viernes, 28 de junio de 2013

EL ANACORETA Y LOS BANCOS


El Anacoreta y su joven seguidor pasaron junto a un grupo de manifestantes, que gritaban ante un Banco contra los desahucios y se quejaban del engaño de las preferentes.

El anciano movió con tristeza la cabeza y dijo:

- Es triste, pero la banca se basa en un principio inmoral. No sólo se enriquecen con el dinero de los demás, sino que cuando lo prestan quieren sacar partido de la necesidad. Ellos tienen un dinero, que además no es suyo, es de los que lo ha depositado allí, prestan, pero no para ayudar, sino para luego tener todavía más dinero. Así cada vez el dinero se concentra más en unas pocas manos. esto es monstruoso.

Sonrió con melancolía y añadió:

- Lo más triste es que los cristianos aceptamos esta economía, cuando es totalmente a lo que nos señala Jesús. Rezamos cada día "perdónanos nuestras deudas" y ahogamos a los demás con las suyas. Esta petición se aplica al terreno humano, moral y también al económico. ¡Qué lejos estamos del evangelio!

Joan Josep Tamburini

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bueno, prestar a intereses no fue exactamente combatido por Jesús. De hecho, en la parábola de los talentos, el jefe de los trabajadores, en su reproche a la desidia del tercero, le reprochó no haber puesto el dinero a intereses.
Los intereses en sí no son malos. Lo malo es que sean exageradamente altos. Es justo que la persona a la que le presto mi dinero no se limite a darme las gracias, sino que me reconozca que la preferí a ella que invertir en otro negocio que podría producirme quizás mayores rendimientos.