El pasado 14 de
abril, el periódico mexicano Correo informó, a través de una
noticia en vídeo, de que los vecinos de la colonia Efrén
Capiz en la localidad de Salamanca (estado de Guanajuato, México) se quejaron
de la presencia de falsos sacerdotes católicos.
Éstos habían oficiado ceremonias religiosas en una capilla privada que
está dedicada a Cristo Juez y Sumo Sacerdote.
“No
hay certeza de que las Misas estén en manos de verdaderos sacerdotes”, según se puede escuchar en el
vídeo, que alude a la perplejidad de los vecinos al conocer un comunicado
emitido por la Diócesis de Mexicali (estado de Baja California) sobre las
actividades de falsos sacerdotes.
El dueño de la capilla privada
explicó, ante las cámaras, que los protagonistas de la noticia “son como padres que vienen buscando donde… predicar”. Según Martín Miranda Moreno, se acreditaron
documentalmente, e incluso “vino el obispo
de Chiapas y se acreditó también”, por
lo que considera que “son padres de verdad”.
ADVERTENCIA DEL
OBISPO DE IRAPUATO
Sin embargo, el diario Correo informa
de que, a través de un oficio, monseñor Enrique Díaz, obispo de la diócesis de
Irapuato, reveló que uno de los tres implicados,
Jaime Zavala, es ex seminarista, y otro, Mauricio Parra, dice ser capellán,
pero no se han ordenado.
Por eso el prelado alertó a los fieles, pues los presuntos
religiosos celebran bautizos, confirmaciones y primeras
comuniones, servicios por los que cobran y expiden recibos sin valor eclesiástico. De forma
que están usurpando funciones, aprovechándose de los
feligreses en tiempo de crisis.
¿QUIÉNES SON?
Mediante el comunicado
05/2020, titulado “Sacerdotes ambiguos” (véase
abajo), el obispo de Mexicali, monseñor José Isidro Guerrero, avisó el pasado
mes de febrero de la presencia de “grupos
ligados o desprendidos de esta Iglesia
Brasileña”, un movimiento cismático que en México y otros países “confunde a los fieles católicos”.
Monseñor Guerrero explica que
utilizan términos, ritos, imágenes y nombres católicos de forma equívoca, y
que “los responsables de estos grupos imparten ‘bendiciones’, administran
‘sacramentos’, realizan ‘exorcismos’. Esto es, anuncian actos que los
fieles católicos consideran estrecha y explícitamente ligados al poder
sacerdotal”.
Y recuerda en el comunicado
que “no hay garantía de validez para los sacramentos recibidos en
esta iglesia”, avisando a los
fieles con claridad de que “es gravemente ilícito frecuentar los actos
religiosos de estas ‘iglesias’, tomar parte en ellos, así como recurrir a sus
ministros”. Para facilitar su
identificación, se adjuntan las fotografías de Joseph Eduardo Torres Guerrero y
Mauricio Parra Solís, asociándolos a la llamada Iglesia Católica
Tradicionalista.
El otro comunicado (03/2020)
del obispo de Mexicali que se muestra en la noticia del diario Correo, también
del pasado mes de febrero, se cita a la Iglesia Católica
Tridentina del Espíritu Santo, a cuyos integrantes se considera “totalmente estafadores”.
LAS DECLARACIONES
DEL “OBISPO” CISMÁTICO
Dos días después de la
publicación de la noticia, el diario Correo publicó otra en la
que señala que desde la ciudad de México y por vía telefónica, Christian
Domínguez Hernández, “obispo” de la Iglesia Apostólica Conservacionista del Rito Tridentino, aclaró
que los “presbíteros” Mauricio Parra Solís y
Jaime Mauricio Zavala García no son falsos sacerdotes.
Además, aseguró que los
sacramentos que realizan como bautizos, confirmaciones y bodas, tienen
reconocimiento, aunque admitió que ellos profesan la
religión católica, pero no es la católica romana. “Es una rama de ésta como si fuera otra
religión, musulmana, testigos de Jehová u otras y esto están informados los
habitantes de la colonia Efrén Capiz”, dijo.
Según informa la periodista
Cuca Domínguez, en la capilla de Salamanca ofician misas los
sábados a las 6 de la tarde y
también pretendían realizar
bautizos y otros sacramentos, pero se cancelaron por las
medidas preventivas por el COVID19.
El responsable del grupo
cismático insiste en la validez de sus ritos, pero “la diferencia es que no hemos dicho que somos diocesanos
ni que pertenecemos a alguna congregación religiosa afiliada a Roma, siempre hemos dicho que pertenecemos a una
organización totalmente diferente a Roma; tenemos validez en la sucesión
apostólica y ellos son sacerdotes”.
RESPONDEN LOS
ACUSADOS
Ante los señalamientos de ser
falsos sacerdotes, el sacerdote Mauricio Parra contactó con Correo para
precisar que no son falsos sacerdotes, que no pretenden estafar a las personas,
como se dice en las publicaciones, y que han enviado al obispo de la diócesis
de Irapuato de la Iglesia católica romana, una carta para que se aclare el
malentendido que se tiene al respecto.
Incluso por ello no han
pensado en acudir a las instancias legales, “porque
somos gente que puede arreglar las cosas sin tener que llegar a esa medida, no
se pretende generar mayor divisionismo en estos tiempos que se requiere orar”, precisó.
Los señalados no quisieron que
se les tomaran fotos ni vídeos por recomendaciones de sus abogados que analizan
el caso, igual por instrucciones del obispo de esta “iglesia
del rito tridentino” y para no generar más daño a sus personas.
Finalmente, los involucrados
coincidieron en destacar que esperan aclarar el tema con el
obispado de Irapuato y si la
gente quiere que ellos sigan atendiéndolos y acompañándolos espiritualmente, lo
seguirán haciendo, aunque admiten que están temerosos por una serie de
agresiones que ya han sufrido y han puesto en riesgo su integridad.
Secretaría RIES
No hay comentarios:
Publicar un comentario