Hoy nos conducimos como paganos, adorando ídolos que son máscaras del mismo satanás.
Por: P. Antonio Rivero | Fuente: Catholic.net
Estos dioses -que son múltiples como Dios es
uno- cambian frecuentemente de cara y de lenguaje, se procrean e inventan
nuevos engaños. Son máscaras de satanás, quien tiene la propiedad de
mimetizarse y transformase como la mentira, ya que no está sujeto al "si, sí, no, no" de la verdad, que es
una sola y no se disfraza.
I. EL DIOS PROGRESO
Por ello los laicos, con su competencia en los
asuntos profanos y con su actividad elevada desde dentro por la gracia de
Cristo, contribuyan eficazmente a que los bienes creados, de acuerdo con el
designio del Creador y la iluminación de su verbo, sean promovidos, mediante el
trabajo humano, la técnica y la cultura civil, para utilidad de todos los
hombres sin excepción (Lumen Gentium, 36).
Su credo es éste: "Caminamos
en un progreso indefinido que no se detendrá. Ha habido guerras, genocidios y
tragedias espantosas. Pero estamos progresando. Todo lo que es progreso es
bueno, aunque esto suponga sacrificar el presente en aras de un futuro
incierto. El progreso debe ser adorado.
Sin embargo, los remozones producidos por Hiroshima, Chernobil, la guerra
química, el auge del ecologismo, la situación de miseria o de injusticia a que
están sometidas grandes masas de población, la violencia siempre constante en
algún lugar del mundo... han sacudido
fuertemente las columnas del Progreso, llevando a veces desconfianza al mismo
Progreso y sus promesas, y poniendo en disputa sus mismas bases filosóficas. ¿Y los pueblos enteros que sufren hambre y miseria por
causa de la guerra, la corrupción, el colonialismo, la usura internacional? ¿Y
los que no tienen acceso a la cultura, al confort, a la tecnología? Pueblos
enteros sometidos a la esclavitud económica, social, política,
psicológica... manipulados por los ideólogos, por los tecnócratas, por la usura
internacional.
POR TANTO, CRITICAMOS A ESTE ÍDOLO LO SIGUIENTE:
1. Los avances que lanza este progreso no
siempre están de acuerdo con la ética y la moral, quedan desvinculados de ella.
A este ídolo le interesa la ganancia, que llega a ser la prueba contundente de
su bondad y acierto. Hace de esa ganancia ley, llegando, así, lo legal (derecho
positivo) a ser lo justo (derecho natural). Una vez más, no sabe o no quiere
distinguir entre derecho natural y derecho positivo. Se preocupa de la
efectividad, no de la moralidad. Detrás de esta posición se esconde el influjo
de Kant (1724-1804) que decía: el mérito proviene
del deber y no del bien. Y este deber deriva de la decisión común a
todos los hombres. Y si la decisión común dice que hay que esterilizar,
estimular los experimentos in vitro que nos darán un día humanoides fríos (terrorismo
de laboratorio enguantado y silencioso) , criados sin necesidad de madres,
emplear la anticoncepción y el aborto para detener el crecimiento demográfico
(que crece de modo geométrico, mientras que los alimentos crecen
aritméticamente -a decir de Malthus-), legalizar la eutanasia... entonces es
bueno eso. Pero aquí la bien no nace de la verdad y la verdad no surge de la
realidad. El bien para este dios depende del futuro, del proyecto del futuro, a
donde él nos conduce.
2. Este progreso tiene poder para romper toda
barrera; le da a la técnica y a la experimentación un cheque en blanco para
someter incluso la intimidad del hombre. El dios Progreso llama progreso a toda
costumbre nueva, por más desvergonzada que sea. Por eso, los países musulmanes
desprecian tanto a Occidente.
3. La disidencia para este dios es un pecado
gravísimo. En la URSS significaba la muerte o la cárcel. En Occidente significa
la muerte civil, se excluye al sujeto de la sociedad, no se lo deja hablar ni
se le oye, se le juzga sin ecuanimidad, y se le condena no por lo que hace,
sino por lo que piensa y por lo que él mismo es. Si es un político, se le
cierran todos los medios de comunicación. Si es un docente, se le persigue por
no estar al día en las novedades pedagógicas. Si es un dirigente social, se lo
condena por ser moralista y no ser práctico. Si es un promotor de la fe, se lo
margina por estar fuera de tiempo.
4. Ese dios no ha podido quebrar esa búsqueda de
sobrenaturalidad insaciable del alma humana. Dios está de moda siempre. Pero
este dios progreso intenta confundir a la gente, proporcionándoles dioses en
lugar de Dios, religiosidades en lugar de religión, sectas en lugar de
Iglesias, opiniones en lugar de fe, mundalismo en lugar de unidad, consuelos en
lugar de justicia y auténtica paz; fantasmas y reencarnaciones en lugar de
Cristo, encarnado en el seno de María. Anécdota de la muerte de Malenkov, aquel
jerarca soviético de la posguerra. Lo estaban velando, en presencia de altos
jerarcas que venían a brindarle su homenaje. En ese momento, delante de todos,
para despedirse, se acercó la viuda al féretro, le dio un beso e hizo sobre él
la señal de la cruz, porque Malenkov en el último tiempo de su vida había
pedido el bautismo.
II. EL DIOS LIBERTAD
Cada hombre, dice este dios, tiene una libertad absoluta. De esa libertad
brotan los valores. Todo lo que vaya contra esa libertad es antisagrado (moral,
religión católica con sus dogmas y mandamientos). No hay pecado. No hay
límites. La libertad salva, rige y condena.
DIGAMOS NOSOTROS:
1. Hay influjo de la revolución francesa,
inspirada a su vez en Rousseau, para quien "el
hombre nació bueno, sin pecado original" (Contrato Social). Influjo
también de Nietzche, padre del nacional-socialismo como del bolcheviquismo,
cuyo mayor terrorismo fue decretar que "Dios
está muerto" y, como lógica contrapartida, decretar la "inocencia dionisíaca de los hombres". Es
como decir: Dios es el culpable y lo hemos
guillotinado; y el hombre es inocente y lo adoramos.
2. En nombre de este dios se asesinaron durante
la revolución francesa a 250.000 de una población de 600.000 personas, 778
parroquias. En España durante la guerra civil, se destruyeron 20.000 iglesias,
incineración de tesoros de arte religioso, el asesinato del 80 por ciento de
los sacerdotes; esto en la zona nacional. En la zona roja, 11 obispos y más de
10.000 sacerdotes. A esto se añade: la profanación
de imágenes sagradas que luego sirvieron de blancos para práctica de tiro; los
vasos sagrados como orinales.
3. Este dios ha dado a luz al terrorismo de
Sendero luminoso en Perú, el de Hitler, el de Stalin, todos surgidos de la
misma raíz iluminista. Otros: asesinatos en la plaza de Tianonmen en China
Popular; la entrada de marines en Panamá y la demolición de barrios indefensos
hostiles a los invasores; el bombardeo selectivo y discriminado de templos
(mezquitas e iglesias católicas) y hospitales en Irak, durante la guerra del
golfo. En Bosnia-Herzegovina, los serbios llevan más de 40.000 mujeres
violadas, monjas incluidas.
4. Como es una libertad sin Dios, que se
endiosa, y está destinada a esclavizar y no a liberar.
5. La libertad es un desafío y una
responsabilidad. Es un fruto que se consigue ganando las batallas interiores
del dominio propio y entregando las propias energías no a fines egoístas, sino
a objetivos superiores y generosos.
III. EL DIOS CIENCIA
"La organización
técnico-científica de ciertos países está engendrando una visión cientista del
hombre cuya vocación es la conquista del universo. En esta visión, sólo se
reconoce como verdad lo que la ciencia puede demostrar; el mismo hombre se
reduce a su definición científica. En nombre de la ciencia todo se justifica,
incluso lo que constituye una afrenta a la dignidad humana. Al mismo tiempo se
someten las comunidades nacionales a decisiones de un nuevo poder, la
tecnocracia. Una especie de ingeniería social puede controlar los espacios de
libertad de individuos e instituciones, con el riesgo de reducirlos a meros
elementos de cálculo" (Puebla, 315).
"Es cierto que el progreso actual de las
ciencias y de la técnica, las cuales, debido a su método no pueden penetrar
hasta las íntimas esencias de las cosas, puede favorecer cierto fenomenismo y
agnosticismo cuando el método de investigación usado por estas disciplinas se
considera sin razón como la regla suprema para hallar toda la verdad. Es más,
hay el peligro de que el hombre, confiado con exceso en los inventos actuales,
crea que se baste a sí mismo y deje de buscar ya cosas más altas. (Gaudium
et spes, 57)
SU CREDO: sólo
la ciencia nos puede dar certezas, está por encima del bien común, de la ética,
de la persona. Todo lo que no es ciencia es sentimiento, subjetivismo, espiritualismo.
A la diosa ciencia le corresponde un altar; el bien del hombre, su conciencia,
su conducta, su integridad moral están por debajo de ella.
Esto es lo que expresó Roosevelt en 1912: "Creo
que la asimilación de los países latinoamericanos será larga y difícil mientras
esos países sigan siendo católicos". En la misma línea Rockefeller,
en 1969, recomendó en Roma que sustituyera a los católicos de Latinoamérica por
otros cristianos, recomendación que está en marcha con ingentes recursos de
todo orden. Tendencia asociada con el control de natalidad y con la política
monetarista del FMI.
DIGAMOS:
1. Hay influjo de Comte y de Kant que decían
había una separación absoluta e irreductible entre los sentimientos y los
hechos. A los primeros -dicen- corresponde el mundo subjetivo; a los segundos, el
objetivo, experimentable, científico. Si fuera verdad esto, tendríamos
que eliminar el misterio que todo hombre lleva consigo.
2. Hay un reduccionismo científico. Nuestro
conocimiento verdadero se entiende que es conocimiento de lo experimentable o
de lo medible. Se niega a la inteligencia la capacidad de ponerse en contacto
con lo que no está sujeto a ella ni es medible; se la reduce a la capacidad de
conocer lo cuantitativo.
3. Hay un reduccionismo del hombre, de sus
capacidades espirituales, su razonalidad.
4. Hay que decir también que la fe no está
contra la razón ni contra la ciencia. Por tanto, la ciencia se convierte en
ídolo y en su soberbia quiere llenarlo todo cuando abandona su misión de
instrumento y pretende dictar leyes al mismo Dios. Es el momento en que cae de
su pedestal y se rompe.
IV. EL DIOS HOMBRE
"La religión del Dios
que se hace hombre se ha encontrado con la religión del hombre que se hace
Dios".(Pablo VI)
SU CREDO: el hombre es inmanentista, total y
completo en sí mismo, nada sobre él. Es la medida de todas las cosas. Su
placer, su tener, su yo, marcan su ley. Es él el principio supremo de la ley.
Dios es válido en la medida en que le sirve.
DECIMOS:
1. Aquí el hombre ha perdido su condición de
creatura. Estamos retornando a Feuerbach (1804-1872).
2. Aquí Dios viene suprimido, su gracia. El
hombre consigue todo con sus fuerzas, incluso en cosas del espíritu. De ahí, el
yoga, el control mental y la meditación trascendental para conseguir la
experiencia mística. Ya no es Dios que llega y atrapa, sino el esfuerzo humano
que quiere conseguir todo, incluso llegar a Dios.
3. Aquí el hombre dice a Cristo que baje de la
cruz, que no necesita del sufrimiento. Predican una religiosidad de consumo,
superficial y demagógica. Predican que vendrá una nueva era, la del Acuario,
hacia el 2140, donde un maestro, la reencarnación de Cristo, enseñará a los
hombres a salvarse por sí mismos.
V. EL DIOS UTILIDAD
LEY: lo útil es lo
bueno. La eficiencia como tarjeta principal de presentación. El hombre
como material humano, medido por el rendimiento (marxismo, capitalismo
liberal). Utilitarismo y pragmatismo.
JUZGAMOS:
1. Nada de sentido heroico de la vida. Nada que
no sea para conseguir algo práctico. Nada de poesía, de arte, de contemplación
y de oración. Cualquiera de estas cosas, sí, si me traen beneficio. Si por la
contemplación me voy a curar de mi estrés, ¡bienvenida!
2. Por el utilitarismo actual, y bajo el amparo
del dios ciencia, hemos llegado a una civilización de la muerte.
3. Ha exaltado el hedonismo, el uso de droga
para codearnos con el infinito.
4. En nombre de este dios se sacrifican muchas
aberraciones: se justifica la esterilización de
enfermos mentales, como lo hizo el Parlamento europeo, o el suicidioo
voluntario, o por decisión de la familia, de los enfermos, como en Holanda.
5. Este ídolo es barato y chato. Sólo sociedades
decadentes, que han perdido sus aspiraciones, están en condiciones de aceptarlo
para regir sus vidas. Pero el hombre es un ser llamado a las más empinadas
alturas y, por eso mismo, está también propenso a caer en los más profundos
abismos.
VI. ALGUNOS SUBDIOSES
1. DEMOCRACIA
LIBERAL: es un engaño de democracia.
El pueblo vota y se le acaban sus atribuciones. Es un cero a la izquierda. Se
anula el poder de las sociedades intermedias, que son las encargadas de tejer
la red de relaciones sociales que hace fuerte a una nación; se acusa a las
sociedades intermedias, o a los centros de fuerza de ser "corporaciones", que por su naturaleza
producen tiranía, gobiernos derechistas, autoritarismo. Sociedades que son: Iglesia, sindicatos, universidades, fuerzas armadas,
municipios, federaciones de comercio, agrarias o de industria, sociedades de
beneficencia, clubes.
2. PAZ: paz como no-guerra o no-conflicto. No como fruto de la justicia.
3. VIDA:
en forma de hedonismo. Vivir y gozar
de la vida: sexo libre, droga, usura... ¿Qué decir
de los mártires que sacrificaron sus vidas por causas superiores, o la consumen
a diario por los demás? La vida no es lo supremo. Hay cosas superiores.
Hay otra vida. Sin un sano desprecio por la vida nos convertimos en poco menos
que gusanos. Una vida digna es la vida que se pone al servicio de lo que está
por encima de la vida. La vida mejor vivida es la que aparentemente se pierde.
No hay mayor gloria que darla por aquello que la trasciende.
4. MODA:
es de los ídolos más estúpidos. Pero
por su apariencia alegre e inofensiva es quizá el que tiene más seguidores. Es
fanático y dogmático. Quien no hace caso a la moda es marginado de la sociedad.
Es ídolo irracional e impuesto, pero funciona. Está relacionado con el dios
Progreso. Detrás de este ídolo se esconde la concepción evolucionista,
relativista e historicista de la vida. Niega la verdad objetiva, la estabilidad
de la naturaleza, los principios inconmovibles de la moral. Incluso niega que
la naturaleza humana sea algo terminado y proclama que es dependiente de las
transformaciones sociales (por eso muchas veces está en manos de gente
sexualmente promiscua, ambigua o cambiante). Niega la capacidad del hombre a
definir, porque definir es la negación de la evolución y del progreso. Niega la
capacidad del hombre a conocer las esencias, pues una cosa que ayer era hoy ya
no es. Por eso los hombres debemos quedar libres incluso de la propia
naturaleza humana, de la moral, de los principios, y adaptarnos a los cambios,
aceptarlos y asumirlos porque no hay otra alternativa. La Moda se establece
sobre la base de un anonimato. Se sigue una fuerza ciega, pero omnipotente.
Satánica destrucción de las cosas, de la creación misma, de Dios.
5. AMOR:
es un idolillo del dios libertad absoluta.
Total culto al cuerpo, predicado desde el púlpito de Hollywood. Amor de
sentimiento, a primera vista. Amor que permite la infidelidad, el divorcio: "Ya no siento nada por el otro, no debo fingir...por
tanto, debo separarme". Ya no es darse, sino sentir y gozar y
abusar del otro. Amor pasajero, pues los sentimientos son pasajeros. Amor como
sexopatía. Es un amor pordiosero que se contenta con migajas, que nunca está
seguro, que no sabe a dónde va, que sufre
mucho y trata constantemente de acallar ese gemido interior con nuevas
experiencias, que traen un analgésico cada vez más pasajero, y que aumenta la
desesperanza. Digamos que el hombre ha sido hecho para amar. No meramente para
sentir amor. Hecho para el matrimonio, para la familia, los hijos, la
estabilidad, la vejez serena y confiada. No para aventuras, para el infinito y
estúpido coqueteo, para la inseguridad y la inmadurez constante.
CONCLUSIÓN:
Hoy nos conducimos como paganos, adorando ídolos (Is 30, 1-5). Ídolos que son máscaras del mismo
satanás. Estos ídolos han sido
llamados también como modernismo, secularismo,
humanismo ateo. Con estos ídolos no podemos construir la ciudad de Dios,
la civilización del amor. Se nos exige una verdadera
cruzada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario