viernes, 5 de octubre de 2018

LA ELEGIDA, POESÍA A JUANA DE ARCO


Con esta poesía de Rosario de la Cueva inauguramos una nueva sección de poesía católica.
LA ELEGIDA
Y sopló el viento entre la altivez verde de los bosques.
Besó los cencidos y los vetustos robles, y sobre el Árbol de las hadas silbó anunciando: “Surgirá la doncella de los remansos de Domremy”.
Sus ojos negros serán carbones encendidos en la hoguera de la Fe.
Su estandarte blasonado de Lises, ondeará a los pies de las vetustas almenas de Orleans.
Y su voz, sonará nítida, y después trémula, cuándo vea tambalearse su alta misión.
Destilando maldad, los encapuchados rostros, macilentos, irán circundando
hasta el martirio a “La elegida”
Volará una blanca paloma de entre las rojas lenguas donde el odio transformará en ceniza la virtud.
Pero del firmamento descenderá una lágrima divina.
Apagando los rescoldos de aquel pecado inicuo.
Purificando para toda la eternidad, la memoria de JUANA, La Doncella. La Elegida.

Rosario de la Cueva.

No hay comentarios: