No dejemos acumular la "basura
emocional" en nuestras vidas, desechémosla pronto cada día para vivir en
libertad.
"Descarguen en él todas sus
angustias, porque él tiene cuidado de ustedes". 1 Pedro 5:7
Lo recuerdo
como si fuera ayer, la campana que sonaba fuertemente como si alguien corriera
por el barrio anunciando la inminente llegada del camión de la basura. Esto fue
planeado para darnos el tiempo suficiente para recoger todas las bolsas y latas
de basura, y queden en la acera listas para ser levantadas en el camión.
Muchas veces, nos las arreglamos para escuchar la campana con mucha anticipación a la llegada del camión, y la tarea se llevaba a cabo en silencio y en orden. Otras veces, nos tomó por sorpresa y corríamos salvajemente por la casa tratando de conseguir todos antes de que el camión de la basura pasara. Algunas veces el camión no pudo recoger a tiempo toda la basura. Cuando eso sucedía, la basura se acumulaba hasta el día siguiente. ¡Es muy desagradable vivir con la basura!
Lo mismo ocurre en nuestras propias
vidas. Tenemos todo un equipaje emocional que hemos recogido a lo largo de los
años. Por ejemplo, cuando alguien nos causa dolor y heridas en nuestro corazón
que no se sanan, se puede empezar a albergar malos sentimientos en algún rincón
de nuestra alma. O tal vez nos tomamos el tiempo para hacer algo bueno para
alguien a costa de mucho esfuerzo, e incluso sacrificio personal, y ni siquiera
recibimos un simple "gracias". Otras veces, sentimos dolor porque
alguien nos falla, tal vez se olvidaron de alguna fecha especial para nosotros,
cumpleaños, aniversario, etc. Con los años todo ese dolor se puede acumular, la
desesperación, el desaliento, el resentimiento, la envidia, la ira, la rabia,
la decepción, y miles de sentimientos negativos que empiezan a llenar nuestro
ser con el olor de la amargura y el odio. No vayas por ahí con eso en tu vida.
¡Vamos a sacar la basura!.
El otro día, sentí una gran tristeza
al leer un artículo en mi periódico local acerca de dos personas en un
semáforo, que se alteró tanto uno con el otro, porque ninguno de los dos quería
ceder el paso a la otra. Ellos comenzaron a gritar y maldecir el uno al otro,
al punto de detener todo el tráfico. Luego procedieron a salir de sus coches y
la lucha se intensificó hasta que llegaron a las manos. Una vez llegado a ese
punto, no pasó mucho tiempo para que tomen armas y uno terminó con la vida del
otro. No tengo ninguna duda de que ambos individuos habían acumulado una gran
cantidad de equipaje emocional que no se habían molestado en tirar, y cuando
uno menos se lo espera, todo ese equipaje y agobio nos destruye. Ya no podían
soportar el peso de todo ese dolor, la amargura y los problemas de la vida.
Ellos murieron consumidos por su amargura terrible, dejando a sus familias y
seres queridos en el dolor, y todo porque no descartaron su basura emocional.
¿Cómo nos deshacemos de nuestro
bagaje emocional o rechazo? Mi primera sugerencia es que cada día nos debemos
decidir a deshacernos de él para que no se acumule. Cada día, antes de
acostarse, asegúrese de que están en paz consigo mismo y con todo el mundo en
su vida. Es mucho más fácil sacar la basura en pequeñas porciones que esperar
hasta que sea demasiado para usted llevar tanta carga. Cuanto antes trate con
el dolor, la desilusión, el resentimiento o el odio, más pronto vamos a
recuperar nuestra paz. Obviamente, algunos acontecimientos en la vida requieren
un proceso más largo o más lento en sanar. Un divorcio, el abandono, la
decepción en el amor, la muerte, el fraude y la traición son todas las
circunstancias que causan las emociones dolorosas e imprevisibles. Estas son
las emociones que muchos de nosotros no podemos manejar por nosotros mismos.
Para muchos, será necesaria la ayuda profesional y una firme determinación de
no permitir que el dolor y la amargura se acumulen, y nos roben la alegría y el
amor por la vida.
AQUÍ HAY ALGUNOS PASOS PRÁCTICOS QUE PUEDE SEGUIR:
1. Ore. Cuando confiamos nuestras
vidas a Dios, nos damos cuenta de lo pequeño que nuestro problema es cuando se
compara con su grandeza y vemos todo lo demás desde su perspectiva.
2. Haga una lista de los
acontecimientos o las personas que han causado más dolor y añada todos los
detalles que pueda recordar. A continuación, escriba una carta a esa persona
acerca de la situación y de sus sentimientos y hágale saber de forma definitiva
que usted los perdona. Luego, destruya la carta. Asegúrese de que nadie más
sería capaz de leerla. No queremos hacer daño a nadie con lo que no hace daño.
3. Ejercicio. Haga ejercicio para su
sistema cardiovascular. Esto le ayudará a deshacerse de toda esa basura
emocional a través de sus poros.
4. Busque el consejo de alguien que
sea imparcial a la situación y que es capaz de dar un buen consejo. Muchas
veces, confiar en alguien y compartir nuestro dolor con alguien más amargado
que nosotros, y todo lo que logramos es pero aun.
"Ding
ding ...". ¿Qué es ese sonido? Es el sonido de mi campana imaginaria que
anuncia la llegada inminente del camión de la basura emocional. Disfruta de
este momento, recoge toda la basura emocional, y vamos todos a ayudar y
asegurarnos de que estamos completamente libres. ¡No deje que pase mucho tiempo
o es posible que pierda el camión de basura!
No hay comentarios:
Publicar un comentario