Hace pocos días que regresé de Sudán.
Un nuevo viaje con Ayuda a la Iglesia Necesitada me ha dado la oportunidad de conocer la realidad de los cristianos en un país musulmán y africano, en este caso.
No puedo contar mucho más, pero me quedo con una anécdota: una noche salí a cenar en Jartum con dos sacerdotes sudaneses, negros como el azabache y cristianos. Estábamos en un restaurante céntrico y a parte de algún que otro europeo, lo que había eran árabes musulmanes, que no demuestran simpatía alguna por los negros cristianos. Sudán ha estado sacudido por una guerra civil entre el norte y el sur, musulmanes contra cristianos, desde 1981 hasta 2005.
La cosa es que James y Santino bendijeron la mesa y se santiguaron a la vista de todos, y me pregunté cuantos cristianos ni bendicen ni se santiguan en España cuando comen fuera de casa, o en una boda, o con los compañeros de trabajo, en un entorno mucho menos hostil que Jartum.
No es ninguna queja, ni nada parecido, es solo una información de algo que ocurrió cenando en Jartum.
La semana que viene me vuelvo a ir de viaje, y os pido muchas oraciones. Es un viaje muy importante.
Feliz día de todos los santos,
Dob.
Jesús García
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