«El Sínodo es un signo de Dios, una obediencia para que la Iglesia mire
a la familia»: éstas son las palabras del Papa Francisco sobre el Sínodo,
referidas en rueda de prensa por el cardenal Schonborn. El trabajo de los círculos
menores ha terminado, y nos aproximamos a la recta final de esta etapa
sinodal
Especiales web (16-X-2014)
«Debemos ver el papel positivo de la familia», afirmó el cardenal
Schonborn en rueda de prensa la final del trabajo de los círculos menores,
para luego referir las palabras del Papa Francisco a los padres sinodales: «El
Papa nos ha invitado a centrarnos no sólo en lo que no funciona, sino a mostrar
la belleza y la necesidad vital de la familia. Se trata de ver cómo va la
familia, donde está su belleza y dónde sus desafíos» El cardenal arzobispo de
Viena ha contado las confesiones del Santo Padre a los padres sinodales: «El
Papa también nos ha dicho que piensa que este alargamiento del tema de la
familia, que se va a realizar en dos Sínodos, para él es un signo de Dios, una
obediencia para intentar mirar a la familia. El Papa nos ha llamado a una
conversión pastoral, nos invita a hacer misión» en este campo.
Terminado el trabajo de los círculos menores en base a la Relatio
post disceptacionen, el Sínodo se dirige ahora hacia la aprobación del Mensaje
al pueblo de Dios y de la Relatio Synodi final, prevista para el sábado
por la tarde. En relación a este trabajo, el padre Lombardi, Director de la
Oficina de Prensa de la Santa Sede, ha hecho llegar las palabras del cardenal
Müller, por las que niega las declaraciones que se le han atribuido definiendo
la Relatio post disceptacionen como vergonzosa.
En este sentido, el cardenal Schonborn ha declarado que «las tensiones
en el Sínodo son normales; todos tenemos clara la doctrina y el Evangelio, y la
actitud misericordiosa de Jesús: unir estas dos cosas es el desafío permanente
de la Iglesia; se trata de encontrar el equilibrio. No hay que ver diferentes partidos
en la Iglesia; somos una gran familia».
Por otra parte, el cardenal arzobispo de Viena ha reconocido sentirse
«impresionado por el interés que ha suscitado este Sínodo. Hay pocos temas que
nos tocan tanto a cada uno de nosotros: todos tenemos un padre y una madre,
hermanos, tíos abuelos... La familia es una red de supervivencia en los
momentos difíciles de la vida, como nos han contado los obispos españoles, al
decir que la familia está salvando situaciones del 50% de paro. El Sínodo
muestra esta realidad elemental, más allá de la cuestión religiosa. La Iglesia
siempre ha estado atenta a la realidad de la familia».
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