El 23 de noviembre el diario
británico The Sunday Telegraph publicaba en la página 16 un scoop
extraído de un libro sobre el Papa Francisco: cuatro cardenales habrían
orquestado una campaña para elegir sucesor de san Pedro al arzobispo de Buenos
Aires, Cardenal Jorge Mario Bergoglio. Se adereza el reportaje diciendo que las
predicciones de «papables» para el Cónclave de 2013 apuntaban a los cardenales
Angelo Scola y Marc Ouellet y se hacen alusiones a por qué Bergoglio no fue
elegido en el cónclave de 2005
El autor del libro en el que se
basa el artículo del Sunday Telegraph llama a los cuatro cardenales «Team
Bergoglio». El trabajo de ese equipo, según el autor del libro, fue asegurar
«el asentimiento de Bergoglio. Cuando le preguntaron si estaba dispuesto, él
dijo que creía que en este momento de crisis para la Iglesia ningún cardenal
podía negarse si se lo pedían». Y según la fantaciencia del escritor los
cardenales «se pusieron a trabajar, recorriendo las cenas de los cardenales
para promover a su hombre, con el argumento de que su edad -76- no debería ya
considerarse como un obstáculo, dado que los papas podían renunciar».
Unos días
después uno de los cardenales implicados por el autor del libro, Card. Murphy
O´Connor, escribía al Daily Telegraph por medio de su secretaria de prensa:
«[el cardenal] no hizo en los días anteriores al cónclave, ningún acercamiento
al entonces cardenal Bergoglio, por parte suya o, hasta donde él sabe, por
ningún otro cardenal para buscar su asentimiento para convertirse en un
candidato para el papado».
En un
libro de reciente publicación sobre el Papa Francisco, escrito por Austen
Ivereigh y salido en inglés con el título «The Great Riformer. Francis and the
Making of a Radical Pope», se afirma que en los días precedentes al Cónclave
cuatro cardenales (Murphy O’Connor, Kasper, Daneels e Lehmann) «aseguraron el
consenso» del Card. Bergoglio («They first secured Bergoglio’s assent») a su
eventual elección, y después «se pusieron a trabajar» («then they got to work»)
con una campaña para la promoción de su elección.
El hecho ha tenido sus ecos
especialmente en la prensa de lengua inglesa. Interrogado por este tema, el
portavoz de la sala de prensa de la Santa Sede declaró:
«Puedo declarar que los cuatro
cardenales antes mencionados niegan explícitamente esta descripción de los
hechos, sea por cuanto toca la petición de un consenso previo del Card.
Bergoglio, sea por cuanto toca a la realización de una campaña para su
elección, y desean que se sepa que están sorprendidos y contrariados por cuanto
se ha publicado».
Que el
padre Lombardi, portavoz del Vaticano, haya desmentido el hecho no puede darse
por descontado ni minimizarse visto que la Constitución Apostólica Universi
Dominici Gregis, del 22 de febrero de 1996, prohíbe campañas como las
imaginadas (y por algunos creídas) por el autor de «The Great Riformer. Francis
and the Making of a Radical Pope».
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