Vivimos un 2020 que
nunca hubiéramos imaginado. Y ciertamente, una de las cosas que muchos de
nosotros estamos haciendo para pasar el rato estando en cuarentena, es buscar
películas y series para ver en los diferentes servicios de streaming
disponibles en la web.
Pedimos recomendaciones a
amigos, vemos películas o series en cantidades que, teniendo la rutina
ordinaria que solíamos tener, no veríamos. Es en este contexto que me parece
valioso tener en cuenta ciertos elementos antes de elegir un título para ver.
No todas las ofertas son
buenas. Lo que es más importante, no todas las películas o series nos brindan
un aporte valioso a nuestra vida interior y, diría aún más, algunas hasta nos
roban la paz.
Por eso hoy quiero compartir contigo cuatro cosas
que puedes tener en cuenta antes de elegir una película o serie:
1. ¿QUÉ TE DICE EL TÍTULO? ¿QUÉ SIENTES CUANDO LO
LEES?
Muchas veces, con solo el
nombre o la estética de promoción de la película nos damos una idea de hacia
dónde va la cosa. Teniendo eso en cuenta, es prudente hacerse la pregunta a uno
mismo sobre si realmente vale la pena «exponerse» ante tal contenido.
No
es bueno subestimar el efecto que las películas tienen en nosotros. Es claro que sabemos que lo que estamos viendo es ficción, que son
actores. Sin embargo, nos puede pasar que después de ver una película o una
serie no estamos tranquilos.
A mí por ejemplo me pasó con
la película «Joker», la que protagonizó Joaquín Phoenix. Al salir
del cine estaba realmente agitado, tratando de procesar todo lo que había
visto. No niego que la película esté bien hecha y que la actuación de Phoenix
(por poco que comparta su visión del mundo) fuera realmente digna de la
estatuilla.
Pero en lo personal, no creo
que la vuelva a ver o que la recomiende sin antes advertir de lo dolorosa que
puede llegar a ser la experiencia de verla. Busquemos ver cosas que nos
permitan disfrutar del cine como se supone que ha de disfrutarse: como algo que nos entretiene sanamente.
2. LEE LA SINOPSIS: ¿QUÉ TE LLAMA LA ATENCIÓN DE
ESTA HISTORIA?
¿Crees que te
aportará algo de valor? A veces, si estamos en duda, podemos averiguar un poco más. Internet
está lleno de «comentarios libres de spoilers»
que nos dan una idea de lo que estamos considerando ver.
En caso de hacerlo, esa
información extra nos permite tener en cuenta si la película realmente vale
nuestro tiempo. No por la calidad de las actuaciones, sus efectos especiales o
narrativa. Sino por lo que nos pueda llegar a aportar.
¿Va a hacernos
mejores?, ¿voy a pasar un rato agradable viéndola?, ¿la escojo porque me podría
identificar con la historia?, ¿me causa curiosidad saber cómo el cine expresa
cierto tema o realidad?, ¿la voy a ver porque la he elegido libremente o porque
otros me han presionado?, ¿mirarla me va a exponer a una situación de pecado?
Cristo nos invita a evitar
estas ocasiones de caída (cf. Mt 5, 29-30). ¡No nos expongamos
innecesariamente!
3. ESCUCHA LA OPINIÓN DE OTROS
¿Qué ha dicho la
gente sobre esta película?, ¿es buena, es malísima, es incómoda, te deja con
miedo? Puede pasar
que esa misma película ya la hayan visto. Hoy en día, preguntarle a nuestros
amigos o familiares «¿Qué serie estás viendo?» o
«¿Has visto alguna película últimamente?» es
algo normal y hasta frecuente.
Aprovechemos de esa
naturalidad en el diálogo para poder discernir sabiamente sobre lo que conviene
y no conviene ver. El cine está hecho para entretenernos, no para
atormentarnos. Piensa en este momento ¿qué géneros
son los que te gustan más y por qué?
4. SI LA PELÍCULA TE ROBA LA PAZ…
Si luego de seguir estos
consejos, te ganó la curiosidad de ver esa película que en el fondo sabías que
no debías ver, tranquilo, hay solución. Insisto en que nada que ver tienen los
aspectos técnicos de la película al juzgarla como material digno de ser
consumido o no.
Es importante que
revaloricemos el rol de nuestra interioridad en el día a día. Sucede muy a menudo que la gente descuida su paz interior solo para ver
tal o cual serie de moda. Si la ve todo el mundo ¿por qué yo no? ¡Ojo con esa actitud!
Hay que tener más cuidado con
las cosas a las que nos exponemos. Tener criterio y a la vez sentirnos capaces
de decir «no» con tranquilidad.
En caso de que al finalizar
una película, descubras que te robó la paz, te propongo dos cosas:
1. CONVERSA CON ALGÚN AMIGO/MIEMBRO DE TU FAMILIA: expresa en palabras y con
sinceridad qué suscitó eso que viste. Conceptualiza las ideas que dan vueltas
en tu cabeza. El diálogo abierto y sincero con alguien te va a ayudar a hacerle
frente a esa paz perdida.
2. ENCUENTRA RECOGIMIENTO EN LA ORACIÓN: la paz se recupera, primero
que nada, con la oración. Al rezar, nos ponemos frente a la mirada consoladora
de Nuestro Padre que nos ama, que es quien nos regala la paz. Acudamos a Él, es
infalible.
Puede pasar que luego de verla
te sientes culpable o arrepentido. Si la película que viste te afectó de una
manera que no esperabas, es buena idea conversarlo con tu confesor o guía
espiritual.
Puedes poner esa inquietud de
conciencia en diálogo con él, así podrá decirte si es necesaria una confesión o
si simplemente, con aprender de la experiencia basta.
Espero que estos consejos te
sirvan y que logres disfrutar de películas y series que realmente le aporten
algo positivo a tu vida.
Escrito por Ignacio Romero
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