viernes, 25 de septiembre de 2009

EL MISTERIO DEL CALENDARIO MAYA: AÑO 2012


El asunto del Calendario Maya está de moda por diversas razones.

Para unos anuncia terribles sucesos que acontecerían en el año 2012. Para otros es una suerte de biblioteca espiritual-emocional en la que confían para casi todo. Pero detrás de este fenómeno hay muchas más cosas; y no todas están a la vista.

Es cierto, y no se puede obviar, que la civilización Maya anuncia un posible Apocalipsis para el año 2012. Pero no hay acuerdo generalizado, porque mientras unos defienden que será una serie de hecatombes físicas que sacudirán al Planeta hasta su casi destrucción. Para otros se tratará de un Apocalipsis de nuestra civilización humana. Incluso los hay que defienden que no tiene porque haber muertes sino que será una transformación (evolución) espiritual.

Lo más probable es que sea un compendio de todo ello.

Para entender el Calendario Maya primero debemos entender a su civilización. Aunque los libros "oficiales" de historia nos dicen que es una civilización desaparecida tras la llegada de los españoles a tierras americanas, quienes les diezmaron, no es cierta esta afirmación (como tantas otras de la arqueología, una ciencia elitista, cínica y soberbia) porque la civilización está bien viva, encarnada en docenas de ancianos y ancianas mayas que la mantienen con buena salud, guardando sus secretos, aunque ocultos del hombre occidental y occidentalizado.
De hecho, estos ancianos salvaguardan el Gran Secreto, porque ya se sabe: el gato escaldado del agua fría huye; y los mayas asintieron a su destrucción por manos españolas tanto de sus gentes, como su cultura; de hecho, los conquistadores destruyeron la mayor parte de los códices que contenían el saber maya, miles de ellos... Pero no todos, y algunos se escondieron en grutas milenarias que, por cierto, algunas de ellas aún son habitadas por ancianos mayas herederos de la auténtica tradición. El Calendario Maya no es tal. La realidad es que los Mayas tenían, al menos, que se conozca, hasta 20 calendarios, todos ellos importantes.
La mayoría de los datos se perdieron en manos de los soldados españoles, pero algunos se salvaron de manera que han permanecido ocultos a los ojos de todo el mundo, excepto de los iniciados; y éstos se han cuidado mucho de mostrar todos sus secretos, más bien nos han enseñado sólo aquello que han deseado que conociéramos; quizá lo más folclórico, pero no lo importante... El Secreto.

Ahondemos en el asunto. La civilización maya es una paradoja. Capaz de escudriñar los cielos y trazar estudios complejos sobre los movimientos cósmicos, no fueron capaces de conocer la rueda (por lo que para la Arqueología es una civilización retrasada culturalmente) No sirve lo que dicen algunos chamanes defendiendo que en la jungla no era necesario este medio de movimiento, ya que sus megalíticas construcciones se tuvieron que hacer a pulso, músculo y sangre de los innumerables esclavos.

Todo la civilización Maya y por supuesto sus Calendarios, están basados hasta la neurosis en las estrellas, en el cielo. Con ello buscaban encontrar las respuestas humanas viendo el reflejo de las luminarias celestes (lo que es arriba es abajo, nos suena al gran Hermes; o lo que atarais en la tierra será atado en el cielo, en su apreciación cristiana de Cristo). Sus gigantescos monumentos, sus pirámides escalonadas no eran sino observatorios astronómicos (lo de los sacrificios fue muy posterior) Y el sacerdote-astrólogo era quien detentaba el poder; simplemente porque toda su cultura, su sociedad, su política, su economía se basaba en la apreciación de los cielos.

Pero lo que llama poderosamente la atención es que los mayas no sabían casi nada de matemáticas, ni de astronomía, porque no conocían el telescopio, por lo que sus apreciaciones sobre fenómenos cíclicos como Procesión, Excentricidad y Oblicuidad nos resulta extraño. Los mayas llevan defendiendo desde siempre un fenómeno que ocurrirá precisamente en 2012: que el Sistema Solar, con el Sol en su centro eclipsará la visión del centro de la Galaxia para la Tierra. Para ellos esto significa que la energía primaria que emana precisamente de ese punto central (que para los Astrónomos es igualmente importante porque estiman que allí se ubica un Agujero Negro que es el que da vida a la Galaxia) será eclipsada durante un tiempo, por lo que el maná galáctico, la energía sagrada que nos mueve y da vida, sufrirá un bloqueo... Y eso será una consecuencia nefanda para los terrícolas.

Es más. Los mayas sabían desde cientos de años antes que el año 1519 los Viajeros del Mar invadirían sus tierras y su civilización sería reducida al olvido. ¿Cómo lo sabían? ¿Quién les advirtió? Como sabían el resultado de la llegada española, tuvieron tiempo para prepararse y salvaguardaron lo que creyeron que no debía caer en manos enemigas o destruido por el fuego. La jugada les salió redonda. El orgullo del Imperio español consiguió, sin saberlo, esconder aún más el Secreto Maya (el autentico) Ocurrió que tras la quema de la mayoría de los códices originales, la Corona española ordenó al padre Diego de Landa, supervisor de la quema acontecida, que escribiera un compendio de la cultura maya. Éste sacerdote regresó a lo que hoy es Guatemala (la civilización maya ocupó partes importantes de México, Guatemala, Belice, El Salvador y Honduras) y escribió Relación de las cosas de Yucatán. Y este tratado, lleno de distorsiones católicas sobre la realidad socio-cultural maya, pasó a ser la base de todos los estudios occidentales sobre las costumbres y creencias de estas buenas gentes. Con ello, los mayas consiguieron que nadie se preguntara por la verdad, por sus secretos, por su Secreto.

Todo en el/los Calendario/s Maya son números astronómicos, extraordinariamente precisos. ¿Cómo pudieron elaborarlo si no conocían la Matemática ni la Númera?; al menos no a ese nivel.

La respuesta la encontramos en lo que los arqueólogos desconocen o dicen desconocer: la espiritualidad maya.

Nota: Esto que está circulando por Internet no se puede tomar como algo que realmente va a suceder, eso nos pondría al nivel de los evangélicos que cada cierto tiempo anuncian el fin del mundo y no pasa nada. Inclusive, algunos católicos asocian este acontecimiento con "Los Tres Días de Oscuridad", predicción de la Virgen María en sus apariciones.
Nuestra existencia está en manos de Dios y sólo Él sabe cuando esto sucederá.
Nuestra Apocalipsis particular puede suceder cualquier día. Todos los días hay gente que nace y otros que mueren, lo importante es estar preparados porque todos algún día vamos a morir… es la ley de la naturaleza… todo lo que nace muere.
¿Quieres vivir eternamente?… Muere en gracia de Dios. Ama a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo y ya estás en el cielo… vivirás eternamente… tan simple como lo lees. ¿Cuesta mucho hacerlo?
José Miguel Pajares Clausen

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