Como tú muy bien lo sabes: Yo soy chola carquinera, y para esto no hay ni cura ni espera.
San Pedro
apóstol y mártir es patrono de mi pueblo pescador, siete cruces benditas hay en
mi tierra que guían en la mar al hombre de mi amor.
Como neta
carquinera: ¡Yo soy madre de primera! y
buena esposa de cholo pescador,
con todo
amor.
Te lo
preparo anchoveta seca sacadita de la mar, arreglada y sobre el suelo con buen
sol en el tendal.
¡Es
mi técnica ancestral!
Por mi
abuela yo te lo preparo caldo de anchoveta, charquicán al ají colorado y arroz
achotado, también el chupín de pejesapo y el guiso de arracacha.
Porque yo
soy chola y legítima carquinera: yo soy Changa, yo soy Chinga, yo soy Landa soy
mujer de pachanga, de sano deporte comunal y carnaval.
De la
mano de mi madre, niñita y con mandil de vichí fui a vender pescado a Huacho.
¡Pampanito,
mismis, pintadilla, lisas, lornas de peña! ¿o va a llevar dos montoncitos
de
anchoveta seca de Carquín?
¡Va
cabinza, va jurel, va leonora! ¡Va pejerrey…!
Carquinero,
cuerpo y alma de pescador, pintero y peñero fino, que la mar siempre te
devuelva y no te arranque de mi corazón.
Cruces
benditas de Chorrillo, Cantagallo y Buenos Aires y el Kurkín séante propicios
en tu pesca de alta mar.
Por: Alejandro Smith Bisso (2021)
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