El Catecismo de la Iglesia Católica, en los numerales 1030 y 1031, señala que “los que mueren en la gracia y en la amistad de Dios, pero imperfectamente purificados, aunque están seguros de su eterna salvación, sufren después de su muerte una purificación, a fin de obtener la santidad necesaria para entrar en la alegría del cielo”.
“La Iglesia llama purgatorio a esta
purificación final de los elegidos que es completamente distinta del castigo de
los condenados”.
Asimismo, San Gregorio Magno, Papa y Doctor de la Iglesia, enseñaba que "si Jesucristo dijo que hay faltas que no serán
perdonadas ni en este mundo ni en el otro, es señal de que hay faltas que sí
son perdonadas en el otro mundo”.
“Para que Dios perdone a los difuntos las faltas
veniales que tenían sin perdonar en el momento de su muerte, para eso ofrecemos
Misas, oraciones y limosnas por su eterno descanso".
Por ello, cercanos al día de los fieles difuntos, que la Iglesia
conmemora cada 2 de noviembre, aquí una novena para pedir a Dios por las Almas
del Purgatorio:
PRIMER
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día primero:
Señor mío Jesucristo, que quieres que tengamos suma delicadeza de
conciencia y santidad perfecta: te rogamos nos la concedas a nosotros; y a los
que por no haberla tenido se están purificando en el purgatorio, te dignes
aplicar nuestros sufragios y llevarlos pronto de aquellas penas al cielo. Te lo
pedimos por la intercesión de tu Madre purísima y de San José.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
SEGUNDO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor
mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las
cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa porque
podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia propongo
firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere
impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día segundo:
Señor mío Jesucristo, que eres cabeza de todos tus fieles cristianos que
en ti nos unimos como miembros de un mismo cuerpo que es la Iglesia: te
suplicamos nos unas más y más contigo y que nuestras oraciones y sufragios de
buenas obras aprovechen a las ánimas de nuestros hermanos del purgatorio, para
que lleguen pronto a unirse a sus hermanos del cielo.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
TERCER
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres, hermanos,
hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para que
podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día tercero:
Señor mío Jesucristo, que a los que pecan castigas con justicia en esta
vida o en la otra: concédenos la gracia de nunca pecar y ten misericordia de
los que, habiendo pecado, no pudieron, por falta de tiempo, o no quisieron, por
falta de voluntad y por amor del regalo, satisfacer en ésta vida y están
padeciendo ahora sus penas en el purgatorio; y a ellos y a todos llévalos
pronto a su descanso.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
CUARTO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día cuarto:
Señor mío Jesucristo, que exiges la penitencia aun de los pecados
veniales en este mundo o en el otro: danos temor santo de los pecados veniales
y en misericordia de los que, por haberlos cometido, están ahora purificándose
en el purgatorio y líbralos a ellos y a todos los pecadores de sus penas,
llevándoles a la gloria eterna.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
QUINTO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día quinto:
Señor mío Jesucristo, que a los regalados en esta vida, que no pagaron
por su culpa o no tuvieron bastante caridad con el pobre, castigas en la otra
con la penitencia que aquí no hicieron: concédenos las virtudes de la
mortificación y de la caridad y acepta misericordioso nuestra caridad y
sufragios, para que por ellos lleguen pronto a su descanso eterno.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten piedad
de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la) de
nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor. Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
SEXTO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día sexto:
Señor mío Jesucristo, que quisiste que honrásemos a nuestros padres y
parientes y distinguiésemos a nuestros amigos: te rogamos por todas las ánimas
del purgatorio, pero especialmente por los padres, parientes y amigos de
cuantos hacemos está novena, para que logren el descanso eterno.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
SÉPTIMO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día séptimo:
Señor mío Jesucristo, que a los que no se preparan a tiempo para la
muerte, recibiendo bien los últimos sacramentos y purificándose de los residuos
de la mala vida pasada, los purificas en el purgatorio con terribles tormentos:
te suplicamos, Señor, por los que murieron sin prepararse y por todos los
demás, rogándote que les concedas a todos ellos la gloria y a nosotros recibir
bien los últimos sacramentos.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
OCTAVO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor
mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas las
cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa porque
podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina gracia propongo
firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuere
impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre,
salvándolas de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día octavo:
Señor mío Jesucristo, que a los que vivieron en este mundo demasiado
aficionados a los bienes terrenales y olvidados de la gloria, los retienes
apartados del premio, para que se purifiquen de su negligencia en desearlo:
calma, Señor misericordioso, sus ansias y colma sus deseos, para que gocen
pronto de tu presencia, y a nosotros concédenos amar de tal manera los bienes
celestiales, que no deseemos desordenadamente los terrenos.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
NOVENO
DÍA DE LA NOVENA POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Acto de Contrición
¡Señor mío, Jesucristo! Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y
Redentor mío; por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre
todas las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra divina
gracia propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir la penitencia
que me fuere impuesta. Amén.
Oración propia de la
Novena
Padre misericordioso, en unión con la Iglesia Triunfante en el cielo, te
suplico tengas piedad de las almas del Purgatorio. Recuerda tu eterno amor por
ellas y muéstrales los infinitos méritos de tu amado Hijo. Dígnate librarles de
penas y dolores para que pronto gocen de paz y felicidad. Dios, Padre
celestial, te doy gracias por el don de perseverancia que has concedido a las
almas de los fieles difuntos.
Amable Salvador, Jesucristo. Eres el Rey de reyes en el país de la
dicha. Te pido que por tu misericordia oigas mi oración y liberes las almas del
Purgatorio, en particular, N... Llévalas de la prisión de las tinieblas a la
luz y libertad de los hijos de Dios en el Reino de tu gloria. Amable Salvador,
te doy gracias por haber redimido las pobres almas con tu preciosísima Sangre, salvándolas
de la muerte eterna.
Dios Espíritu Santo, enciende en mí el fuego de tu divino amor. Aviva mi
fe y confianza, acepta benignamente las oraciones que te ofrezco por las almas
que sufren en el Purgatorio. Quiero aplicar los méritos de esta devoción en
favor de toda la Iglesia Sufriente y en especial por mis difuntos padres,
hermanos, hermanas, bienhechores, parientes y amigos. Atiende mi plegaria para
que podamos reunirnos en el Reino de tu gloria.
Dios Espíritu Santo, te doy gracias por todos los beneficios con que has
santificado, fortalecido y aliviado a estas benditas almas y en especial por
consolarlas en los actuales sufrimientos con la certeza de la felicidad eterna.
Que pronto se unan contigo y oigan aquellas benditas palabras que las llaman al
hogar del Cielo: "¡Vengan, los Bendecidos por mi Padre! Tomen posesión del
Reino que ha sido preparado para ustedes desde el principio del mundo" (Mt
25, 34).
Día noveno:
Señor mío Jesucristo, cuyos méritos son infinitos y cuya bondad es
inmensa: mira propicio a tus hijos que gimen en el purgatorio anhelando la hora
de ver tu faz, de recibir tu abrazo, de descansar a tu lado y; mirándolos,
compadécete de sus penas y perdona lo que les falta para pagar por sus culpas.
Nosotros te ofrecemos nuestras obras y sufragios, los de tus Santos y Santas;
los de tu Madre y tus méritos; haz que pronto salgan de su cárcel y reciban de
tus manos su libertad y la gloria eterna.
Oración por un miembro
de la familia
¡Oh Buen Jesús! El dolor y sufrimiento de los demás conmovía siempre tu
corazón. Mira con piedad las almas de mis queridos familiares del Purgatorio.
Oye mi clamor de compasión por ellos y haz que aquellos a quienes separaste de
nuestros hogares y corazones disfruten pronto del descanso eterno en el hogar
de tu amor en el cielo.
Oración por los padres
difuntos
¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu misericordia, ten
piedad de mi padre (madre) y no recuerdes sus pecados. Que yo pueda verlo (la)
de nuevo en el gozo de eterno fulgor. Te lo pido por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Oración para las almas
del purgatorio
(El Señor le dijo a Santa Gertrudis, vidente del
Sagrado Corazón de Jesús, que cada vez que rezara esta oración, pudiese librar
1000 almas del purgatorio).
Padre eterno, yo te ofrezco la preciosísima sangre de tu Divino Hijo
Jesús, en unión con las Misas celebradas hoy día a través del mundo por todas
las benditas ánimas del purgatorio por todos los pecadores del mundo.
Por los pecadores en la iglesia universal, por aquellos en propia casa y
dentro de mi familia. Amén.
Oración final
¡Oh Dios! Nuestro Creador y Redentor, con tu poder Cristo conquistó la
muerte y volvió a Ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la
fe (especialmente N...) Participen de su victoria y disfruten para siempre de
la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo,
Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
Dales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos
la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.
María, Madre de Dios, y Madre de misericordia,
ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.
En el nombre del Padre y del Hijo
y del Espíritu Santo. Amén.
Redacción ACI Prensa
No hay comentarios:
Publicar un comentario