jueves, 30 de agosto de 2007

¿EXISTE LA BRUJERÍA?


Si existe el bien, existe el mal. Lamentablemente, las personas, en vez de recurrir a Dios recurren al brujo. ¿El demonio cura? La respuesta es , pero a cambio de tu alma. Explicaré más adelante cómo es que esto funciona.

Si tus hijos están perturbados, le pasan huevo, periódico, etc., y además rezan. El mal de ojoes la trasmisión de malos deseos (envidia) de una persona a otra. Los afectados son personas sensible que nosotros las llamamos esponjas, porque, debido a su sensibilidad, absorben los deseos negativos de otros. Esto sucede casi siempre en criaturitas, aunque también, en menor proporción, en personas adultas.

En una de mis charlas sobre brujería, una persona se me acercó y me dijo que lo que yo decía era obsoleto, que había un estudio científico que indicaba que el huevo tenía la propiedad de absorber lo negativo de las personas. Yo le respondí:
-“Si usted cree que eso es cierto, échese en una cama y cúbrase de huevos si así lo desea, pero ¿por qué tiene usted que rezar?
Pasar huevo es como decirle a Dios:
-Yo creo más en que el huevo va a curar a mi hijo que Tú
O sea, sacan a Jesús de sus corazones y lo cambian por un huevo. Se imaginan ¿cómo debe sentirse Jesús ante ese cambio? El huevo es un buen alimento y para eso lo creó Dios. Acá tomo como ejemplo al huevo, pero igual sucede con las otras tonterías que pasan, periodicos, cuyes, etc.

¿Qué hacer en el caso que su criatura se sienta perturbada, fastidiada, etc.?

No se le puede quitar a las personas sus costumbres ancestrales, que nunca fueron desmentidas por los representantes de la Iglesia en su momento, si no les damos algo nuevo a que aferrarse. Lo que debe hacer es pasarle la Biblia en vez del huevo y, rezar exactamente como si lo estuvieran pasando, o sea, un Padrenuestro, tres Avemaría y un Gloria. Esto es mas efectivo y duradero que pasar el huevo, sobre todo que así no ofenden a Dios. Si no tuvieran una Biblia, pasar un crucifijo, estampita, etc. con mucha fe en Dios, pidiéndole a María Santísima que interceda.

El mal de ojo no se manifiesta con fiebre. Si esto sucediera, lleven a su criatura al médico inmediatamente, es posible que esté con alguna enfermedad. Una vecina, que tenía a su nieta con una fiebre altísima (más de 40º) me tocó la puerta a las 3am. para decirme que le había estado pasando la Biblia a su nieta - como yo le había enseñado - y que esta no mejoraba. Una cosa es mal de ojoy otra cosa es una enfermedad. Por supuesto que la envié a la Posta más cercana y le expliqué nuevamente en qué había errado.

El pasar huevo es una forma de brujería tan igual que pasar cuy, gallina negra, etc. La persona se sana pero ¿a cambio de qué?... de su alma. Tendrás que responder ante Dios el haber entregado a tu criatura al demonio. Quizá por ignorancia tu pena no sea tan grave, pero ahora que lo sabes, tendrás que responder por una falta grave.

¿Cómo actúan los brujos? ¿Sanan los brujos
?

Primeramente ¿cómo se llega a ellos? Generalmente se llega a ellos por intermedio de algún familiar o amigo que ignora el mal que está haciendo. Sólo ven el resultado, o sea, la curación de la persona sin pensar en las consecuencias que esto le va a traer.

Los brujos no sanan, el que sana es el demonio a través de sus sacerdotes, los brujos. Primeramente, para ser brujo, tiene éste que cumplir con ciertos requerimientos del demonio. Cuanto más poderoso quiera ser, más exigido será por el maligno, incluso llegar hasta el asesinato de sus seres queridos.

Veamos un caso: Una persona se enferma; lo llevan al médico, le hacen todos los exámenes y el resultado es que no tiene nada pero sigue enfermo. ¿Qué es lo que hace la familia?: Lo llevan al brujo porque lo primero que piensan es que le han hecho daño. Vamos a aceptar que sea cierto. Alguien, por alguna razón, por ejemplo: quitarle el marido o la esposa a alguien, quedarse con su casa, ganarse su amor, etc., a través de un brujo le ha hecho daño.

¿Qué va a pasar? Si lo llevan al paciente a un brujo cualquiera, que muchas veces ni siquiera es brujo sino estafador, no va a pasar nada, el paciente seguirá mal. Si lo llevan a un brujo poderoso, éste le pedirá a su demonio fuerte, que saque del camino al demonio débil para que el paciente se sane. Ahora, dependiendo de la capacidad monetaria del paciente (porque el brujo cobra fuerte), éste pedirá un tiempo de bienestar para el paciente, luego del cual se volverá a sentir mal y, por ende, tendrá que regresar y volver a pagar para sentirse bien. Esta persona vendió su alma al demonio y dependerá de éste para sentirse bien.

He sido testigo de cómo mueren estas personas... no se lo deseo a nadie.

Dios no te cobra para sanarte y, cuando te sana lo hace para siempre. Morirás de todas maneras, porque ese es nuestro destino, pero no de la enfermedad que te metió un brujo. Lo aconsejable, en esos casos, es recurrir a algún grupo católico especializado en sanación para ser liberado. Estos grupos pueden estar formados por sacerdotes o laicos comprometidos dedicados exclusivamente a ver esos casos.

Podría decirte que en mis 18 años consagrado en el ministerio de sanación, he visto muchos casos de milagros y prodigios, desde sanaciones de cáncer o sida, hasta casos de conversiones. Gente que ha salido de droga, homosexualismo, alcoholismo y ha reformado su vida para su bien y el de su familia.
José Miguel Pajares Clausen


REFRANES ANTIGUOS


A cada pajarito le gusta su nidito.
A callarse ranas que va a predicar el sapo.
A la que fue flor algo le queda de olor.
A quien te engañó una vez jamás le has de creer.
Acuérdate al atar que has de desatar.
Al diablo y a la mujer nunca les falta qué hacer.
Cuando Dios creó al hombre, el Diablo ya había creado a la mujer.
Al hombre le falta paciencia y a la mujer le sobra insistencia.
Al músico viejo le queda el ritmo.
Al revés te lo digo, para que me entiendas.
Al tonto se le conoce pronto.
Antes de tomar casa donde vivir, mira la vecindad.
Aprende del maestro y serás diestro.
Aramos dijo la mosca, estando en el cuerno del buey.
Arriba canas y abajo ganas.
Aún no ensillamos y ya cabalgamos.

BUENA PUBLICIDAD


Los siguientes avisos son de una campaña de prensa de la Iglesia de Singapur. Resultó un éxito atronador.

Por favor, no bebas alcohol si vas a conducir. Todavía no estás listo para verme. Dios.

¿Te imaginas el precio del aire si lo trajera otro proveedor? Dios.

¿Qué debo hacer para llamar tu atención? ¿Poner un aviso en el diario? Dios.

Terráqueos, no me traten como a un marciano.
Dios.

Pensaba hacer el mundo en blanco y negro. Entonces dije... ¡naaah!. Dios.

Si te perdiste el amanecer que hice hoy para ti... no importa. Te haré otro mañana. Dios.

¿Cómo puedes ser un self-made-man? Recuerdo perfectamente haberte creado. Dios.

Si piensas que la Gioconda es asombrosa, deberías ver mi obra maestra...
en el espejo
. Dios.

No te olvides del paraguas. Hoy tengo que regar las plantas. Dios.

En mi opinión, eres la persona más hermosa del mundo... Ok soy parcial. Dios.

Dile a los niños que los amo. Dios.

Vengan a mi casa el domingo antes del partido. Dios.

Vengan y traigan a los niños. Dios.

¿Qué parte de No debes... no entendiste?. Dios.

Necesitamos hablar. Dios.

Sigue usando mi nombre en vano y atrasaré la hora de salida. Dios.

Amo las fiestas de casamiento... invítame a tu boda. Dios.

Eso de amar al prójimo”... lo dije en serio. Dios.

Te amo a ti, y a ti, y a ti, y a ti... Dios.

El camino por el que vas... ¿te lleva a mí? Dios.

Sígueme. Dios.

Teoría del Big Ban... tienen que estar bromeando. Dios.

¿Te parece que hace calor acá? Dios.

¿Leíste mi primer best seller? Es todo un desafío.
Dios.

¿Tienes una idea de adónde vas? Dios.

No me hagas bajar. Dios.

¿DIOS ES HOMBRE O ES MUJER?


¿Por qué Dios haciéndose hombre se ha encarnado
en una persona de sexo masculino? ¿Hombre o mujer? ¿Cómo es Dios
?

¿Por qué Dios haciéndose humano se ha encarnado en una persona de sexo masculino? ¿Por qué a su vez este Hijo de Dios nos ha enseñado a dirigirnos a Dios llamándolo Padre?

Los conceptos que nos forjamos de Dios muchas veces provienen de conceptos propiamente humanos. Nuestra naturaleza es humana y por lo tanto está acostumbrada a moverse en esos parámetros, y aún más después de las corrientes iluministas, racionalistas y positivistas en donde todo lo que no entra en categorías humanas de la razón o todo lo que no se puede conocer por los sentidos carece de valor.

Dios es Dios. No es hombre ni mujer, está más allá de las categorías de los géneros. Por las limitaciones de la naturaleza humana y por las limitaciones lingüísticas de los escritores sagrados, es necesario recurrir a metáforas para explicar la naturaleza de Dios.

Varias de esas metáforas se encuentran en la Biblia y es necesario tener los conocimientos adecuados para hacer una explicación certera de lo que Dios nos quiere decir a través de los escritos y de los mismos escritores sagrados.

Gran parte de la problemática actual en la interpretación de la Biblia, particularmente la que realizan las sectas protestantes y otras religiones, se deben a la falta de método científico con que estas personas interpretan la Biblia:
no toman en cuenta el idioma original en el que fue escrito, desconocen las circunstancias históricas, culturales y sociales en las que vivió el autor sagrado, ignoran la importancia y el papel fundamental de la tradición y de la transmisión del mensaje y así tan a la ligera pretenden dar su interpretación adecuada leyéndola sin tomar en cuenta todas y otras muchas de las circunstancias antes descritas.

Dejando a un lado este problema, nos centramos en el problema del sexo de Dios: ¿Masculino o femenino? Cuando Cristo mismo nos enseña a orar, se dirige a Dios con la palabra Padre”. ¿Quiere esto decir que Dios es de sexo masculino? Se trata de una imagen que Cristo nos ha consignado para que pudiésemos recurrir fácilmente a Dios en la oración. No está de ninguna forma rebajando la naturaleza de Dios para hacerla accesible al hombre. Dios permanece siendo Dios con todos sus atributos que su naturaleza le otorgan. Simple y sencillamente se recurre a una imagen para que comprendamos mejor algunas de las características de Dios, concretamente en la oración: la paternidad en este caso no se refiere al aspecto sexual sino
a aspectos como escucha amorosa, fuerza en quien apoyarnos, receptividad.

Así como Cristo recurre a Dios como Padre y no por eso quiere decir que Dios sea de sexo masculino, así también otros escritores sagrados hacen uso de metáforas femeninas para referirse a otras cualidades de Dios. Por ejemplo, cuando se habla de la piedad de Dios no se recurre al término abstracto de piedad sino a un término inmerso de corporeidad, de materialidad: “rachamim, que quiere decir el seno materno, de Dios que simboliza propiamente la piedad. Gracias a esta palabra viene visualizada la maternidad de Dios en su significado espiritual.

A lo largo de toda la Biblia los escritores sagrados se suceden con una gran cantidad de metáforas, símbolos que expresan las cualidades de Dios. Algunas de esas cualidades vienen referidas con categorías masculinas (el Señor de los Ejércitos) y otras con categorías femeninas (aunque una madre se olvidara del hijo de sus entrañas yo nunca me olvidaré de Israel), no quedan circunscritas a la categoría de sexo porque la naturaleza de Dios está más allá de las categorías humanas con que podamos clasificarlo o conocerlo. Tan sólo vienen expresadas para que podamos aproximarnos un poco a conocer cuál es la naturaleza de Dios.

miércoles, 29 de agosto de 2007

¿DÓNDE ESCONDIERON LA FELICIDAD?


Un poco antes de que la humanidad existiera, se reunieron varios duendes para hacer una travesura.

Uno de ellos dijo:
"Debemos quitarles algo, pero, ¿Qué les quitamos?"

Después de mucho pensar uno dijo:
"¡Ya sé!, vamos a quitarles la felicidad, pero el problema va a ser dónde esconderla para que no la puedan encontrar".

Propuso el primero:

"Vamos a esconderla en la cima del monte más alto del mundo".

A lo que inmediatamente repuso otro:
"No, recuerda que tienen fuerza y alguna vez alguien puede subir y encontrarla,
y si la encuentra uno ya todos sabrán donde está
".

Luego propuso otro:
"Entonces vamos a esconderla en el fondo del mar"

Y otro contestó:
"No, recuerda que tienen curiosidad y alguna vez alguien construirá algún aparato para poder bajar y entonces la encontrará".

Uno más dijo:
"Escondámosla en un planeta lejano a la tierra".

Y le dijeron:
"No, recuerda que tienen inteligencia y un día alguien va a construir una nave en la que pueda viajar a otros planetas y la va a descubrir, y entonces todos tendrán felicidad".

El último de ellos era un duende que había permanecido en silencio escuchando atentamente cada una de las propuestas de los demás duendes.
Analizó cada una de ellas y entonces dijo:

"Creo saber dónde ponerla para que realmente nunca la encuentren".

Todos voltearon asombrados y preguntaron al unísono:
"¿Dónde?".

El duende respondió:
"La esconderemos dentro de ellos mismos, así estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán".

domingo, 26 de agosto de 2007

ESTABAS MUY OCUPADO

Mientras te levantabas esta mañana, yo te observaba. Esperaba que me hablaras, aunque fuesen una pocas palabras preguntando mi opinión acerca de algún tema o agradeciéndome por algo bueno que te hubiese sucedido el día de ayer.

Pero noté que estabas muy ocupado... buscando la ropa adecuada que te ibas a poner para ir al trabajo. Seguía esperando mientras corrías por la casa arreglándote, creí que encontrarías unos cuantos minutos para detenerte y decirme ¡HOLA!... pero estabas muy ocupado.

Para ver si por fin me percibías, encendí el cielo para ti, lo llené de colores y dulces cantos de pájaros... pero ni siquiera te diste cuenta de ello.

Te miré mientras ibas al trabajo y esperé pacientemente todo el día.

Con tantas actividades supongo... que estabas muy ocupado para decirme algo.

De regreso, vi tu cansancio, quise rociarte para que el agua se llevara todo tu estrés. Pensé que agradándote, te acordarías de mí. Sin embargo, enfurecido, ofendiste mi nombre. Deseaba tanto que me hablaras... aun quedaba bastante tiempo.

Después encendiste el televisor. Esperé pacientemente mientras mirabas tu programa favorito, luego cenaste y nuevamente te olvidaste de hablar conmigo.

Te noté cansado, entendí tu silencio y apagué el resplandor del cielo... pero no te dejé a oscuras, lo cambié por un lucero... en verdad fue hermoso, pero no estuviste interesado en verlo.

A la hora de dormir creo que ya estabas agotado. Dijiste Buenas Noches a tu familia, caminaste hacia tu cama y casi de inmediato te dormiste. Acompañé con música tus sueños. Mis animales nocturnos se lucieron.

No hay problema... porque quizá no te des cuenta que siempre estoy ahí para ti.

Tengo más paciencia de la que te imaginas. Quisiera enseñártela para que puedas tenerla con los demás.

Te amo tanto que espero todos los días por una oración, y el paisaje que diseño cada amanecer es para ti.

Bueno... te estás levantando otra vez y no me queda otra cosa que entregarte todo el amor que siento por ti y continuar esperando que al menos el día de hoy me dediques solo... un poco de tiempo.
Tu amigo: Jesús

VIDA

Ya perdoné errores casi imperdonables, traté de sustituir personas insustituibles y olvidar personas inolvidables.

Ya hice cosas por impulso, ya me decepcioné con personas cuando nunca pensé decepcionarme, más también decepcioné a alguien.


Ya abracé para proteger, ya me reí cuando no podía, ya hice amigos eternos, ya amé y fui amado, pero también fui rechazado, ya fui amado y no supe amar.

Ya grité y salté de tanta felicidad, ya viví de amor e hice juramentos eternos, pero también “rompí la cara” muchas veces.


Ya lloré escuchando música y viendo fotos, ya llamé sólo para escuchar una voz, ya me enamoré por una sonrisa, ya pensé que iba a morir de tanta nostalgia y... tuve miedo de perder a alguien especial (y terminé perdiéndolo) ¡PERO SOBREVIVÍ! ¡Y TODAVÍA VIVO!

No paso por la vida... y tú tampoco deberías sólo pasar... VIVI!!!

Bueno es ir a la ,lucha con determinación, abrazar la vida y vivir con pasión, perder con clase y vencer con osadía, porque el mundo pertenece a quien se atreve y LA VIDA ES MUCHO para ser insignificante.


Charles Chaplin

EL LIBERTINAJE SEXUAL

Autor: P. Jorge Loring - Fuente: Para Salvarte

Con frecuencia se oyen hoy ideas sobre sexualidad tendenciosas y corruptoras que pretenden «mentalizar» a la gente para llevarlas al libertinaje sexual que es el negocio de los pornócratas. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, define la pornografía como la «comercialización del sexo». No decimos que el sexo sea pecado, si se usa correctamente; lo que no es lícito es ese consumo de sexo que han montado los pornócratas, para hacer su negocio, con revistas, libros y películas en las que se hace del sexo un vicio.
A fuerza de verlo en el cine muchos jóvenes juegan a hacer el amor, como los niños juegan a los indios. Pero la sexualidad es una cosa muy seria; no es para jugar. Al goce desordenado del placer sexual se llama lujuria. «Proclamar la absoluta libertad sexual puede parecer progresista pero de hecho se opone a los resultados de la mejor investigación contemporánea. Y el que se enfrenta a la investigación no es realista, es un iluso que pretende tal vez seducir, pero no convencer, ¡y menos ayudar!».

Dice San Agustín: «Ama y haz lo que quieras». Algunos han sacado de aquí su libertad sexual, como si lo que se hace por amor no fuera nunca pecado. «Pero lo que San Agustín quería decir es que el que ama verdaderamente hará el bien sin tener que consultar la ley». Los medios de comunicación presentan con frecuencia comportamientos sexuales como «normales» en el sentido de «no patológicos»; pero esto no significa que sean morales, conforme a los principios de la Iglesia. Hoy se prodiga hacer el coito «a nivel de camaradería». Se habla mucho de «hacer el amor», pero esta frase es falsa; el amor no se «hace», se da. Las cosas se hacen. El amor se tiene. El amor brota de la mutua estima entre dos personas. Por eso «estamos asistiendo a una verdadera crisis del amor». Es notable el fracaso de las comunas de sexo libre. Por querer disfrutar de la vida, lo que se hace es incapacitarse para el amor, que es la única felicidad de la vida.

Las prostitutas, que viven del sexo sin amor, son un claro ejemplo de que sin amor no es posible la felicidad. Se las llama Esclavas del siglo XX, La esclavitud de la mujer. Son títulos de libros que tratan de la prostitución. Las prostitutas usan del sexo a tope. Alguna recibe treinta hombres en una noche. Pero eso no las hace felices. Una ninfomaníaca escribe: «Con todos los hombres que he conocido me he prestado a acostarme con ellos. Tengo una aventura tras otra. Ésta es la historia de mi vida, y la odio con toda mi alma». Reducir el amor a sensaciones placenteras es degradarlo. El amor tiene una vertiente espiritual que es superior a todas las técnicas de manipulación de los órganos. El amor es una fuente de ternura, mientras que el cuerpo lo más que da es el estremecimiento de un orgasmo.

Encuestas realizadas por un médico demuestran que muchos jóvenes hacen el coito para poder demostrar su masculinidad; y ellas, porque lo hacen otras. Es decir, que hoy muchos se avergüenzan de su pureza y alardean de su libertinaje sexual. Incluso hay quienes llaman civilizada y madura a la persona que rompe moldes morales, para vivir según le apetece. Me parece una falsedad. Es mucho más civilizada y madura la persona que tiene dominio propio, y sabe mantener su comportamiento dentro de una rectitud moral. Llamar represión atávica a la rectitud moral es querer poner una etiqueta peyorativa a valores que no se quieren reconocer. Pero las joyas que valen, no pierden valor porque haya personas que no saben apreciarlas. «La madurez se muestra plenamente cuando no elegimos aquello que satisface nuestras apetencias del momento, sino que permite conseguir el ideal que hemos asumido como meta de nuestra vida». «Vivimos una sociedad erotizada. El sexo se ha convertido en un bien de consumo. Se vive el sexo sin amor. El resultado es un hastío que desemboca en un especial vacío interior».

Oswald Spengler acusa a los jóvenes que «hacen del erotismo un deporte» «La sociedad necesita la erradicación de vicios y la siembra de virtudes. Pero parece que no es así. La sexualidad desbordada es insaciable: cada vez quiere más, cada vez quiere experimentar cosas nuevas, hasta llegar a las aberraciones más indignantes, como podemos ver por las noticias diarias de delitos de prostitución de menores, de crímenes sádicos, de bestialidades de abusos y lesiones masoquistas, etc». La oleada de pornografía está convirtiendo a muchos en auténticos maníacos sexuales, ávidos de toda clase de anormalidades y perversiones sexuales. Afirman los sexólogos que la sexualidad sin amor llena el alma de vacío. A veces se busca el placer en la agresividad y en las violaciones; pues la degradación que produce el abuso lleva a la impotencia y frigidez sexual.
El ambiente erotizado que nos ha tocado vivir, hace suponer que el ejercicio del sexo es la mayor felicidad del mundo, y después resulta que no es así; pues las sensaciones de tipo físico carnal dan menos que la felicidad espiritual.

Dicen los sexólogos: «La actividad sexual no es lo más importante en la vida» Por mucho sexo que viva una mujer, cuando encuentra a otra que vive el amor, siente una enorme envidia, pues echa de menos lo que el sexo solo no puede darle.
«Ha sido V. Frankl el que ha venido a explicar, contra lo que decía su maestro Freud, que la dimensión más importante del hombre no es el sexo, sino el sentido religioso, trascendente, la posibilidad de poseer un sentido último que dé razón de todo lo que hacemos. Cuando el hombre carece de este sentido que le hace capaz de vencer el dolor y de superar la muerte, enferma. Y es así como la enfermedad típica de nuestro tiempo es la angustia. Angustia que surge de la pérdida del sentido trascendente. Y es profundo lo que afirma V. Frankl de la felicidad: “La felicidad no se puede buscar nunca directamente, sólo puede venir como consecuencia de haber dado lo mejor de nosotros mismos a una causa noble, capaz de superar la limitación, el desánimo y la muerte, a una causa trascendente”». «Freud peca de reduccionismo y de simplismo al entender al hombre exclusivamente desde el sexo. En el hombre hay instintos aún más fuertes que el sexual, como es el de la conservación del individuo, por no citar la capacidad de sacrificio que ha llevado a muchos a entregar la propia vida en aras de ideales diversos. Además, la necesidad de belleza, de bondad, de justicia, y de verdad que hay en el hombre no se justifica por el sexo».

Éste es el problema del hombre de hoy, que vive más que nunca sin raíces, sin valores que le lleven más allá de sí mismo. Es cierto que toda acción humana tiene que tener la prerrogativa de la libertad, pero el hombre de hoy ha hecho de la libertad, que es un instrumento, un fin de sí misma; y, de este modo, está ya experimentando algo sabido desde siempre: que la libertad no libera, libera la verdad. Hay quienes en nombre de la libertad quieren desasirse de toda clase de trabas. Para ellos es aleccionadora la inscripción debajo de un dibujo en la Abadía de Pannonhalma donde representa un barril de vino sin anillos de hierro, y el vino saliendo por las rendijas. El letrero ponía: «Se perdió por la libertad». «La prensa nacional y extranjera viene haciéndose eco últimamente de la atmósfera de erotismo y del ambiente sexualizado que nos está obligando a respirar la moderna civilización, que presume de haber enterrado mitos, y que prometía librar al hombre de las neurosis y obsesiones de ciertas represiones ciegas y voluntaristas, que querían hacer del hombre un ser angélico». «Pero en vez de liberar al hombre, su fragilidad ha quedado sometida al asedio omnipresente de cuanto dice relación con el sexo y se le está dejando indefenso en la lucha por integrar el instinto sexual y ponerlo al servicio de la vida y del auténtico amor. La iniciación sexual que necesitan nuestros jóvenes nada tiene que ver con la enciclopédica ilustración de todos los abusos y perversiones sexuales, con la ola de erotismo, con las escenas íntimas de alcoba, ni con los supermercados del amor». «Bajo el hipócrita lema de la liberación de tabúes se está produciendo, a escala mundial, una desconcertante exaltación del nudismo, del naturalismo y de la obscenidad que lo invade todo, originando una escandalosa quiebra de la moralidad pública y privada»

Vamos, si no se pone remedio a tiempo, hacia un pansexualismo degradante de la naturaleza humana. Y lo peor es que apenas si hay reacción social contra la agresiones morales que por doquier se dan contra la limpieza de costumbres, como si una general abdicación del sentido natural y cristiano de lo lícito prevaleciera incluso entre personas e instituciones que deberían velar activamente por la moral pública. «La pasividad ante la progresión de iniciativas eróticas y pornográficas acusa una general dimisión de derechos y deberes frente a un estado de cosas cada vez más deprimente». De todo esto resultan casos como el de aquella muchacha que se quedó embarazada, y no podía saber quién era el padre de la criatura porque aquel mes se había entregado a tres muchachos distintos. Triste situación, pero lógica consecuencia para una muchacha que no tenía «escrúpulos anticuados» y no se negaba nada de lo que le apetecía. Estas cosas pasan cuando no se respeta la moral. O aquel otro caso de un jovenzuelo que fue a estrenar su vida sexual con una «señora», y después se enteró que era la madre de su mejor amigo. O aquel caso en que dos enamorados descubren que no pueden casarse porque resulta que, sin saberlo, son hermanos: el padre de él se acostó con la madre de ella. O la de aquel muchacho que se acostaba con todas sus amigas, y el día que se enamoró de verdad recibió un enorme mazazo moral, que le dejó destrozado, al enterarse que su padre se había acostado antes con la muchacha que él amaba. O aquel otro caso de una mujer que sedujo al novio de su hija, y al encontrarlos ésta a los dos en la cama se fue de su casa para siempre. La madre perdió para siempre a su hija y al galán.

Esto es lo que ocurre cuando el libertinaje sexual se salta las barreras de la moral católica. Si Dios manda castidad a la juventud y fidelidad a los matrimonios, no es por el gusto de molestarnos, sino porque eso es necesario para la felicidad del hogar. ¿Cómo un hombre va a ir con ilusión al matrimonio sabiendo que la que va a ser su esposa ha pertenecido antes totalmente a cuantos lo han deseado? Es lógico que esos matrimonios acaben en divorcio. ¿Cómo va un hombre a amar a sus hijos, si no puede saber si esos hijos son suyos o de cualquiera de los que han «estado» con su mujer? Ni amor de esposa, ni amor de hijos. Es que en una sociedad en que la juventud no es casta y el matrimonio no guarda fidelidad, se ha matado el amor del hogar que es la suprema de las felicidades naturales que Dios ha puesto en esta vida. La libertad sexual de la juventud está atrofiando su sexualidad. Tanta sexualidad está disminuyendo la capacidad de respuesta sexual y el impulso sexual cada vez necesita mayores estímulos por aumentar cada vez más la impotencia”. Así lo afirma el Dr. López Ibor. Por eso cada vez son más los jóvenes que acuden al médico con problemas de impotencia sexual”, como se dijo en una entrevista en Radio Nacional de España. Y es que Dios ha hecho la sexualidad para que esté al servicio del amor en el matrimonio. Pero quienes hacen de la sexualidad un vicio, es lógico que la destrocen.

En la revista de medicina JANO, se afirma que muchas disfunciones sexuales e impotencias masculinas se deben a experiencias sexuales precoces y premaritales. «Algunos reducen el amor a la mecánica de la genitalidad. Es una aberración. La satisfacción fisiológica de unos órganos nada tiene que ver con el amor, que es de la persona entera, incluyendo el alma espiritual. La trivialización de la sexualidad en la juventud está dando orígenes a muchos matrimonios jóvenes ya hastiados de genitalidad, precisamente cuando lo lógico es que estuvieran viviendo la cumbre de su ilusión amorosa». «El libertinaje sexual de la juventud está dando origen a un aumento de la impotencia y de la frigidez». Hay maestros de sexología que cifran todo el éxito de la pareja en que el sexo funcione bien. Tienen una visión de la pareja unidimensional. Lo reducen todo a lo meramente biológico-zoológico. El hombre es mucho más que un animal. El hombre puede amar, puede comunicar ideas e ideales, puede sentir una armonía espiritual; y todo esto le lleva a una plenitud gratificante. «La felicidad humana es mucho más que un mero placer sensitivo. Entender la sexualidad sin amor, sólo como un instinto básico es animalizar al hombre» El libertinaje sexual con el que muchos han querido superar lo que ellos llaman tabúes y represiones arcaicas, sólo ha conseguido animalizar la sexualidad humana, separándola del amor y por lo tanto, privándola de la felicidad. «Afirman los sexólogos que la sexualidad sin amor llena el alma de vacío, y a veces necesita el placer de la agresividad (violaciones), unida a las más diversas formas de impotencia y frigidez sexuales. Por eso, hoy, muchos sexólogos modernos opinan que hay que volver al restablecimiento de los llamados tabúes sexuales
».

El hombre debe hacer de la sexualidad un lenguaje de amor. La sexualidad sin amor es propia de los animales. Hoy hay quienes se ríen de las cautelas de la moral sexual y presumen de ser muy «modernos» defendiendo más libertad sexual. Las consecuencias ya están asustando a las personas conscientes. El libertinaje sexual tiene consecuencias lamentables, como son las violaciones y las madres adolescentes.

En 1983 en Nueva York, uno de cada tres nacimientos fue extramatrimonial. En Estados Unidos quedan embarazadas al año más de un millón de «quinceañeras». John Hamilton considerado como uno de los sociólogos más acreditados de Estados Unidos, en un estudio sobre los problemas sexuales de la juventud, dice que en 1976 quedaron embarazadas 750.000 muchachas menores de 17 años. La mayoría no sabía quién era el padre de la criatura. Muy pocas se casan después. Los matrimonios entre adolescentes casi siempre fracasan. Éste es el resultado de la liberación sexual y el olvido de las normas morales de la Iglesia. El sexo es una cosa muy seria. No es para jugar. Tanto embarazo irresponsable es para pensar. Traer hijos al mundo no puede ser el resultado de un juego. Tomar «precauciones» no basta. La prueba está en tanto embarazo no deseado. La única solución es la moral de la Iglesia. «La persona tiene derecho a recibir una información y una educación que respeten las dimensiones morales y espirituales de la vida humana
».

Hoy está de moda la filosofía del placer sin riesgo: sin riesgo de SIDA, sin riesgo de embarazo. Esto, además de rebajar el sexo, que no es sólo para el placer, es causa de muchísimos fracasos: como enfermos de SIDA que usaron preservativos, y embarazos no deseados, a pesar de usar anticonceptivos. Las autoridades de Puerto Rico están alarmadas y buscan solución al número de madres adolescentes. Según las estadísticas suministradas por el Departamento de Salud, en 1986 hubo mil madres de doce a quince años, en un población de tres millones de habitantes. En España quedan embarazadas 20.000 adolescentes al año. En España es cada vez mayor el número de adolescentes embarazadas. Así se afirmó en el XIX Congreso Nacional de la Asociación Española de Ginecología. En los últimos diez años, en España, ha aumentado en el 500% el número de adolescentes solteras embarazadas. Últimamente crece en España el número de adolescentes afectados por enfermedades venéreas de transmisión sexual. Hoy en España se han duplicado las enfermedades de transmisión sexual. Últimamente empieza a preocupar un cáncer de transmisión sexual llamado HPV por sus siglas en inglés. Esta degradación sexual de la juventud española es debida a la campaña llevada a cabo por el gobierno socialista fomentando el libertinaje sexual para pervertir a la juventud y apartarla de la Iglesia. «La forma de tratar el problema sexual en los medios de comunicación estatal y en ciertos escritos publicados por la Administración Socialista indica que no se intenta sólo informar sobre sexualidad, sino incitar a la práctica de relaciones eróticas». «En folletos sobre información sexual publicados por ciertas Autonomías, e incluso por el Ministerio socialista de Sanidad, se orienta a los niños y jóvenes al ejercicio de una sexualidad que tiene por fin obtener un goce sensible. Y esto se presenta como una liberación frente a generaciones anteriores reprimidas por normas morales. De estos folletos son estas frases: no hay nada que sea anormal, si os gusta”, ”tienes derecho a disfrutar de tu cuerpo”, “aceptar que te atraen las personas de tu mismo sexo no es delito, es un derecho de cada uno. Cuesta trabajo pensar que esto lo hagan personas que son responsables del gobierno de un pueblo
».

Bernabé Tierno

El célebre psico-pedagogo Dr. Bernabé Tierno, comentando la publicación del Ministerio de Asuntos Sociales socialista sobre información sexual, dice lo siguiente: «Tras una detenida lectura del texto, la primera impresión es que lo que aparentemente se presenta como información, más bien parece una clara incitación. Por eso mi crítica va dirigida fundamentalmente a la superficialidad con que se explican una serie de técnicas y métodos que impiden las consecuencias no deseadas de unas relaciones sexuales a las que, de manera demasiado alegre, se alienta a los jóvenes más o menos directamente. La facilidad, tranquilidad y desparpajo con que se pretende ayudar a los adolescentes al exponer las distintas advertencias, métodos y técnicas, constituye un arma de doble filo: el conocimiento y uso de las mismas se convertirá en un incentivo más para que las relaciones sexuales sigan incrementándose y, con ello, el número de madres adolescentes. Mi larga experiencia educativa me dice que de poco o nada sirven las técnicas extrínsecas si falta la motivación interna del individuo. Mientras el placer sea el valor predominante en la sociedad y el valor subyacente en toda esta campaña informativa cuyo mensaje es disfrutar del sexo evitando sus peligros, creo que no podemos quejarnos de que aumenten las consecuencias negativas al incrementarse la actividad sexual de los adolescentes. Los impulsos sexuales no se gobiernan con técnicas sino con la decisión de la voluntad. Así pues, toda esta avalancha informativa no va a servir de nada si no va acompañada de una formación interior, de unos valores morales, de un entrenamiento de la voluntad para que el individuo sepa dar a su sexualidad el horizonte moral que le corresponde. Aquí, más que en ninguna otra área de la personalidad, es imprescindible que no separemos el aspecto informativo de la dimensión educativa. Sin este complemento educativo de la sexualidad, como valor humano que debe ponerse al servicio de valores más altos, carece de significado toda información que pretendamos dar al adolescente. Dejo en el aire una pregunta a los organizadores de esta campaña: ¿dónde está la dimensión educativa de la misma? Yo no la he encontrado por ningún sitio».

Uno de los psiquiatras contemporáneos más célebres, Víctor Frankl, ha dicho: «Con el sexo, como con la moneda, después de la inflación viene la devaluación». «Después de la sexolatría viene el hastío y las desviaciones sexuales» «Con el sexo no se juega» «Este juego puede resultar catastrófico, porque el sexo puede llegar a ser incontrolable» «Puede convertirse en un gran tirano acosando al individuo y emponzoñando todas sus relaciones humanas». El erotismo desenfrenado es signo de civilización decadente. «Las relaciones prematrimoniales son perturbadoras y no aconsejables. Cuando se dan cuenta de que el amor erótico da poco de sí, este descubrimiento provocará en ambos, primero desilusión y apatía, después aburrimiento y, tal vez, al final, ruptura. Dirán - como es frecuente hoy día - que el amor se terminó y que hay que buscar nuevos horizontes. Lo grave es que no se percatan de que el amor no existió nunca. Fue suplantado por el mero erotismo. Tendrán momentos de euforia, que pasan como una llamarada que quema pero no construye, sólo deja algunas cenizas tras de sí. El amor no es como el hambre, que basta comer para saciarla. La relación sexual, en cambio, no satisface la necesidad de crear una relación amorosa auténtica. Es insuficiente». «Si queremos que la juventud ordene su conducta sexual, es necesario crear un ambiente socio-cultural que haga esto posible. Una sociedad de índole permisiva que erotiza el ambiente hasta provocar una especie de fijación casi obsesiva sobre lo sexual, no puede luego sostener, sin incurrir en una contradicción manifiesta, una norma de castidad prematrimonial». «Se van difundiendo cada vez más entre los adolescentes y jóvenes ciertas manifestaciones de tipo sexual que, de suyo, disponen a la relación completa. Estas manifestaciones genitales son un desorden moral porque se dan fuera de un contexto matrimonial».

En una sociedad en la que la juventud no es casta, y el matrimonio no guarda la fidelidad, se ha matado el amor del hogar que es la suprema de las felicidades naturales que Dios ha puesto en esta vida. El hombre es algo más que un animal. A los animales les basta el instinto sexual, pero el hombre necesita además amor. Para saciar el instinto, basta cualquiera. Por eso el perro va indistintamente con todas las perras del barrio. Pero el amor exige exclusividad. De ahí el tormento de los celos que no pueden permitir la intromisión de un tercero. «No hay amor sin celos» dice Proust. Y Lourdes Ortiz: «El que diga que ama y no es celoso, miente. El amor y los celos son dos caras de la misma moneda. No hay amor sin celos. El enamorado es celoso por naturaleza. Lo que es imperdonable y enfermizo es convertir los celos en tortura para el que se dice amar. El celoso pasa entonces a ser verdugo. Y el amado, una víctima».

El doctor en Psicología, Alfonso María Ruiz-Mateos, C.SS.R., en una conferencia que pronunció en Cádiz el 20 de diciembre de 1979, dijo: «Los celos no siempre son patológicos. Son sencillamente prueba de amor». Donde hay amor hay celos. La ausencia de celos se debe a una total confianza en la otra persona, o a una total indiferencia por no amar a la otra persona. Aunque los celos excesivos son contraproducentes, pues pueden provocar aquello que temen; porque el amor se gana, no se impone a la fuerza. Y la fidelidad es una exigencia del que ama, no del amado. Sin embargo, los celos demuestran que el que ama necesita poseer al amado en exclusividad. Esta misma exclusividad del amor, hace que la persona amada sea insustituible. A una madre no se la consuela sustituyendo su hijo muerto por otro «doble» perfecto. Incluso el «chulo» que explota a una prostituta y no le importa que ella se acueste con todos por dinero, no tolera que lo haga con otro por amor. El enamorado quiere el amor de la otra persona en exclusiva, y para siempre. Quien cambia fácilmente de amor, lo que tiene son caprichos sentimentales y sexuales, pero no amor. Como quien se encapricha con un juguete y luego lo deja por otro.

El amor es otra cosa. El auténtico amor quiere ser eterno: «te querré siempre», «te querré hasta la muerte». «Muchas esposas piensan, estúpidamente, que si consiguen de vez en cuando provocar los celos de su marido serán más capaces de conservar su amor. Pero los celos producen sospechas y rompen la confianza. El amor es confiado». «No hay que confundir los celos obsesivos con una fundada sospecha. En el primer caso conviene ir al médico. En el segundo aclarar lo que da fundamento a los celos» En el extremo opuesto a los celos está una bobalicona permisividad en coqueteos con tercera persona. Esto puede terminar muy mal. «Si uno de los dos se deja invadir por la ilusión de estar con una tercera persona, de verla, de hablar con ella, apeteciendo continuamente su presencia, esta es una grieta que puede romper un matrimonio».

viernes, 24 de agosto de 2007

LES DESEO LO SUFICIENTE...


Hace poco tiempo cuando estaba en el aeropuerto esperando a mi hijo que llegaba de Costa Rica después de casi tres años, escuché por casualidad a una madre e hija que estaban despidiéndose. Cuando anunciaron la partida del vuelo, ellas se abrazaron y la madre dijo:
- “Te amo y te deseo lo suficiente
- Madre, nuestra vida juntas ha sido más que suficiente. Tu amor es todo lo que he necesitado... también te deseo lo suficiente – respondió la hija.

Ellas se despidieron con un beso y la hija partió.

La madre pasó muy cerca de donde yo estaba sentado y noté que ella necesitaba llorar. Traté de no observarla para no invadir su privacidad, pero ella se dirigió hacia mí y me preguntó:
- “¿Alguna vez se ha despedido de alguien sabiendo que era para siempre
?”
- “Si lo he hecho – respondí - ...perdón por preguntar, pero ¿por qué esta despedida es para siempre?”.
- “Yo soy una mujer vieja, y ella vive muy lejos de aquí. La realidad es que su próximo viaje será para mi funeral.
- “Cuando se despidió de ella escuché que le dijo, “te deseo lo suficiente”, ¿a que se refería con eso
?”
Comenzó a sonreír...
ese es un deseo que hemos trasmitido de generación en generación... mis padres solían decirlo”.

Ella hizo una pausa y miró hacia arriba como si tratara de recordarlo en detalle... luego sonrió una vez más.
- Cuando decimos te deseo lo suficiente”, es que deseamos que la persona tenga una vida llena de SÓLO lo suficientemente bueno para vivir.

Entonces dirigiéndose hacia mí, ella compartió lo siguiente como si lo estuviera diciendo de memoria:

Te deseo que tengas suficiente sol para mantener tu espíritu brillante

Te deseo suficiente lluvia para que aprecies aun más el sol
Te deseo suficiente felicidad para que tu alma esté viva
Te deseo suficiente dolor para que las pequeñas alegrías de la vida
parezcan más grandes

Te deseo que tengas suficientes ganancias que satisfagan tus necesidades

Te deseo que tengas suficientes pérdidas para que aprecies todo lo que posees

Te deseo que tengas suficientes bienvenidas
para que logres superar las despedidas


...luego ella comenzó a llorar y se alejó.

jueves, 23 de agosto de 2007

TRES COSAS



Tres cosas irrevocables para la vida son: TIEMPO... PALABRAS... Y OPORTUNIDADES.

Tres cosas que no debes negarle a tu vida son: SERENIDAD... HONESTIDAD... Y ESPERANZA.

Tres cosas que deterioran la vida son: FALSO ORGULLO... ARROGANCIA... Y LA SOBERBIA.

Tres cosas que son tu elección son: TUS SUEÑOS... TU ÉXITO... Y TU DESTINO.

Tres joyas que tienes en la vida son: AMOR... AUTOESTIMA... Y VERDADEROS AMIGOS.

Tres Manifestaciones y Bendiciones que tienes para tu vida son: DIOS PADRE... DIOS HIJO... Y DIOS ESPÍRITU SANTO... aunque las TRES sean Una sola.

martes, 21 de agosto de 2007

EL PERRITO, LA PANTERA Y EL MONO


Un señor va de cacería al África y se lleva a su perrito para no sentirse solo
en ese lugar
.

Un día, ya en la expedición, el Perrito, correteando tras unas mariposas se aleja del grupo, se extravía y comienza a vagar solo por la selva. En eso ve que a lo lejos viene una enorme Pantera a toda carrera. Al ver que la Pantera lo va a devorar, piensa rápido qué hacer.

Viendo un montón de huesos de un animal muerto. Empieza mordisquearlo. Entonces, cuando la Pantera está a punto de atacarlo, el Perrito dice:
- “¡Ahhhh! ¡Qué rica Pantera me acabo de comer!”.

Un Mono que andaba trepado en un árbol cercano y que había visto y oído la escena, sale corriendo tras la Pantera para contarle cómo la engaño el Perrito:
- “¡Cómo serás de tonta! Esos huesos ya estaban ahí, además es un simple Perro


El Perrito alcanza de darse cuenta de la trastada que le hace el Mono.

Después que el Mono le contó a la Pantera la historia de lo que vio, ésta última muy brava le dice al Mono:
- “¡Súbete a mi espalda, vamos donde ese Perro a ver quién se come a quién!”

Y salen corriendo a buscar al Perro. El Perrito ve a lo lejos que viene nuevamente la Pantera, y esta vez con el Mono chismoso.
. “¿Y ahora qué hago?” – piensa todo asustado el Perrito.

Entonces, en vez de salir corriendo, se queda sentado dándoles la espalda como si no los hubiera visto, y en cuanto la Pantera está a punto de atacarlo de nuevo, el Perrito dice:
- “¡Este Mono tardón!, hace como media hora que lo mandé a traerme otra Pantera y todavía no aparece


MORALEJA
En los momentos de crisis, sólo la imaginación es más rápida que el conocimiento

Procura ser imaginativo como el Perrito, evita ser tonto como la Pantera, pero nunca seas chismoso como el Mono.

sábado, 18 de agosto de 2007

¿PECADO DE OMISIÓN?... PODRÍA SER.


Charles Plumb, era un piloto de un bombardero en la guerra de Vietnam.

Después de muchas misiones de combate, su avión fue derribado por un misil. Plumb se lanzó en paracaídas, fue capturado y pasó seis años en una prisión vietnamita. A su regreso a Estados Unidos, daba conferencias relatando su odisea, y lo que aprendió en la prisión.

Un día estaba en un restaurante y un hombre lo saludó:
Le dijo:
-Hola, usted es Charles Plumb, era piloto en Vietnam y lo derribaron.
-“Y usted, ¿cómo lo sabe?” – le preguntó Plumb.
-Porque yo empacaba su paracaídas. Parece que le funcionó bien, ¿verdad?”

Plumb casi se ahogó de sorpresa y con mucha gratitud respondió:
-“Claro que funcionó, si no hubiera funcionado no estaría yo aquí


Estando sólo Plumb no pudo dormir esa noche meditando: Se preguntaba:
-“¿Cuánta veces vi en el portaviones a ese hombre y nunca le dije buenos días; yo era un arrogante piloto y él era un humilde marinero?".
Pensó también el las horas que ese marinero pasó en las entrañas del barco enrollando los hilos de seda de cada paracaídas, teniendo en sus manos la vida de alguien que no conocía.

Ahora, Plumb comienza sus conferencias preguntándole a la audiencia: “¿Quién empacó ahora tu paracaídas
?”

Todos tenemos a alguien cuyo trabajo es importante para que nosotros podamos salir adelante. Uno necesita muchos paracaídas en el día:
Uno físico, uno emocional, uno mental y hasta uno espiritual.

A veces, en los desafíos que la vida nos lanza a diario, perdemos de vista lo que es verdaderamente importante y a las personas que nos salvan en el momento oportuno sin que se lo pidamos

Dejamos de saludar, de dar las gracias, de felicitar a alguien, o aunque sea, decir algo amable sólo, porque sí.

Hoy, esta semana, este mes, este año, cada día, trata de darte cuenta quien es el prójimo que empaca tu paracaídas, y agradécelo.

¿Sabías que diariamente en los monasterios de todo el mundo, hay unas monjitas que nadie conoce, que oran para que Dios no acabe aún con este mundo? ¡Acordémonos de ellas en nuestras oraciones
!

ABRAHAM RUEGA POR SODOMA (Génesis 18, 23 y ss)


Este se acercó y le dijo:

-“¿Es cierto que vas a exterminar al justo con el malvado? A lo mejor existen 50 justos dentro de la ciudad: ¿es cierto que vas acabar con todos ellos y no perdonarás el lugar en atención a los cincuenta justos que puede haber allí? ¡Sé que Tú estás lejos de proceder así, o sea, de permitir que el bueno sea tratado igual que el malo! ¿O es que el Juez de toda la Tierra no aceptará lo que es justo?
Yahvé dijo:
-Si encuentro cincuenta justos dentro de la ciudad, perdonaré a todo el lugar en atención a ellos”.
Abraham contestó:
-Sé que a lo mejor es un atrevimiento hablar a mi Señor, yo que soy polvo y ceniza, pero si para los cincuenta justos faltaran cinco, ¿destruirías la ciudad por los cinco que faltan?"
Yahvé dijo:
-No la destruiré si hay cuarenta y cinco hombres justos.
Abraham volvió a insistir:
-“¿Y si sólo se encontraran allí cuarenta justos?”
Yahvé contestó:
-No lo haré en atención a esos cuarenta”.
Abraham insistió de nuevo:
-No se enoje, mi Señor, si vuelvo a insistir, ¿y si no hubieran allí más que treinta justos?”
Yahvé contestó:
-No lo haré si encuentro allí treinta justos”.
Abraham continuó:
-Sé que es una osadía de mi parte hablar así a mi Señor, pero ¿si se encuentran allí sólo veinte justos?”
Yahvé contestó:
- No la destruiré en atención a los veinte
Abraham dijo:
-Vaya, no se enoje mi Señor, y voy a hablar por última vez. Tal vez no se encuentren allí más de diez.
Yahvé dijo:
-En atención a esos diez, Yo no destruiré la ciudad..."

Nota: Gracias a las oraciones anónimas de muchas personas, todavía podemos comunicarnos en esta nueva Sodoma y Gomorra en que vivimos; personas que empacan diariamente nuestros paracaídas espirituales y que ni siquiera conocemos ni nos conocen; personas a las que Dios escucha diariamente sus suplicas, como las de Abraham, aunque en el caso de Lot, sólo él y su familia eran justos, o sea cuatro... no habían ni cinco justos.

lunes, 13 de agosto de 2007

LOS ADIVINOS ¿UN NEGOCIO O ALGO PEOR?

Conviene entender cómo funcionan para comprender la apariencia de auténtica adivinación que pueden presentar.

La existencia de adivinos es algo que se remonta a los albores de la historia, y posiblemente es aún anterior. La novedad, hoy en día, es la proliferación generalizada, que adopta incluso formas y técnicas comerciales, hasta poderse decir que la adivinación constituye un sector económico, que mueve cada año cantidades sustanciosas de dinero. La "normalización" de esta actividad hace que sea contemplada por muchos como algo más o menos trivial, o como una manifestación - entre tantas otras - de búsqueda de seguridad, sin que tenga una particular relevancia moral. Ahora bien, ¿es así? Escasean los escritos críticos sobre esta actividad, mientras que una sencilla reflexión plantea cuestiones interesantes, por lo menos para quienes gastan tiempo y dinero como clientes, y carecen de respuestas claras. ¿Tiene algún fundamento? ¿Es simplemente un timo? ¿Hay que distinguir entre unos y otros para contestar lo anterior? ¿Es de verdad algo trivial? ¿Hay un mal en ello? Y si lo hay, ¿en qué consiste y por qué está mal? Intentaremos aquí contestar a todo ello.

UNA PANORÁMICA DEL MERCADO:
Comencemos por examinar brevemente lo que ofrece el mercado. A riesgo de simplificar un poco una realidad bastante compleja, podemos clasificar la oferta en cuatro categorías.
a) Adivinación sin contacto con el cliente: la forman fundamentalmente los horóscopos incluidos en los medios de comunicación. Al faltar el contacto con el receptor, se deben conformar con ofrecer predicciones generalizadas agrupadas por signos del zodiaco. Salta a la vista lo endeble de este planteamiento, cuya fiabilidad se diluye rápidamente cuando, por ejemplo, se comparan horóscopos de dos fuentes distintas, o se compara uno con otra persona nacida por las mismas fechas. Enseguida se concluye que responden a una combinatoria del azar. Pero, sin embargo, los sondeos indican que son secciones muy populares, y por ello tienden a ampliarse con horóscopos especializados para sectores concretos de personas.
b) Adivinación con contacto lejano con el cliente: se realiza a través de consultas por e-mail, y, sobre todo, por teléfono. Han proliferado mucho en estos últimos años, principalmente porque la apertura de las líneas "609" abre grandes posibilidades de negocio. Se trata de líneas muy caras, en las que el beneficio se reparte por mitades entre el operador telefónico y el negocio que se trate. Esto permite entender su funcionamiento. Se trata de poner como reclamo una figura conocida o publicitada, cuando en realidad atienden el teléfono personas contratadas por éste, bien preparadas para entretener un buen rato al cliente -con la excusa de que necesitan datos para adivinar -, engrosando así una ganancia fácil; cuando no se dispone de esa figura, la tendencia es presentarse con un ropaje de empresa especializada ("Videncia Universal", por ejemplo).

La figura más conocida aquí es Rappel (pseudónimo formado con su nombre: Rafael Payá Pinilla, añadiendo el "EL" final), que está al frente de un montaje donde trabajan más de doscientas personas, entre atención al cliente y "merchandising" de todo tipo de objetos de adivinación y ocultismo. Buena parte de su éxito se debe, por una parte, a una cuidada imagen que mezcla exotismo y simpatía; y, por otra, a un exquisito cuidado por evitar tanto las predicciones arriesgadas como todo lo que suene a magias o "artes" negras.
c) Adivinación con contacto directo basado en supuestas "técnicas": éstas son las llamadas "mancias" (p.ej., "quiromancia": por la lectura de la palma de la mano). La realiza una gran variedad de personas: desde puestos ambulantes con una mesa de tijera y dos sillas, hasta locales más "serios" y sofisticados, pasando por adivinos que quieren dar la imagen de santones cristianos, con altarcillo e imágenes sagradas incluidas. También hay variedad en cuanto a la publicidad: unos se anuncian, otros simplemente ponen el puesto; y en cuanto al aparato: desde barajas - "tarot" - hasta ordenadores.
d) Adivinación con recurso a espíritus, aunque esta característica no tiene por qué ser conocida por el cliente. Por eso la apariencia puede ser semejante a la categoría anterior, pero aquí lo más frecuente es la sobriedad - hay poco aparato - y la discreción: no se ejerce al aire libre ni se anuncia, de forma que se transmite por el boca a boca. Sin embargo, no suele faltar clientela, ya que sus resultados son bastante sorprendentes.


¿QUÉ HAY DE VERDAD EN TODO ESTO?: La respuesta es que poco. Pero conviene entender cómo funcionan en líneas generales, para comprender la apariencia de auténtica adivinación que pueden presentar. De los cuatro grupos catalogados, no merece la pena detenerse en el primero. Para los dos siguientes, hay que saber que los adivinos suelen generar confianza "adivinando" algo de los clientes - rasgos personales, hechos del pasado - como paso previo a las predicciones de futuro. Y aquí hay algunos trucos. La sala de espera - si la hay -, la capacidad de observación y la experiencia en tratar con personas son determinantes. Así, pongamos por caso, a un hombre que hojea nerviosamente y sin fijación una revista mientras espera su turno se le puede decir que "usted está pasando por una honda preocupación que le hace sufrir" sin asumir riesgos; o, a una mujer con una alianza en el dedo y que habla atropelladamente, se le puede afirmar que "usted discute mucho con su marido" con bastante seguridad.

El caso es que pocas personas tienen preparación y hábito para deducir de este modo, y por eso muchos suelen quedar impresionados. En la segunda fase, lo importante es conocer cómo es la vida, para poder formular unas predicciones que parecen muy concretas y en realidad son generalizaciones que cualquiera puede asumir. Así, se pueden decir cosas como que "alguien cercano a usted va a buscar hacerle daño" (a los no cercanos uno les suele ser indiferente), "veo un éxito en el trabajo dentro de su familia" (estadísticamente muy probable sobre todo si "familia" se toma en sentido amplio, como también si se sustituye el éxito profesional por una enfermedad), o "se va a llevar próximamente una decepción de alguien muy cercano" (es algo seguro: en un sentido u otro, nadie colma las expectativas que se tienen sobre él o ella).

El cuarto grupo de adivinos también utiliza esta doble fase, pero, de entrada, hay afirmaciones precisadas que sí que se corresponden con hechos concretos. Hay alguien que sabe demasiado. Y surge así la pregunta: ¿si intervienen de verdad espíritus, de quién se trata? No es difícil entender que Dios, y quienes con Él están, no están dispuestos a prestarse a un juego de este tipo. Queda por tanto el demonio. ¿Significa esto que estamos ante un poseído? En los Hechos de los Apóstoles (16, 16-18) aparece un caso de pitonisa poseída: la esclava de Éfeso, de la que San Pablo expulsó el demonio. No debe por tanto descartarse, pero no es lo más frecuente.

Al diablo le interesa más actuar con discreción; puede incluso que el adivino que le invoca no sepa a ciencia cierta con quién está tratando. Ahora bien, saber es una cosa y adivinar otra distinta.

En realidad, no se puede predecir a ciencia cierta el futuro en la medida en que éste depende de decisiones libres. Lo contrario implicaría la negación de la libertad, ya que la conducta estaría determinada de antemano por fuerzas ocultas o cualesquiera otras causas. En rigor, podría decirse que Dios no adivina el futuro: lo ve, ya que está por encima del tiempo, y todo lo conoce en presente, también lo que es futuro para nosotros.

El demonio no posee esta característica, y el resultado de nuestras decisiones le es desconocido. Pero también es verdad que no todo depende de decisiones libres, y ahí sí que hay un espacio ventajoso para una inteligencia superior a la humana y que conoce mejor la realidad. Además, en la conducta humana influyen factores que, si bien no permiten un conocimiento cierto de las decisiones futuras, sí que permiten, más o menos dependiendo de los casos, establecer de antemano probabilidades. Hay ahí, por tanto, un espacio de ventaja para alguien más inteligente y mejor informado, y lo aprovecha. Así, puede "predecir" cosas como una enfermedad ya iniciada pero aún no advertida, o un despido ya decidido pero aún no comunicado; junto a ello, no faltará nunca alguna otra predicción con la correspondiente ración de sutil cizaña o de mentira.

¿DÓNDE ESTÁ EL MAL?: Lo que no debe presentar dudas es, en primer lugar, el rechazo de la adivinación por parte de la moral católica. Viene de antiguo. Ya en uno de los primeros libros del Antiguo Testamento, el Levítico, se puede leer lo siguiente: "Y si alguien acude a hechiceros o adivinos y se prostituye con ellos, volveré contra él mi rostro y lo extirparé de en medio de mi pueblo" (20, 6). Es cierto que en la predicación de Jesucristo recogida en los Evangelios no hay alusiones al tema, pero hay que buscar el motivo de ello en el hecho de que los judíos de la época habían cuidado de que apenas hubiera adivinos en Israel.

El contacto del cristianismo primitivo con la sociedad pagana cambió las cosas. Sirva como botón de muestra el siguiente texto, del siglo III y referido al catecumenado: "El encantador, el astrólogo, el adivino, el intérprete de sueños, el charlatán, el falsario, el fabricante de amuletos, desistan o sean despedidos" (Tradición Apostólica, 16). Desde entonces se ha mantenido el criterio, hasta el reciente Catecismo de la Iglesia Católica, al señalar que "todas las formas de adivinación deben rechazarse" (n. 2116).

¿Cuál es el motivo? A primera vista, la inmoralidad parece estar del lado del adivino, bien sea por el recurso al diablo, o bien por ser consciente de que lo que hace es un montaje fraudulento. Pero, ¿qué hace de malo el cliente, que no suele ser consciente de lo uno ni de lo otro, y que acude de buena fe (si no, no pagaría)? Hay que responder que, objetivamente, la misma pretensión de adivinación es inmoral; atenta contra Dios, de una manera u otra. Si, explícitamente o no, se sostiene que el destino depende de fuerzas ocultas, se está negando con ello nada menos que la providencia de Dios. Si lo que se busca es alguien con especiales poderes para ver el futuro, se está usurpando algo que a Dios sólo corresponde (y a quienes, derivadamente, hablan de su parte, lo que no sucede aquí).

Y, si lo que se busca es una especie de santón con don de profecía, hay que recordar que el único mediador válido entre Dios y los hombres es Jesucristo, y participan de su mediación los sacerdotes; el cristiano no debe acudir a otra mediación, y menos aún cuando puede conllevar riesgos de intervenciones diabólicas. En resumidas cuentas, como señala el Catecismo de la Iglesia Católica, todas estas prácticas "encierran una voluntad de poder sobre el tiempo, la historia y, finalmente, los hombres, a la vez que un deseo de granjearse la protección de poderes ocultos. Están en contradicción con el honor y el respeto, mezclados de temor amoroso, que debemos solamente a Dios" (n. 2116).

Subjetivamente, lo que suele haber entre la clientela de los adivinos es un temor a la incertidumbre del futuro, y un desmedido afán de seguridad. Es, aunque no lo parezca a primera vista, una consecuencia de la mentalidad materialista. Por una parte, cuando todo el horizonte vital no va más allá de este mundo, y por tanto todo el corazón está puesto en él, surge un miedo visceral de perderlo y un temor ante un futuro que se presenta como incierto. Por otra parte, si desaparece del alma la consideración de la providencia divina, queda el puro azar, y nadie se siente tranquilo con la consideración de que su futuro y su vida entera están sujetos a los vaivenes de una pura casualidad, por lo que crece el ansia de subsanar ese conocimiento como sea.

Lo que enseña el Evangelio es algo muy distinto. Aquí se perfila la voluntad de Dios que quiere, en primer lugar, que los hombres vivan con una cierta incertidumbre para que tengan siempre presente su destino eterno; se manifiesta, por ejemplo, en el imperativo "velad, ya que no sabéis el día ni la hora" (Mt 24, 42). Y, junto con ello, el Señor hace repetidos llamamientos a que los hijos de Dios deben confiar en la providencia divina, que es una providencia amorosa de un Padre que cuida a sus hijos mucho más que a los lirios de campo y las aves del cielo (cfr., p.ej., Mt 6, 25-34).

Autor: Julio de la Vega-Hazas