El Papa Francisco quizás haya
hecho esta semana una de las aportaciones más importantes para entender cómo se
está procesando la persecución a los cristianos en el mundo.
En su homilía habitual de la
mañana en casa Santa Marta, dijo que hay dos tipos de persecución contra los
cristianos la que fabrica lo que popularmente conocemos por mártires y la que se
podría llamar una persecución educada, que también es persecución pero se
esconde.
Estas palabras del Papa sucedieron predicando el
pasaje de Hechos de los Apóstoles cuando se habla del martirio del protomártir
Esteban.
El Papa dijo que la persecución es el pan de cada
día de la iglesia, después de todo Jesús lo dijo.
Pero sin embargo los mártires no se limitan a los
que murieron en el coliseo o en otras persecuciones sangrientas que se han
hecho en diversas partes del mundo, como vemos ahora por el Estado Islámico. E
hizo referencia específicamente a los cristianos que murieron en un parque de
Pakistán el domingo de Pascua, diciendo que fueron martirizados apenas por
celebrar a Cristo resucitado.
El Papa dijo que en realidad los mártires son
hombres y mujeres de todos los días.
Porque hay que tener en cuenta que hay otra
persecución de la que no se habla a menudo, y aquí está precisamente la
aportación de Francisco, que le da visibilidad a este tema.
Esta persecución está disfrazada de cultura,
disfrazada de modernidad, disfrazada de progreso, es una especie de persecución
educada.
Se puede reconocer cuando alguien es perseguido no
por confesar el nombre de Cristo sino por querer demostrar los valores del hijo
de Dios, dijo Francisco
Por lo tanto es una especie de persecución en
contra de Dios creador, en la persona de sus hijos.
Y continuó diciendo que vemos todos los días que
poderosas leyes obligan a las personas a no poder demostrar sus valores
públicamente.
Pero no pasa solamente con las personas sino
también las naciones; una nación que no sigue el conjunto de leyes modernas, o
al menos no quiere tenerlas en su legislación, es acusada y perseguida
cortésmente.
Y ahí llega la persecución a la objeción de
conciencia. Dijo que esta es una persecución que le quita la libertad al
hombre. Dios nos hizo libres pero este tipo de persecución nos quita la
libertad, por lo tanto si no se hacen las cosas enmarcadas en el tipo de moral
del mundo, serás castigado, si no perderás el trabajo y muchas otras cosas más,
y te van a dejar de lado.
Esta es la persecución central que se está dando en
el mundo.
Y finalizó con un llamado: el Señor prometió no
tomar distancia y nosotros y por lo tanto no debemos caer en el espíritu del
mundo; debemos tener cuidado e ir hacia delante porque el Señor siempre estará
con nosotros.
El Cristiano es un mártir es decir un testigo quién
debe dar testimonio de Cristo que nos ha salvado, siempre.
Leer más en detalle aquí:
Foros de la
Virgen María
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