IMAGEN Y SEMEJANZA

Voy a tratar de entender cómo es que este misterio funcionó.

De hecho sólo Dios entiende a Dios, y nosotros los mortales sólo podemos tener una vaga idea sobre su intervención en nuestras vidas... muchos son los caminos del Señor.

¿CÓMO NOS CREÓ DIOS?

Se me ocurre que pudo ser así... pongo un ejemplo.

Vamos a suponer que soy un carpintero con muy buenas ideas. Un día se me ocurre hacer una MESA MUY ESPECIAL. Para eso me pongo a pensar en cómo sería mi mesa.

La quiero con seis patas, y cada pata con grabados muy particulares. El tablón muy original con grabados que hacen juego con los de las patas. Las uniones complejas pero muy seguras para que me dure toda la vida y la hereden mis hijos y mis nietos.

Luego de un tiempo tengo completa la imagen en mi cerebro de cómo quiero que sea, ahora sólo me falta comenzar a trabajar la madera.

Me voy a mi taller, tomo mis herramientas y me pongo a fabricarla. Un toque por aquí otro por allá, y va tomando forma. Luego de varios intentos la termino.

¿Qué es lo que tengo frente a mí? Tengo mi obra terminada. Esta obra es IMAGEN Y SEMEJANZA MÍA, o sea que es SEMEJANTE a como la IMAGINÉ.

Para entenderlo un poquito mejor.

Supongamos que alguien viene a mi taller y me proporciona la idea para que yo la realice. Al terminar la obra, esta sería IMAGEN DE ESE ALGUIEN Y SEMEJANZA MÍA, o sea que la obra salió SEMEJANTE a como se la IMAGINÓ ESE ALGUIEN.

Nota: Al menos tengo una pequeña idea, válida o no, de cómo nos creó Dios. ¿Tienes otra mejor? Espero tu comentario.

“Porque tú mis riñones has formado, me has tejido en el vientre de mi madre; yo te doy gracias por tantas maravillas: prodigio soy, prodigios son tus obras. Mi alma conocías cabalmente, y mis huesos no se te ocultaban, cuando yo era formado en lo secreto, tejido en las honduras de la tierra. Mi embrión tus ojos lo veían; en tu libro están inscritos todos los días que han sido señalados, sin que aún exista uno solo de ellos” Salmo 139 (138), 13-16.

José Miguel Pajares Clausen
Octubre 2007