate monofisimo-diofisismo.

En cualquier caso, parece que la Iglesia maronita nace en el s. V, fundada por un monje llamado Marón del que recibe el nombre, el cual reúne a una serie de monjes a orillas del río Orontes, entre Alepo y Antioquia. En las disputas monofisitas y diofisitas, los maronitas habrían permanecido en todo momento con la ortodoxia y con Constantinopla, bajo cuya órbita continuarían cuando ésta sucumbre al monotelismo, y con la que no rompen hasta 681, bajo el patriarcado de otro Marón, San Juan Marón.

Constituyen, en todo caso, el clásico caso de comunidad cristiana aislada en medio de poderosos enemigos de religión no cristiana (persas, árabes, turcos), y muy celosa, por cierto, de su independencia, que defenderá con ardor en numerosas ocasiones... Una comunidad que sólo recuperará la comunión con el resto de la gran comunidad cristiana gracias a las Cruzadas.

A partir de ese momento, consta la presencia del Patriarca Jeremías II Al Amashitti en el IV Concilio de Letrán en 1215, así como la del Patriarca Simón Pedro en el V Concilio de Letrán en 1516. El Papa Gregorio XIII (1572-1585) establece en Roma un Hospital Maronita y un Colegio Maronita, del que por cierto, saldrán grandes exponentes de la cultura renacentista: José Simeón el Assemani, editor de la Biblioteca Oriental; Estéfano Evodio, organizador de la Biblioteca Vaticana; José Aloisio y otros.

Es de la máxima importancia el II Concilio maronita, celebrado durante el patriarcado de José IV (1733-1742), en el que los delegados papales imponen una serie de reformas dirigidas a unificar las conductas y liturgias que separaban a los maronitas. Aún así, aún mantiene la Iglesia maronita algunas particularidades, como por ejemplo que los miembros del clero se pueden casar mientras poseen las órdenes menores y aún así tomar las mayores, pero si acceden a éstas ya no pueden casarse.

Los maronitas son poco más de tres millones, establecidos principalmente en el Líbano. La existencia de esta comunidad cristiana en dicha zona de Oriente Medio será la que provoque el compromiso de la potencia colonial de la zona, Francia, de crear un estado para ellos, el Líbano precisamente, separándolo de Siria, con el compromiso de que un maronita sería, constitucionalmente, el presidente del país, cosa que se consumó en 1943. Hay también maronitas en Siria, Palestina, Chipre y Egipto, y una amplia diáspora que se extiende por Hispanoamérica (Argentina, Méjico, Brasil) y por los grandes países anglosajones (Estados Unidos, Canadá, Australia). La comunidad madre se expresa en árabe con giros arameos y practica el rito antioqueno.

El jefe de la Iglesia maronita es el Patriarca de Antioquia y de todo el este, patriarcado este de Antioquia, que comparte, sólo en el campo del catolicismo, con el Patriarca católico melquita, el Patriarca católico siro-católico y el Patriarca latino, así como en otras adscripciones cristianas, con el Patriarca ortodoxo y el siro-jacobita. Tiene su sede en Bkerke, en Líbano, a unos 40 kms. de Beirut. Su actual titular es Nasrallah Boutros Sfeir, entronizado en 1986, nombrado cardenal por Juan Pablo II en 1994, e importante líder libanés.

El más famoso maronita de la actualidad pertenece a un país donde no hay demasiados maronitas, Irak, y es Tarek Aziz, el que fuera Ministro de asuntos exteriores de Sadam Hussein, recientemente condenado a muerte por su responsabilidad en los asesinatos de una serie de militantes de partidos religiosos.
Luis Antequera

1 comentario:

Fabian Rhodas dijo...

Las Iglesias y sus crencias han perjudicado la conciencia del ser humano con fanatismos que crean diferencias peligrosas como este monge Ministro de Asuntos Exteriores de Sadam de nombre Tarek Aziz criminal perseguidor de partidos religiosos opositores al gobierno de Sadam y seguramente en nombre de la divinidad en turno y conveniente a sus intereses.