GARABANDAL

¡AVE MARÍA PURÍSIMA SIN PECADO CONCEBIDA!

La Santísima Virgen María, la llena de Gracia, la Inmaculada, se presenta a nosotros como Madre Nuestra, Madre de Misericordia y de Amor, Ella bajo su manto desea abrigarnos y de su mano llevarnos a Jesús Nuestro Señor. Nuestra Madre Santísima, el tabernáculo de la nueva alianza nos trajo a su Divino Hijo Jesús, para que tengamos Vida y Vida en abundancia. Por eso nos hace un llamado a la Conversión y a la Santidad, en cada una de sus Apariciones. Sin conversión no hay salvación... Si no buscamos la Santidad no estamos siguiendo a Cristo Jesús y NO estamos acogiendo el mensaje de Nuestra Madre. Escuchémosla y pongamos en práctica su mensaje.

DEBEMOS DE HACER MUCHOS SACRIFICIOS Y PENITENCIAS, VISITAR EL SANTÍSIMO PERO ANTES DEBEMOS SER MUY BUENOS.

El primer Sacrificio que debemos hacer es RENUNCIAR AL PECADO, todo lo que sea pecado ofende a Dios y nos aparta de su gracia, NO hay pecados que se justifican toda justificación viene del Demonio que quiere cegarnos y alejarnos del Amor de Dios y del cielo.

Mateo 5,30 nos dice, "Y si tu mano derecha te es ocasión de pecar, córtala y échala de ti; porque te es mejor que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo vaya al infierno."

Así cada uno de nosotros debe de analizar que es ocasión de pecado en su vida y cortar con eso, ofreciendo así su vida a Cristo Jesús como lo explica la carta a los Romanos 12,1

"Les ruego, pues, hermanos, por la gran ternura de Dios, que le ofrezcan su propia persona como un sacrificio vivo y santo capaz de agradarle; este culto conviene a criaturas que tienen juicio."

Nuestra Madre nos exhorta a Visitar MUCHO el Santísimo pero dice Nuestra Madre ANTES DEBEMOS SER MUY BUENOS.

Por qué nos dice esto... porque en el Santísimo Sacramento nos encontramos con el Amado, con el Amor de los Amores, es la misma Santísima Trinidad que está ahí, el único Dios Verdadero que nos espera como el Padre del Hijo pródigo para derramar su Amor y sus bendiciones en cada uno de nosotros. Lo que pasa es que esas bendiciones sólo las podemos acoger en nuestras almas si estamos en Gracia, ya que Dios constantemente las derrama sobre sus hijos, pero cuando nosotros escogemos el pecado, el mundo, los placeres de la carne y el demonio por sobre Dios, Nosotros mismos rompemos la amistad con Dios, cerramos nuestro corazón a Él, como una tortuga que se esconde en su caparazón y aunque Dios en su bondad infinita derrame constantemente sus bendiciones éstas No son acogidas en nuestras almas, o como me dijo un sacerdote una vez, es ponerse un impermeable que aunque llueva bendiciones salimos como entramos sequititos por nuestra voluntad... Nos lo dice el mismo Jesús en el Evangelio según San Mateo 16,24-29

"Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz y sígame. Y ahora, para que el hombre tome su cruz, debe abstenerse de toda impiedad, y de todo deseo mundano y guardar mis mandamientos. No quebrantéis mis mandamientos a fin de salvar vuestras vidas; porque todo el que quiera salvar su vida en este mundo, la perderá en el mundo venidero.Y todo el que pierda su vida en este mundo, por causa de mí, la hallará en el mundo venidero.Por tanto, renunciad al mundo, y salvad vuestras almas; porque, ¿qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo y perdiere su alma? O, ¿qué recompensa dará el hombre por su alma?"

NUESTRA MADRE NOS ADVIERTE QUE QUE SI NO LO HACEMOS VENDRÁ UN CASTIGO MUY GRANDE, YA LA COPA SE ESTÁ LLENANDO Y SI NO CAMBIAMOS VENDRÁ UN CASTIGO MUY GRANDE

Son muchas las personas que hablan del castigo sin embargo no se sabe realmente si va a ocurrir o no, ya que es condicional, tampoco sabemos en qué podría consistir... si lloverá fuego del cielo... Pero Yo me pregunto ¿no es acaso, que el alma viva en el infierno los más grandes tormentos por toda la eternidad el peor de los castigos para un ser humano...? ¿Por qué nos preocupamos tanto por aquello que puede matar el cuerpo pero desatendemos lo que puede acabar con el Alma para siempre? Y es que el Castigo es condicional PERO el juicio personal que viviremos ante Dios cuando muramos va a ocurrir... Todos tendremos nuestro juicio personal TODOS sin excepción y ya ahí no podremos cambiar NADA, serán nuestras OBRAS las que nos salvarán o nos condenaran, sólo nuestra obras vistas desde la Justicia Divina, ya que Dios es Misericordia Infinita y Justicia Perfecta.

Escuchemos hoy la voz del Señor, Acojamos el mensaje de Nuestra Madre Santísima, no endurezcamos el corazón.

Laura Oviedo