jueves, 2 de enero de 2014

LA PROMESA DE DIOS

DIOS MANTIENE SU PROMESA CON NOSOTROS

Dios quiere que comprendas que creer significa tener la suficiente fe como para apoyarte en Él Y descansar.

Crónicas 20:20 dice "Y cuando se levantaron por la mañana, salieron al desierto de Tecoa. Y mientras ellos salían, Josafat, estando en pie, dijo: Oídme, Judá y moradores de Jerusalén. Creed en Jehová vuestro Dios, y estaréis seguros; creed a sus profetas, y seréis prosperados."

Esta es la temporada de la materialización de las promesas. Dios a través de la Promesa te asegura un futuro, pero a través de la materialización de la promesa, Dios te asegura el Presente y te potencia para ese futuro.

Dios me mostro esto, viene una aceleración en la materialización de lo prometido. Pero la clave fundamental radicara, en la preparación profética que tengo antes de que todo se materialice.

¿Qué significa preparación profética? Significa, prepararme sin haber recibido lo Prometido. Esto es, la preparación de un hijo de Dios, anuncia lo que esta creyendo. Tu preparación, compromiso, y 2 dedicación, demuestra que tipo de promesa hay sobre tu vida.

No existe una persona sin una promesa. Que la persona no la descubra, no significa que no exista. Dios estableció una promesa sobre tu vida que será la que te sostendrá en Fe, para que una vez cumplida puedas ver que no solo hay una promesa para tu vida personal, sino también para tus hijos y tus próximas generaciones.

El diablo tiene bien claro algo, tus generaciones venideras, ¡ya tienen! promesas a causa de tu persona.

¿Cómo atrapo lo que Dios me prometió?

La promesa se materializa por dos canales fundamentales en el Reino. Que son los que deben estar fuertes en medio de las batallas que se presentan.

Siempre antes que llegue el cumplimiento de algo prometido habrá una guerra. No te preparares solo para la guerra. Sino más bien, enfrenta la guerra sabiendo que después, está la materialización de la promesa.

En 2 Crónicas da las dos claves:

1. Creerle a Dios: Esta frase viene del original bíblico que sig. pisteuo, es decir, ser persuadido de, y por ello fiarse de, confiar. Significa, en este sentido de la palabra, apoyarse en... No solo una mera creencia.

Cuando la palabra dice que le creas a Dios, lo que te está diciendo es que te apoyes en Él. Hoy la gente hace al revés, se esfuerza por creer y Dios lo que quiere que comprendas es que creer significa tener la suficiente Fe como para apoyarte en Él Y descansar.

Hebreos 11:6 (TLA) Porque a Dios no le gusta que no confiemos en él. Para ser amigos de Dios, hay que creer que él existe (apoyarse en su existencia) y que sabe pagar a los que buscan su amistad.

Puedo acercarme a Él sin creer, y aún así recibir, ¿Por qué? Porque Él es proveedor. Pero el que se acerca creyendo, no solo que recibe, sino que se le paga por eso.

Cuando me apoyo en Él recupero la expectativas de que algo Sobrenatural esta por ocurrir.

2. Creerle al que anuncia: Muchas personas dicen, "yo le creo a Dios pero al hombre no…" Quiero decirte algo. Si la persona que piensa así, le creería a Dios y se acercaría a Él, Dios rápidamente lo uniría a alguien para que le enseñe.

¿Por qué? Porque la prosperidad viene de la amplitud de tu corazón para ser Formado.

Dios siempre establecerá autoridades visibles sobre tu persona para que aprendas con el tiempo a obedecer la Autoridad que no ves. Dios no puede enseñarte desde lo invisible. En realidad puede, pero no es la idea original.

Por eso la Autoridad debe ser una persona con la característica de dar cobertura, dar formación, dar consejos de Sabiduría, ministrar el Poder de Dios, debe tener manifestación. Debe ser de inspiración para la imitación. Debe saber ministrar la presencia de Dios sobre los demás. Sino NO puede ser autoridad. Sin estas características, no importa el titulo de la persona, solo es un creyente más.

Por eso la biblia dice "Creed a sus Profetas…" Dios siempre pone alguien con estas características para que Puedas capturar las Promesas y puedan materializarse.

La seguridad de que Dios no cambio contigo

Algo debemos tener claro, que a pesar de las recaídas, o a pesar de las debilidades, el estar vivo, demuestra que Dios no ha cambiado contigo. Dios sigue insistiendo por que sigue creyendo en tu persona.

Dios no tiene puestos los ojos en tu pecado, Dios tiene puestos los ojos en tu propósito. ¿Cómo puedo saberlo? Porque Dios es un Dios generacional, con una mente infinita y jamás se rebajaría a la altura de un pecado. Cuando hay un arrepentimiento genuino y una búsqueda intensa, hay una reconexión espiritual, esa reconexión te demostrará que Dios no ha cambiado, Él sigue pensando en ponerte donde te Prometió.

Santiago 1:17 (BAD) Expresa algo extraordinario, dice: "Todo lo bueno y perfecto desciende de Dios, del creador de la luz, del que brilla eternamente sin sombra ni variaciones."

Esta palabra te da dos claves para que tengas seguridad que Dios no cambio su promesa contigo

1. Sin sombras: Esto es, en Dios no hay un lado oscuro. No hay una cara oculta.

Dios no tiene sombras, pero sí tiene misterios.

Sombra sig.: Oscuridad, falta de luz.

Misterio sig.: Que tu razonamiento no tiene acceso pero si tu fe.

El Dios que servimos, no tiene ni tendrá lado oscuro jamás.

2. Sin variación: Esto es, Dios no cambiara sus planes a medida que nosotros avancemos, Él ya tiene sus planes establecidos de antemano. Dios no es emocional, es Espiritual.

Saber que Dios no tiene variaciones, es muy importante para el desarrollo de tu espiritualidad y de tu vida completa.

Observemos esto: Aquí hay un detalle muy impresionante. La palabra variación aparece una sola vez en toda la biblia. Algo tan poderoso, que asegura tu vida solo aparece una vez. ¿Por qué? Porque lo poco de Dios es suficientemente poderoso para mantenerte de pie toda una vida.

Sin Variación en el original bíblico sig.: Que nunca gira, que nunca varía su forma.

Te profetizo: Dios te mostrara, que Él te sigue amando como siempre. Habrá señales fuertes a tu alrededor que demostrarán, que Dios mantiene su idea sobre ti.

La Promesa sobre tu vida sigue intacta, Dios no cambia.

Por Sahir Akel

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