¿QUÉ SOY…? GRAN INTERROGANTE

 Nunca me lo propuse. Me llamaron para orar por un enfermo a donde concurrí con miembros de mi Grupo de Sanación, con el que visitamos o nos visitan, desde hace más de 30 años.

Me preguntan si cobramos: En el caso de que nos visiten no cobramos, en el caso que deseen que los visitemos, si cobramos los gastos de transporte.

Pero no estoy para hacerme propaganda o publicidad, sino para especificar cuál es mi situación un poco confusa.

SOY EXORCISTA O ¿QUÉ SOY?

Todo empezó cuando mi director espiritual fue dispuesto para otros menesteres, por lo cual me quede en el aire. Acompañé a este sacerdote durante muchos años en todo lo referente a SANACION, nunca en exorcismo. Quizás de vez en cuando en algunas LIBERACIONES.

Pero a lo que voy es hacerme algunas preguntas y a la vez darme algunas respuestas.

¿Qué hago si en una sanación voy a imponer manos y de repente salta el ANIMAL no programado?

Lo que hice nunca me lo imagine… no sentí miedo, solo la necesidad de enfrentarme al DEMONIO no programado… ni yo tampoco. Me miró fijamente y me dijo: “Ustedes son pecadores”… (Como preguntándome que hacia yo allí) a lo que yo le respondí: Pero… yo me voy a confesar y recupero la Gracia de Dios… lo que tú no puedes hacer.

Se revolcó fuerte profiriendo palabras no traducibles ni tampoco eran don de lenguas, pero yo seguía encima de ella, que hasta ahora no sé cómo es que aparecí así… mi grupo me apoyó en todo momento… todos de las manos (eran más o menos 6 hermanos en directo y otros más atrás apoyándome)

Todo parecía que había sido preparado… mis palabras, gestos, todo movido por el  Espíritu Santo, porque sin Él nunca habíamos hecho algo así. Poco duró nuestro encuentro con el maligno, el cual se tuvo que retirar, quizás confundido con nuestra actitud tan rara de tratarlo. Quizás el demonio esperaba que lo trataran como lo hacen los viejos exorcistas.

Para mí, el exorcizar con un librito lleno de protocolos, no es efectivo, porque el enemigo ya sabe con qué lo van a atacar. Cuando uno va a entrar en batalla lo primero que debe hacer es estudiar al enemigo, y según eso se ataca. Si lo vas hacer con tácticas siempre usadas el demonio va a estar preparado y va a hacer difícil derrotarlo. Déjate mover por Dios Espíritu Santo y de María Perfectísima si quieres tener la victoria asegurada

Luego del primer encuentro con el demonio vinieron otros encuentros… nunca tuvimos una derrota.

Algunos me llaman para preguntarme si soy exorcista… los envió a sus Parroquias

La respuesta a si soy o no soy exorcista, me contesto que soy eso que estoy haciendo… póngale ustedes el nombre que crean que soy.

Hno. José

Grupo Católico de Oración por los Enfermos. “Si Señor”

(No reconocido aun por la Iglesia Católica)