EL BUEN PASTOR

¡APRESURAOS HIJITOS REBELDES, NO SIGÁIS EN TINIEBLAS. ARREPENTÍOS Y CONVERTÍOS, PORQUE EL TIEMPO DE MISERICORDIA ESTÁ LLEGANDO A SU FIN!

FEBRERO 03 DE 2013 - 1:30 P.M.

LLAMADO DE MARÍA ROSA MÍSTICA A LA HUMANIDAD

Hijitos de mi corazón, que la paz de Dios esté con todos vosotros.

El gran pentecostés se aproxima; mi Padre le hará a cada mortal un pequeño juicio para que enderece su vida y lo instruirá para que pueda enfrentar al regresar a este mundo, los días de la gran tribulación. Sin este acto de misericordia la humanidad no resistiría la prueba. Estad preparados espiritualmente, haced buenas confesiones de vida; reparad con ayunos, obras y mortificaciones, todo el mal que habéis hecho, para que cuando os presentéis ante el Supremo seáis irreprochables.

No perdáis más el tiempo en vanidades mundanas; mirad, se acerca el encuentro con vuestro Padre y debéis de estar espiritualmente vestidos de blanco para que podáis presentaros ante el Rey de reyes.

Estad atentos a las señales del cielo, fenómenos celestiales nunca antes vistos por ojo alguno aparecerán en la bóveda celeste. Las trompetas de nuevo sonarán anunciando la proximidad del aviso. No os asustéis, antes alegraos, porque cuántos quisieron ver lo que vosotros veréis y no pudieron. ¡Qué grande es el amor y la misericordia de Dios, que aun sabiendo que sois una raza de dura cerviz, la más ingrata y pecadora que ha existido, os ha elegido para que mañana un resto de vosotros sea su Israel amado!

Muchos Santos y Ángeles bajarán a la tierra en los días de la gran tribulación, para ayudaros a pasar por el desierto espiritual. No soltéis mi rosario, acordaos que mi rosario es el pasaporte a la nueva vida. La Nueva Jerusalén os espera, el banquete está listo y el Novio aguarda por vosotros; todos estáis invitados, justos y pecadores, pero sólo entrarán los que tengan el traje apropiado.

¡Apresuraos hijitos rebeldes, no sigáis en tinieblas. Arrepentíos y convertíos, porque el tiempo de misericordia está llegando a su fin!. El aviso será vuestra última oportunidad, si no os acogéis a esta gran misericordia, os aseguro que se os perderá el alma y seréis encarcelados por toda la eternidad. Hijitos rebeldes, mi Padre no quiere vuestra muerte; recapacitad y enderezad vuestro caminar; alejaos del pecado y la maldad, no sigáis en la oscuridad; mirad que la noche está llegando y bien sabéis que la noche es tiempo de justicia.

Os hago un llamado a vosotros los que atáis al pueblo de Dios con vuestras detestables prácticas de ocultismo; ¡salid de las tinieblas y reparad todo el daño que habéis hecho, porque muy pronto mi Padre le hará justicia a su pueblo y vosotros hijos de la oscuridad, vais a sentir en carne propia todo el peso de la justicia divina! Entonces, sabréis que hay un Dios justo, que todo lo ve, que todo lo sabe; que conoce el corazón de los hombres y da a cada cual según sus obras. Enderezad pues vuestro camino, para que mañana no tengáis de qué lamentaros. María, Rosa Mística.

Dad a conocer mis mensajes a toda la humanidad, hijitos de mi corazón.