Se roció agua bendita en todo el lugar.
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues sólo un Dios se recrea…
El Ángel Rosa del Corazón del Santísimo hizo la señal de su presencia.
HNO. JOSÉ: Gracias Rosa del Corazón del Santísimo por tu presencia, bendita seas.
SOY EL ÁNGEL DE LA PAZ:
El Ángel Rosa del Corazón del Santísimo hizo la señal de su presencia.
HNO. JOSÉ: Bienvenido seas.
ANGEL DE LA PAZ: Vine antes de la Madre de Dios, en Fátima… ojalá conocieran bien la historia, muchos de ustedes no la saben, vine con el Sagrado Cuerpo y Sangre del Señor Jesús y di la comunión a los niños en Fátima, enseñé a los niños oraciones Reparadoras, repitan esa oración ahora:
¡Dios mío, yo creo, adoro, espero y te amo, y te pido perdón por los que no creen, no adoran, no esperan y no te aman! (Repetimos tres veces).
Conozcan ésa oración… les enseñé hacerla con la frente en el piso, porque a Dios se le alaba así y se repara así, con un corazón humillado, con un corazón inocente, con un corazón dispuesto a hacer su voluntad, aquellos pequeños hicieron y aprendieron en su inocencia y en su pequeñez, ellos con su Sí a María recibieron el Espíritu Santo de Dios y entonces fueron los grandes instrumentos del Cielo también aquí en la tierra con una vida sencilla, con una vida amorosa entregada a la voluntad de Dios, sacrificándolo todo, ofreciéndolo todo, especialmente sus sufrimientos por la Conversión de los pobres pecadores… ¿Quién de ustedes puede decir yo no peco? ¿Quién puede decir yo no he ofendido a mi Dios? entonces ustedes como se les ha dicho muchas veces han de seguir siendo ALMAS REPARADORAS, confiadas amorosamente en el Corazón dulce del Padre Celestial, se me ha permitido venir para que ustedes conozcan ésas oraciones y conozcan la historia…
HNO. JOSÉ: Muchas gracias por tu presencia.
ANGEL DE LA PAZ: Las gracias sólo al Padre y la Madre que ha sido quien lo ha concedido hoy.
NUESTRA MADRE SANTÍSIMA: La Paz esté con ustedes
TODOS: Y con tu Espíritu
NUESTRA MADRE SANTÍSIMA: Buenas noches queridos hijitos…
HNO. JOSÉ: Bienvenida seas Madre Santa, gracias por tu presencia, gracias por enviarnos a tu Ángel de la Paz.
NUESTRA MADRE SANTÍSIMA: Hijitos míos cierren sus ojos… desconéctese del mundo, muchos aquí no me han conocido en su niñez, en su adolescencia y en su adultez, pero les aseguro que Yo los Amo, los tengo en Mi Corazón… y si han venido a buscar la sanación, la van a encontrar, porque le pediré a Mi Hijo querido que ustedes salgan de aquí sanos y salvos, por sus oraciones, por su corazón… cierren sus ojos, manténganse en Paz, respiren profundamente…
El instrumento en donde estaba Nuestra madre Santísima se levantó y nos bendijo a cada uno con agua bendita.
El que cree en Dios Padre Todopoderoso y en Mi Hijo, tengan la seguridad que por Él serán sanados, están a salvos queridos hijitos, manténganse en oración muy fuerte… muy fuerte desde hoy hasta el día 14, se los pido con todo Mi Corazón
HNO. JOSÉ: El Señor esté con nosotros
TODOS: Y con tu Espíritu.
HNO. JOSÉ: La bendición de Dios Padre, de Dios Hijo y de Dios Espíritu Santo esté con ustedes
TODOS: Amén
HNO. JOSÉ: Podemos ir en Paz.
TODOS: Demos gracias a Dios y a nuestra Madre Santísima.
Un aplauso para la Santísima Trinidad, a nuestra Madre Santísima y a nuestros Ángeles.
Grupo Católico de Oración por los Enfermos – Si Señor
José Miguel Pajares Clausen
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