Cuatro bendiciones que
se manifestaron en José vendrán sobre ti, y sobre todos los que quieren agradar
a Dios: Liberación de toda angustia, sabiduría para resolver problemas, favor
que abre puertas y levantamiento para ser de influencia.
El libro de los Hechos 7:9-10 dice: “Por envidia los
patriarcas vendieron a José como esclavo, quien fue llevado a Egipto; pero Dios
estaba con él y lo libró de todas sus desgracias. Le dio sabiduría para ganarse
el favor del faraón, rey de Egipto, que lo nombró gobernador del país y del
palacio real”.
José padeció tribulaciones de todo tipo, sus propios hermanos
lo envidiaban por sus sueños y por tener algo especial de Dios. Era el menor, y
con maldad sus hermanos lo vendieron a unos esclavos de Egipto para deshacerse
de él, pero en todo lugar donde José estaba, el Señor lo ayudaba. Vemos cuatro
cosas que sucedieron en la vida de José, primero fue la liberación de todo
padecimiento, encontró liberación de todas las desgracias que atravesó, lo
segundo fue que recibió sabiduría, este don fue la provisión que necesitó para
poder enfrentar los problemas, lo tercero fue que se ganó el favor del faraón,
éste se sintió fascinado por la sabiduría de José. Lo cuarta manifestación
divina fue el levantamiento, la promoción. Por haber dado testimonio de
fidelidad, obediencia y sabiduría, el Señor lo exalto delante de todo el pueblo
y le dio un cargo de gran influencia.
Hagamos esta oración: “Padre celestial, hoy dejo de lado el desánimo, olvido los fracasos y las malas experiencias. Te pido que vengan a mí la liberación de toda angustia, tu sabiduría que me guía a la victoria, tu favor que abre todas las puertas y tu levantamiento que me promueve, lo pido, creo y declaro, en el nombre de Jesús, Amén.
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