En junio del año pasado escribió que no había
recibido ninguna queja sobre él
El cardenal
Donald Wuerl ha asegurado a los sacerdotes de Washington que manejó
adecuadamente una acusación de mala conducta en 2004 contra el arzobispo
Theodore McCarrick. También dice que cuando negó conocer la inmoralidad de
McCarrick, se refería solo al abuso sexual de menores. Lo cierto es que negó
conocer cualquier tipo de comportamiento inmoral del ex-cardenal.
(Catholic Herald/InfoCatólica) En una carta del 12 de enero a
los sacerdotes de la archidiócesis de la que sigue siendo administrador
apostólico, el cardenal Wuerl explica que en 2004 recibió una queja por la «conducta
inapropiada» de McCarrick de un ex sacerdote que informaba
principalmente sobre otros incidentes de abuso sexual, uno relacionado con un
sacerdote de Pittsburgh. Wuerl era en ese momento el obispo de Pittsburgh.
«El informe completo se entregó inmediatamente
al Nuncio Apostólico, el Representante Papal en los Estados Unidos.
Habiendo actuado de manera responsable con la acusación relacionada con el
comportamiento del obispo McCarrick con un adulto y sin escuchar nada más sobre
el tema, no volví al asunto», dijo Wuerl., quien añade que «el hombre
pidió confidencialidad para proteger su propio nombre».
El 20 de junio de 2018, la Archdiócesis
de Nueva York anunció que había considerado creíble una acusación de abuso
sexual de un menor contra McCarrick, quien se desempeñó como sacerdote de Nueva
York en la década de 1970. Los informes de los medios posteriormente revelaron
denuncias de que McCarrick había
abusado sexualmente en serie de al menos dos muchachos adolescentes, y
que había participado en conducta sexual coercitiva con sacerdotes y
seminaristas durante décadas.
DIJO NO SABER DE
NINGUNA RECLAMACIÓN CONTRA MCCARRICK
Wuerl escribió en una carta
del 21 de junio a su diócesis que estaba
«conmocionado y entristecido» por las
denuncias contra McCarrick, su predecesor como Arzobispo de Washington.
En la misma carta, Wuerl afirmó que «no
se ha hecho ninguna reclamación, creíble o de otro tipo, contra el cardenal
McCarrick durante su estadía aquí en Washington».
En julio, Wuerl aseguró al Washington Post que nunca había
escuchado rumores de conducta sexual inapropiada con respecto a
McCarrick. En agosto, le dijo a CBS News que no estaba al tanto de los rumores
de que McCarrick tenía relaciones con otros sacerdotes.
Sin embargo, en la carta de
Wuerl del 12 de enero dice que sus comentarios solo se referían a rumores sobre
el abuso sexual de menores.
«Cuando se
presentó la acusación de abuso sexual de un menor contra el arzobispo
McCarrick, declaré públicamente que
nunca tuve conocimiento de ninguna de esas acusaciones o rumores. Esta
afirmación fue en el contexto de los cargos de abuso sexual de menores,
que en ese momento era el foco de discusión y la atención de los medios».
«Si bien uno
puede interpretar mi declaración en un contexto diferente, la discusión y la
adjudicación del comportamiento del Arzobispo McCarrick se refieren a su abuso
de menores», insiste
Wuerl.
Wuerl recibió la queja de 2004
de Robert Ciolek, un sacerdote laicado de la Diócesis de Metuchen, donde
McCarrick fue obispo desde 1981 hasta 1986.
El pasado 10 de enero, la Diócesis de
Pittsburgh confirmó que Ciolek apareció en noviembre de 2004
ante su junta de revisión diocesana para discutir la acusación de abuso que
Ciolek había cometido contra un sacerdote de Pittsburgh.
La revelación fue la primera confirmación por parte de las autoridades
de la Iglesia de que Wuerl estaba al tanto de las acusaciones contra McCarrick
antes de que la Archidiócesis de Nueva York anunciara en junio de 2018 una
acusación creíble de abuso sexual de un menor contra McCarrick.
El 10 de enero, Ciolek le dijo
al Washington Post que Wuerl podría haber reconocido el informe en contra de
McCarrick, sin necesidad de incumplir con su solicitud inicial de
confidencialidad.
«Wuerl, en el peor de los casos podría haber dicho:
'Soy consciente, pero no puedo nombrar a esa persona'», dijo Ciolek.
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