sábado, 4 de abril de 2020

¿QUÉ HACER CUANDO ES IMPOSIBLE CONFESARSE POR CUARENTENA DE CORONAVIRUS? OBISPO RESPONDE


Ante la pandemia de coronavirus COVID-19, que ha llevado a situaciones de cuarentena y de fuertes limitaciones de acceso a los sacramentos, hay quienes se preguntan qué se puede hacer ante la imposibilidad de confesarse. Un obispo mexicano responde a esta inquietud.
La pandemia de COVID-19, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha causado al 3 de abril 972.640 contagios confirmados en todo el mundo, causando 50.325 muertes.
En México, al 2 de abril, el Gobierno confirmó 1.510 casos y 50 muertes por coronavirus COVID-19.
Las autoridades ordenaron un estado de emergencia sanitaria y desde hace algunas semanas varias diócesis mexicanas suspendieron la celebración pública de la Santa Misa, alentando a los fieles a participar a través de la televisión, la radio o Internet.
El llamado de las autoridades a que los ciudadanos permanezcan en casa para evitar la propagación del virus ha llevado a que en la práctica no se pueda acceder al sacramento de la Reconciliación.
En diálogo con ACI Prensa, Mons. Eugenio Lira Rugarcía, Obispo de Matamoros, señaló que “el Catecismo de la Iglesia Católica, en el número 1452, explica que cuando estamos imposibilitados de recibir la absolución sacramental, el sincero arrepentimiento por las faltas cometidas, evidentemente el propósito de enmienda y la humilde petición de perdón a Dios acompañada del propósito de recurrir en cuanto sea posible a la confesión sacramental, obtiene el perdón de los pecados, incluso los mortales”.
Mons. Lira Rugarcía, ex secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) y encargado de la organización del viaje del Papa Francisco a México en 2016, subrayó que “esta petición de perdón de los pecados a Dios también lleva el propósito de recurrir cuanto antes a la confesión sacramental”.
“No quita esa intención, ese propósito firme. Al contrario, uno le pide perdón a Dios prometiéndole en cuanto sea posible acudirá a recibir el sacramento de la Reconciliación”, indicó.
NO A LAS CONFESIONES POR TELÉFONO
Mons. Lira Rugarcía recordó que no se puede realizar el sacramento de la Confesión por vía telefónica o de forma remota, pues “la Iglesia ha considerado la importancia de la presencia y cercanía del penitente con el confesor. Esa experiencia de encuentro. Y hasta el momento actual la Iglesia ha considerado eso como un elemento importante”.
“El sacerdote en ese momento representa al Señor, por eso cuando da la absolución dice ‘yo te absuelvo’, porque es Cristo quien está actuando a través de la persona del sacerdote”, indicó.
Precisamente por esto, dijo, cuando no se puede acceder al sacramento de la Reconciliación “hagamos el acto de contrición perfecta y hagamos el propósito de cuando sea posible recibir la confesión sacramental”.
MISAS POR TELEVISIÓN O REDES SOCIALES, PERO CON REVERENCIA
El Obispo de Matamoros también dijo que la contingencia sanitaria causada por el coronavirus COVID-19 ha motivado que “muchísimos sacerdotes y laicos con generosidad y creatividad han inundado las redes sociales con la presencia de Jesús, favoreciendo el encuentro de muchísimas personas con Él, incluso personas que antes no eran muy practicantes”.
“Esto ha sido uno de los bienes que ha sacado Dios de la situación actual”, señaló.
Mons. Lira Rugarcía hizo además importantes recomendaciones para que “a través de la comunión de los santos vivamos la Eucaristía” al seguir la celebración de la Misa por televisión, radio o Internet.
El primer consejo, señaló, es “buscar un lugar tranquilo”, para luego “desactivar las notificaciones del celular”.
El tercer consejo del Obispo de Matamoros es “tomar una postura correcta, con respeto”. Luego, como cuarta recomendación, Mons. Lira Rugarcía señaló que se debería participar en la Misa escuchando “con atención, responder, guardar silencio cuando debe de ser, ponerse de pie, sentarse o arrodillarse cuando deba hacerse”.
Finalmente, al momento de la Comunión, el Prelado mexicano alentó a “hacer una Comunión espiritual”.
POR DAVID RAMOS | ACI Prensa

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