domingo, 27 de septiembre de 2009

¿EXISTEN LOS VAMPIROS?


¿Existen los Vampiros? Curiosa pregunta que, estoy seguro, casi todos nos la hemos formulado en alguna ocasión.

Lo cierto es que tenemos una idea de cómo es un Vampiro muy mediatizada a través del cine y la televisión; pero, muy posiblemente, la realidad, como en casi todo, sea muy distinta. Lo cierto es que en los últimos años hemos asistido a una invasión de los no-muertos a través de la pequeña y la gran pantalla, mostrándonos distintos tipos de vampiros.

Es bien sabido que el Cine y la TV saben mover, con ingeniosa capacidad de alteración, la realidad para hacernos caminar a su son; al son que tocan los Grandes Poderes Ocultos. ¿Por qué últimamente nos meten a los Vampiros hasta en la sopa? ¿Qué nos quieren decir? ¿Qué ocultan?

Fue una adolescente la que me puso sobre la pista cuando estábamos viendo la célebre serie televisiva Moonlight. ¿Serán así, realmente los vampiros? ¿Podrán ver el sol? ¿Les afectará la plata? ¿Están entre nosotros? ¿Tienen ese magnetismo especial que se les atribuye? Varias preguntas que me costaba responder porque mientras se formulaban, pensaba en otros mitos de No-Muertos o, mejor dicho, de otros seres no humanos que conviven con nosotros.

Lo cierto es que el Mito del Vampiro no está claro en cuanto origen, aunque su leyenda se pierde en la noche de los tiempos. Seres mitad humanos mitad monstruos (¿monstruos?) Seres que viven de la sangre de otros. Seres con apariencia humana y fuerza sobrenatural. Seres con poderes psíquicos, mentales, físicos extraordinarios... Seres inmortales. ¿A quien corresponde este arquetipo? Los especialistas lo han debatido abiertamente y no han conseguido aclarar gran cosa. Y ahora mismo, en pleno siglo XXI, las gigantescas máquinas propagandistas del Cine y la Televisión nos muestran, curiosamente, unos modelos diferentes del clásico Vampiro Nosferatu, Conde Drácula e incluso de los monstruosos seres de Abierto hasta el amanecer (magnifica película de vampiros que, sin embargo, sólo busca despistarnos.

Sin embargo, como casi todo en el Esoterismo puro, las cosas son más sencillas y las respuestas están a nuestro alcance, a nuestra vista, sólo que camufladas.

Hablamos de seres humanoides, inmortales, anteriores a nosotros, una raza diferente que comparte nuestro Plano, que se alimenta (principalmente) de sangre, con poderes extraordinarios sensitivos y emocionales... ¿A quién se nos parece esta imagen? Para nosotros es claro: a los ángeles, concretamente a los Ángeles Caídos (tomamos el término ángel como un genérico de Seres Celestes) Los ángeles son humanoides (hechos a imagen y semejanza de Dios, como nosotros) sólo que con una esencia distinta, más elevada. Son inmortales (como nosotros, aunque hemos perdido este don a través del pecado del orgullo) Son anteriores a nosotros y forman una Especie, una Raza distinta, pero cohabitan con nosotros en este Plano. Se alimentan de nosotros, de nuestra sangre; es decir, de nuestra esencia espiritual (porque sólo el Alma es inmortal, el cuerpo y el espíritu son mortales, finitos y entran dentro de la "cadena alimenticia natural"). Y además, siempre se han sentido atraídos por la Raza Humana, de hecho, en el Principio de los tiempos humanos (podríamos decir en el principio de lo que ahora consideramos humano, porque ellos crearon a nuestra especie) ellos bajaron desde los Cielos (el Plano Celeste) y se unieron a nuestras hembras y machos, creando una nueva especie: los Nephilim; es decir, somos hijos de los Ángeles Caídos y de las hembras-machos anteriores al Eslabón Perdido.

Con esta perspectiva diferente se pueden explicar muchas cosas. Los Vampiros serían los propios Ángeles Caídos (demonios) que lejos de lo que se cree habitualmente y de las imágenes que algunos se empeñan en mostrar, no son seres feos, deformes, con aspecto monstruoso, serpentino; todo lo contrario, este aspecto serpentino (o de dragón) se refiere a su característica esencial: la Sabiduría, el Conocimiento. No son seres con cuernos ni rabo, no son rojos ni con grandes falos escamosos, no son mitad carnero mitad humano. No. Son seres bellos, porque aún caídos a este Plano, no han perdido su esencia angelical, su belleza innata (imagen de Dios mismo) no han perdido sus poderes o virtudes. Son, realmente, como nosotros pero más bellos; y más elevados.

¿Por qué ahora los Vampiros están de moda? Nada se produce en el Universo sin una causa. Y en este caso, la razón es bastante más obvia de lo que parece.

Si aceptamos que los Vampiros son, en realidad, Seres Celestes Caídos, y éstos están siempre entre nosotros invitándonos a pecar (¿de verdad podemos aceptar esta idea?) no nos resultará difícil aceptar que estemos rodeados de vampiros y que éstos, tal y como el Cine moderno nos hace pensar, estén moviendo los hilos de la realidad y que nos tomen como su ganado para alimentarse; aunque aún se mantienen en la sombra.

¿Fantasioso? Posiblemente sí. Pero permitidme avanzar en esta idea.

El mundo está satanizado. No es que pertenezca a Satanás, jefe absoluto de las fuerzas celestes caídas (Satanás no es Lucifer) o sea, el Diablo, porque el Mundo Físico, como el resto de los Planos o Universos pertenece exclusivamente al Creador. Pero en este Plano Físico los demonios-vampiros, tienen una misión especialmente inducida por el Creador: mantener la Oscuridad para que nos sirva de prueba, de Camino de Iniciación hacia la Luz. Lo que está sucediendo no es que los demonios, que Satán haya adquirido más fuerza astral, sino que somos nosotros, los humanos, los que les hemos invitado a entrar en nuestras vidas, los que con nuestro comportamiento Orgulloso, les alimentamos, porque constantemente y de forma general, alimentamos a las Tinieblas, a la Oscuridad, a la Maldad (por cierto, este aspecto es absolutamente humano, moral, físico; y no astral-celeste)

Los ángeles caídos-vampiros tienen como aspecto un Cuerpo Glorioso. Esto no significa que sean como el humo, o como un ectoplasma, porque lo mismo pueden adaptar una imagen humanoide como otra forma desconocida para nuestros sentidos. Por eso los Vampiros se presentan como cuerpos humanos; pero al mismo tiempo, pueden adoptar otras formas (y son varias) Así mismo, como Seres Celestes, tienen "poderes" sobrenaturales: telepatía, fuerza sobrehumana, hiperapidez, y ansia de sangre... Qué importante es esto último.

La idea de que se alimenten de la sangre de los humanos es la clave principal para entender esta hipótesis. Porque en la sangre se encuentra el espíritu (no el Alma, que es transcendente) y porque en la sangre se encuentra (es) la esencia de la persona. Al alimentarse con nuestra sangre, estamos diciendo que se alimentan de nuestra esencia, de nuestro Caminar hacia la Luz; es decir, nos ganan para aumentar el Mundo de las Tinieblas.

Cuando expresamos que tras mordernos nos transforman en sus esclavos, en nuevos vampiros, en realidad estamos diciendo otra cosa. Y es curioso que los modernos vampiros (los del cine y la tele) no transformen a los humanos tal y como hacía el Conde Drácula o Nosferatu, que era de forma instantánea, sino que lo puedan hacer a voluntad, y en fases, y con tiempo... O sea, en forma de Camino Iniciático hacia la Oscuridad.

En un mundo satanizado como el nuestro, donde el gran amo de la Banca, la Industria, las Corporaciones y Lobbys, los traficantes de armas, medicinas y drogas, los políticos, los cientifistas, etc., es Satanás, parece posible que use a sus hermanos para, como los Vampiros, dominarnos y esclavizarnos en la Oscuridad. Por cierto, ¿no será por esto, por la Oscuridad, por lo que el mito del vampiro indique que no pueden ver la luz del Sol?

¿Existen los Vampiros? La Razón nos indicará que no. Pero los que conocemos el mundo de los demonios sabemos que éstos sí existen, sí están entre nosotros, sí nos afectan... Y sí nos chupan la sangre... Pero como decía el Maestro de Maestros: la verdad está en ti.
Publicado por: Francisco Sánchez Caballero

2 comentarios:

Anónimo dijo...

bueno la verdad las q las hay las hay , y yo creo en los vampiros ..

Hermano José dijo...

GRACIAS POR TU COMENTARIO
BENDICIONES POR CASA