El Papa Francisco alentó a jóvenes conservar el don del Espíritu Santo recibido en la Confirmación porque el Sacramento “nos prepara para ser buenas personas, buenos ciudadanos, buenos cristianos”.
Así lo dijo el Santo Padre este 21 de mayo al recibir a un grupo de
jóvenes de la Diócesis de Génova que recibieron recientemente la Confirmación o
se preparan para recibir el Sacramento próximamente.
En esta línea, el Papa les preguntó a los jóvenes quienes habían
recibido ya la Confirmación y levantaron la mano.
Luego, con sentido del humor el Santo Padre dijo que le alegraba que no
se hubieran alejado de la Iglesia ya que “algunos
dicen que la Confirmación es el ‘sacramento del adiós’: el joven recibe la
Confirmación y se va de la Iglesia” y les preguntó: “¿es verdad?” y los jóvenes
respondieron que “no”.
“Muy bien, esto es una gran cosa, permanecer.
Porque con la fuerza de la Confirmación se avanza, se avanza no solo en la
Iglesia, sino en la propia vida, de cada uno de nosotros, porque la
Confirmación nos prepara para ser buenas personas, buenos ciudadanos, buenos
cristianos. Adelante con esto”, señaló el Papa.
En esta línea, el Santo Padre indicó que “la
Confirmación es un regalo y debemos preservar el regalo, apreciar el regalo,
¿entienden? Este regalo no debemos guardarlo en el cajón, no, se debe
conservarlo en el corazón”.
Para ello, el Papa Francisco exhortó a conservar el regalo de la
Confirmación “con la oración, pidiendo al Señor que
nos dé la fuerza para seguir adelante, para conservar esta fuerza del Espíritu
Santo que todos hemos recibido”.
“Y reza siempre, porque el Señor ha dicho que si
pides, yo daré. Pero a veces no pedimos. Nos olvidamos de pedir, de rezar, y
sabemos que ‘quien no llora no mama’ [proverbio genovés], ¡lo sabemos bien! Por
eso, debemos rezar e insistir para que el Señor nos escuche y nos dé fuerzas
para seguir adelante”, afirmó el Papa.
Además, el Santo Padre destacó a los jóvenes la importancia de la
amistad “porque en la Iglesia no somos ‘solo yo’,
yo y Dios, no, somos todos, en comunidad” por lo que los invitó a “ser generosos” con los demás.
Finalmente, el Papa rezó un Ave María con los jóvenes, les impartió la
bendición y los invitó a no olvidar la importancia de la comunidad, de la
amistad.
POR MERCEDES DE LA
TORRE | ACI Prensa
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